Diario de Sesiones 105, de fecha 7/2/2018
Punto 14

9L/PNL-0530 PROPOSICIÓN NO DE LEY, DEL GRUPO PARLAMENTARIO SOCIALISTA CANARIO, SOBRE LA ELIMINACIÓN DE LOS PREJUICIOS CULTURALES Y LOS ESTEREOTIPOS SEXISTAS O DISCRIMINATORIOS EN LOS LIBROS DE TEXTO Y MATERIALES CURRICULARES.

La señora PRESIDENTA: Seguimos, señorías, con la siguiente PNL, la 530, del Grupo Socialista Canario, sobre la eliminación de los prejuicios culturales y estereotipos sexistas o discriminatorios en los libros de texto y materiales curriculares.

Para su defensa, el señor Corujo.

(Abandona su lugar en la Mesa la señora presidenta. Ocupa la Presidencia el señor vicepresidente primero, De la Hoz Fernández).

El señor CORUJO BOLAÑOS: Buenas tardes, señorías.

Esta proposición no de ley viene como consecuencia de una pregunta que tuve la oportunidad de llevar al último pleno en nombre de mi grupo. Además lo cierto es que lo anunciamos en aquel momento y que realmente fue bien recibido por todos los grupos.

La proposición no de ley que presentamos hoy tiene varias partes.

La primera, que es la revisión de los textos desde una perspectiva de la ley de igualdad. Les confieso que realmente estuve evaluando si incluirlo o no pero creo que ha quedado absolutamente en contexto. Lo hemos visto en este mismo pleno cuando hemos hablando de la violencia de género, lo importante que es abordarlo desde etapas tempranas y lo importante que es incluirlo en las fases tempranas de la educación.

Y, por otro lado, la visibilización de los diferentes modelos de familia, que es en lo que me gustaría realmente centrarme. Existen fórmulas realmente en la legislación actual. Podemos hablar del artículo 18 de la Ley 1/2010, sobre igualdad, podemos hablar de la Ley Canaria de Educación no Universitaria, podemos hablar del artículo 9 de la Constitución española en cuanto a la igualdad real, el artículo 14 en cuanto a la igualdad formal, pero esto no es una clase de Derecho, esto no es un debate jurídico; eso sería estar alejados de lo que la sociedad espera de nosotros y eso sería realmente abordar solamente el problema de forma cuando lo importante es abordar el problema de fondo. Esta es una de esas cuestiones a las que hay que ponerle corazón, esta es una de esas cuestiones a las que hay que ponerle emoción, esta es una de esas cuestiones que hay que tratar desde la perspectiva de la persona.

Yo me siento verdaderamente orgulloso de mi partido político y de su compromiso con la diversidad y el compromiso con la igualdad, pero lo cierto es, señorías, que les reconozco a todos y cada uno de ustedes que, de sus gafas ideológicas con las que ven el mundo, estoy seguro de que están igual, igualmente sensibilizados con que ningún niño en su clase se sienta diferente porque tiene dos mamás, porque tiene dos papás, porque tiene solamente una mamá, porque se ha criado con sus abuelos, por decisiones impuestas por las circunstancias de la vida o por decisiones de otro tipo; quizás porque sus mamás han decidido ser coherentes con su forma de sentir y no seguir un modelo de familia tradicional; quizás porque su papá se fue.

Hoy ya los colegios celebran el día de la familia y no el día del papá y el día de la mamá, precisamente para que ningún niño se sienta diferente. Por tanto, los profesores y profesoras realmente son conscientes de este problema. De hecho, son los que apuntalan esta visión, es decir, ante la insuficiencia de los libros de texto, que es lo que vamos a ver hoy, son los maestros y maestras los que apuntalan ese problema y explican a aquellos niños, explican a todos los niños evidentemente pero estoy seguro de que con especial sensibilidad en el caso de niños y niñas que se sienten diferentes, que su familia sí que es normal, que es exactamente igual de familia tener dos mamás o tener dos papás que tener la familia tradicional perfecta: el papá, la mamá, los abuelos, el niño, la niña, etcétera.

