Diario de Sesiones 140, de fecha 28/3/2007
Punto 23

'· 6L/AGIV-0004 Comisión de investigación. Para esclarecer los hechos y actuaciones de las administraciones públicas canarias, así como la determinación de las responsabilidades consecuencia del concurso público convocado por la Consejería de Industria, Comercio y Nuevas Tecnologías, relativo a la energía eólica: dictamen de la comisión.'

'El señor presidente: Punto del orden del día: comisiones de investigación. En primer lugar, comisión de investigación para esclarecer los hechos y actuaciones de las administraciones públicas canarias, así como la determinación de las responsabilidades consecuencia del concurso público convocado por la Consejería de Industria, Comercio y Nuevas Tecnologías, relativo a la energía eólica: dictamen de la comisión.'

'Sus señorías saben que, en virtud del acuerdo de la Junta de Portavoces, este dictamen, así como el siguiente -los dos son dictámenes de las comisiones de investigación-, el debate se producirá de la siguiente manera: en primer lugar habrá una intervención de aquellos grupos parlamentarios que hayan presentado votos particulares; si hubiera más de un voto particular, se defenderán, por la importancia del grupo, de menor a mayor; una vez defendidos los votos particulares, intervendrán los grupos que no han presentado voto particular, también en una única intervención de una duración de 20 minutos, tanto para la defensa del voto particular como para la posición del grupo en relación con el dictamen. Finalizado ese debate de un único turno de 20 minutos para cada grupo, se someterá a votación, en primer lugar, el voto particular y, en caso de que sea aprobado y sea el sustitutivo del dictamen, no se votará el dictamen, lógicamente; y si el voto particular es de adición, inmediatamente se votará el dictamen.'

'La votación, no se ha podido, al contrario de lo que les había dicho esta mañana, no se ha podido reparar el sistema de votación electrónica y, por tanto, como no