En este momento quiero agradecer la labor de esos profesionales y estoy seguro de que todos ustedes también están sensibilizados con ellos; es decir, estoy seguro realmente de que van a apoyar esta proposición no de ley, aunque no haya hablado personalmente con ustedes, porque conozco esa sensibilidad. Estoy seguro de que también quieren reconocer esa labor de los profesores, pero lo que vamos a pedir ahora es que no tengan que hacerlo, porque nosotros estamos aquí... Hoy me preguntaban, de hecho: "¿y esto por qué crees que es necesario?" -me lo preguntaron en una entrevista de radio-. Pues yo creo que nuestro papel en el Parlamento es intervenir cada vez que tenemos la oportunidad de hacer una sociedad que sea más justa, de hacer una sociedad que sea más diversa y de hacer una sociedad que sea más igual. Esta es una oportunidad maravillosa para hacerlo, esta es una oportunidad para evitar que esos niños y niñas se sientan diferentes. Por tanto, sería feo por nuestra parte no hacer lo que está en nuestra mano para conseguirlo.

Señorías, yo creo que no es necesario extenderse más en esta cuestión. Me gustaría escucharles, escuchar a los demás portavoces. Me gustaría que se trasladara desde un punto de vista sensible y me gustaría, si lo tienen a bien, que se pusieran en la piel de esos niños que no entienden, viendo las fotos de su libro de texto, por qué su familia no aparece representada como una familia normal.

Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Corujo.

Esta iniciativa tiene una enmienda del Grupo Nacionalista. La señora García.

La señora GARCÍA MARTÍNEZ: Gracias, señor presidente. Buenas tardes, señorías. Gracias también al proponente de esta iniciativa. Es verdad que usted, en una pregunta en el último pleno, hacía referencia a ello y nosotros, desde el Grupo Nacionalista Canario, también hacíamos referencia, cuando abordábamos el Protocolo de acompañamiento al alumnado trans, a la necesidad de que aparezca en los libros de texto la realidad precisamente del alumnado trans.

Desde el Grupo Nacionalista Canario valoramos y apoyamos la iniciativa del señor Corujo, pero hemos querido complementarla con una referencia explícita, como decía, a la realidad trans. En las reuniones y conversaciones que hemos venido manteniendo con madres y padres de alumnado trans nos han insistido en la necesidad de explicitar su realidad, de nombrarla con todas sus letras, para ayudar precisamente a lo que decíamos entonces y lo que volvemos a decir hoy: para ayudar a normalizar esta realidad trans. Así lo pedía la señora Eva Pascual, presidenta de Chrysallis, en su intervención en el Senado del día 27 de noviembre de 2017.

Por lo demás, totalmente de acuerdo con todo lo que dice la argumentación de esta PNL. Es verdad que la Consejería de Educación, como usted bien ha dicho, también está trabajando en la línea de ir formando al profesorado, poniendo incluso en los centros un coordinador de igualdad. Se hacen actividades, se elaboran materiales curriculares para poder trabajar todos estos temas, se trabaja en el aula en torno a la identidad sexual, a la autonomía personal, en múltiples facetas, incluida la sexual, pero también es verdad que cuando abrimos un libro de texto los estereotipos sexistas siguen repitiéndose. La experiencia nos indica que a la hora de la verdad, si el plan académico no te dice explícitamente que tienes que hacer referencia a la diversidad familiar, a la igualdad entre mujeres y hombres y a las personas trans en los contenidos, al final acaba obviándose. El profesorado, como decía, tiene bastantes responsabilidades ya. Ahora mismo, acabamos de ver, acoso, igualdad, cuidado del medio ambiente, alimentación saludable, aparte de todos los contenidos en las distintas materias. Por eso, por eso, hay que poner en sus manos las herramientas, en este caso, que hablamos de libros de texto, los libros de texto ya con esos contenidos.

Un estudio comparativo, hecho por una investigadora de la Universidad Autónoma de Barcelona, indicaba recientemente, sobre los libros de Sociales y Geografía, que solo había un 7 % de referencias femeninas, un 3 % de personas de fuera de Europa, 2 % de personas de clase baja y solo se hablaba en una ocasión de una persona gitana. La conclusión a la que llegaba es que los libros tienen un discurso intercultural y de paz implícito que no se da. Están hechos desde una posición de poder de grupos blancos, europeos y de clase media, que acaban invisibilizando a ciertos colectivos: a las familias, a la variedad de familias, y a la realidad trans también.

Y si nos referimos a la realidad transexual, la situación es mucho peor. Por eso las familias han dado un golpe en la mesa y han decidido que no podían seguir tolerando la infelicidad de sus hijas e hijos. Luchan contra quienes siguen considerando a la transexualidad como una patología, disforia o incongruencia de género. Por eso es el momento de ayudar también desde el ámbito educativo dotándolos de materiales curriculares que recojan esta realidad del sexo registral y del sexo sentido, y sé que la Consejería de Educación -ya lo decía en su momento- somos un referente a nivel nacional con ese Protocolo de acompañamiento al alumnado trans.

Tenemos que acabar con que se siga enseñando Matemáticas, Lengua, Sociales, Naturales, Inglés utilizando siempre como ejemplo un solo tipo de familia y obviando, con intención o sin ella, a las familias monoparentales, homoparentales, a las reconstituidas, a los padres separados o divorciados y, por supuesto, a las personas trans.

Desde el Grupo Nacionalista Canario vamos a apoyar, como no podía ser de otra manera, esta iniciativa.

Muchas gracias, señor Corujo.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Muchas gracias, señora García.

El grupo proponente, para ratificar o no la enmienda.

El señor CORUJO BOLAÑOS (Desde su escaño): Gracias, presidente.

En primer lugar, decir que efectivamente, claro que vamos a aceptar la enmienda, y además agradecerla porque enriquece el texto, y ciertamente nos habíamos dejado atrás este aspecto.

Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Muchas gracias, señor Corujo.

Turno de los grupos no enmendantes. Por el Grupo Mixto, señora Mendoza.

La señora MENDOZA RODRÍGUEZ (Desde su escaño): Gracias, presidente. Buenas tardes, señorías.

Señor Corujo, la igualdad no ha llegado a los libros y lo peor es que tampoco se la espera. Los intereses comerciales han primado sobre los educativos. No se han hecho grandes reformas en los libros de texto pese a haber transcurrido más de diez años desde que fuera aprobada la ley de igualdad y casi ocho años desde la aprobación de la Ley Canaria de Igualdad entre Mujeres y Hombres. Las mujeres siguen siendo invisibles. Realizando un recuento en uno de los libros de Literatura de 1.º de Bachillerato se contabilizaron 157 autores masculinos frente a 7 autores que se encontraron en todo el texto femeninos. Y lamentablemente esto no es un hecho anecdótico. La invisibilidad de las mujeres en los libros de texto de la ESO ha sido objeto de análisis y de estudio realizado por la Universidad de Valencia. La referencia a mujeres en los manuales escolares de enseñanza secundaria es apenas del 7 %, cifra que disminuye hasta el 5 % en materia de ciencia y ya de un 1 % si nos vamos a materias como Tecnología. Esto no es una cuestión baladí, afecta de lleno al desarrollo de las niñas, quienes aprenden a subestimar las capacidades de su propio género a los 6 años, alejándose de la actividad reservada para los muy listos, ante la falta de referentes femeninos que ya ponen en duda su propia capacidad.

Las mujeres deben aparecer, pero es también importante el modo en el que aparecen. Deben eliminarse los estereotipos, también los estereotipos familiares, por supuesto, estamos totalmente de acuerdo. Los estereotipos impregnan las páginas de textos, aparecen en los enunciados de los problemas de Matemáticas, en las imágenes, en los sintagmas que tenemos que analizar. En los libros de texto que manejan los niños y las niñas de Canarias las mujeres van de compras, son madres, amas de casa, viajeras, vendedoras, azafatas, voluntarias y recibidoras de bombones, que están buenos pero ya es suficiente. ¿Dónde están las arquitectas, dónde están las políticas, dónde están las ingenieras, dónde están las cantantes de rock? ¿Dónde los distintos tipos de familia existentes en nuestra sociedad actual? ¿Dónde están esas familias monoparentales, dónde están esas familias homosexuales? No existen, simplemente no existen. A esto se le llama sexismo lingüístico. Por supuesto todo repercute directamente en la desigualdad, una desigualdad que se enseña y se aprende.

El material escolar discriminatorio y estereotipado revierte en la eterna brecha salarial entre mujeres y hombres, en el indiscutible techo de cristal que impide el acceso femenino, en la falta de conciliación familiar, en la falta de conciliación laboral...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señora Mendoza.

Turno del Grupo de Nueva Canarias. Señora González.

La señora GONZÁLEZ GONZÁLEZ (doña María Esther): Gracias, presidente.

Al igual que dije en mi anterior intervención, lo que desde Nueva Canarias, desde mi formación política desearíamos es que algún día no haga falta hablar sobre medidas para adoptar o para garantizar una sociedad igualitaria, y eso, indudablemente, el que tengamos una convivencia pacífica en una sociedad pasa inexcusablemente por la educación y por la concienciación en igualdad.

Pocos principios como la igualdad tienen un mayor apoyo en toda clase de foros, en toda clase de documentos, en las declaraciones internacionales de derechos humanos, las constituciones, las leyes, los reglamentos, pero con la igualdad ocurre lo mismo que con la corrupción, que no hay quien se oponga a ella, no hay quien defienda la desigualdad como no hay quien defienda la corrupción. Pero la pregunta es, si todo el mundo defiende la igualdad, si todos los poderes públicos, todos, ponen tanto esfuerzo, tanta dedicación y tantos recursos en pro de la igualdad, ¿por qué sigue existiendo tanta desigualdad y tan pocas perspectivas de reducirla? Pues la conclusión a la que yo he llegado es porque, aunque tenemos leyes muy pioneras en materia de igualdad, ni se aplican y en muchos casos tampoco se desarrollan, y una de las razones de esa inaplicación es que a través de las leyes se ha querido incluir la igualdad en la sociedad de manera forzada, se ha querido poner la igualdad como un imperativo, y la igualdad es y debe transmitirse como una forma de vivir, como una forma de estar en la sociedad, o sea, como una filosofía de vida. Y eso lo único que lo soluciona es la concienciación y la educación.

Y hay una realidad: que tras una década de existencia de la ley estatal de igualdad, de ocho de la ley canaria y de muchos cambios en las normativas educativas, ni el Gobierno de España ni el Gobierno de Canarias han dado los pasos necesarios para garantizar la presencia de las mujeres, por ejemplo, en los libros, al igual que tampoco han garantizado la presencia de las diversidades familiares en los libros. En el caso de la mujer, una invisibilidad que incide además de manera directa en que la desigualdad se perpetúe generación tras generación. Como decía antes la portavoz del Grupo Mixto, las mujeres y los logros, nuestros logros, aparecen poco en los libros de texto y, cuando aparecen, aparecen de forma estereotipada. Aparecemos como parte pasiva de la sociedad, mientras la parte activa de la sociedad, la parte productiva de la sociedad, los políticos, los arquitectos, los ingenieros, los granjeros o los camioneros son hombres. Y si queremos una sociedad en la que impere el respeto, la solidaridad y la igualdad, el primer peldaño que hay que remover es el educativo. Lo primero que hay que hacer es hacer efectiva la educación en igualdad.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Muchas gracias, señora González.

Turno del Grupo Podemos. La señora Del Río.

La señora DEL RÍO SÁNCHEZ: Bueno, pues, buenas tardes y otra vez volvemos a hablar de este tema, que antes lo hemos denunciado también.

Yo también le agradezco mucho la PNL y me parece muy interesante por la doble vertiente que tiene y creo que, aunque hayamos hablado muchas veces, tenemos que seguir hablando porque de nada está sirviendo, como podemos verificar, que ya hemos hecho mucho... (ininteligible) si no conseguimos esa igualdad real y efectiva.

Es una vergüenza -ya lo han comentado las compañeras que me han precedido antes- que diez años después de la ley de igualdad a nivel estatal, ocho años de la de Canarias, cuatro años después de la ley de educación, en ambas se recoge, en el caso de los libros de texto, la necesidad de que estén incluidas, de que no haya discriminación... Hay artículos perfectamente definidos que lo nombran, pero no se cumplen. Y no se cumplen como no se cumplen tantas otras cosas de esa ley de igualdad, que es de las leyes yo creo que más bonitas que tenemos en Canarias. Yo me la he leído bastantes veces. Realmente era supervanguardista, muy interesante, ¿pero de qué sirve? No la cumplimos. No la cumplimos cuando elegimos los organismos que dependen también de este Parlamento. No está reflejada en el Consejo Consultivo, no está reflejada en la Audiencia de Cuentas, no está reflejada en el Diputado del Común, que se llama del "Diputado del Común", que hay una propuesta también de cambiarle el nombre.

Claro que hay que cambiar en los libros y hay que cambiar en las editoriales, y para eso, porque los currículos también tienen que ver con el Ministerio de Educación, la Lomce era una buena oportunidad, porque los libros, las editoriales de los libros, la mayor parte de ellas, pertenecen a empresas católicas con un pensamiento conservador, que tampoco están dispuestas a hacer grandes revoluciones en los libros de texto, si no les exigimos que cumplan con una normativa. Y esto, para que se cumpla, lo tenemos que exigir desde las comunidades autónomas, que tenemos competencias en los currículos, y desde el Estado, a nivel estatal, también, poniendo currículos claros donde todo quede perfectamente reflejado. Exigirle a una empresa privada, que en principio si nadie le pide hace lo que quiere y que funcione.

Y después, hay una cosa más, los colegios y los profesores, los centros educativos, tienen libertad de cátedra; de hecho, hay centros donde no se utiliza ningún libro de texto y se hacen experiencias muy interesantes de aprendizaje crítico y a lo mejor se utilizan solamente para observar cómo se discrimina a través de ellos. Es decir, hay muchas cosas que hacer, tenemos las herramientas. Está aquí la consejera de Educación y yo sé que ese tema también le preocupa, pero no se trata solo de que lo pongamos sobre los papeles -hasta ahí yo creo que en Canarias estamos bien, podemos sacar incluso un sobresaliente en la parte teórica-, tenemos el problema de llevarlo a la práctica.

Y vuelvo a insistir: necesitamos recursos. Los docentes, si no tienen todos los cursos de igualdad, como se accede, el CAP... ¿qué parte del currículo del CAP, que te habilita para ser docente, tiene que ver con la perspectiva de género y con tener una capacidad de análisis crítico de la igualdad? Pues prácticamente ninguna. Entonces, ¿qué ocurre? Son temas transversales que se tienen que dar desde el profesorado, pero sabemos que la tendencia de lo transversal, no sé por qué, a lo invisible y a lo inexistente va muy relacionada, y lo sabemos las que hemos dado clase en institutos, cómo se obvia, porque la igualdad es algo transversal.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señora Del Río.

Turno del Grupo Popular. Señora Navarro.

La señora NAVARRO DE PAZ (Desde su escaño): Gracias, presidente.

Con ánimo de no ser reiterativa, por supuesto que mostramos, en primer lugar, el apoyo de mi grupo a esta proposición no de ley, por los argumentos ya esgrimidos por quienes me han precedido en el uso de la palabra. Evidentemente que tenemos que garantizar que tanto en los libros de texto como en los materiales curriculares se elimine cualquier tipo de prejuicio cultural y estereotipos sexistas o discriminatorios o que aparezcan descritas situaciones de desigualdad. Y también tenemos que favorecer que se introduzca, pues, la realidad social, que no es otra que hoy, a día de hoy, existen diferentes modelos de familia.

Pero, dicho esto, quiero que me permitan sus señorías compartir con ustedes una reflexión. Existen otras herramientas, tanto internet como las redes sociales, que son instrumentos de socialización más potentes, más potentes que los libros de texto o incluso lo que estamos comentando y, claro, además influyen, tanto internet como las redes sociales, influyen mucho a los jóvenes de 12 años, en edad adolescente, hasta su mayoría de edad. Y, claro, es difícil si nosotros, los políticos, no damos ejemplo, no damos ejemplo con nuestras propias actitudes, porque nosotros estamos obligados a ese ejemplo que se nos exige más allá de a cualquier ciudadano. Entonces, claro, yo lo que pido es que no hagamos un discurso hoy aquí, que todos quedamos bien, y después no recriminemos cuando gente, que además tienen responsabilidades públicas y que pertenecen a formaciones políticas que están hoy presentes aquí, no hay una recriminación pública, una llamada de atención e incluso algo más cuando ponen a políticas, mujeres, en actitudes sexistas, políticas además pertenecientes a este Parlamento de Canarias, en una actitud tan vejatoria como no puede ser otra que -me lo van a permitir pero quiero ser gráfica y lo voy a decir con el máximo respeto que me merece esta Cámara- tocándole los genitales, tocándole los genitales, ella política, a un hombre político.

(La señora presidenta se reincorpora a su lugar en la Mesa).

Por lo tanto, yo lo que pido a todos nosotros, a mi grupo político el primero, es coherencia, coherencia, porque si nosotros no nos levantamos, no denunciamos y no nos enfadamos tremendamente con quien es capaz de representar a la ciudadanía, ya sea en un pueblo, en una isla o a nivel autonómico, que practica estas actitudes, no podemos hoy atrevernos a defender lo que hoy defendemos por parte de todos.

Muchas gracias.

(Aplausos).

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señora Navarro.

Una vez han intervenido todos los grupos y con la aceptación de la enmienda, llamo a votación, señorías (la señora presidenta pulsa el timbre de llamada a la votación). (Pausa).

Señorías, comienza la votación. (Pausa).

Señorías, 45 votos emitidos: 44 sí... -se equivocó-, 45 votos emitidos: 44, sí, 1 no y 1 abstención, y con error incluido.

Seguimos, señorías.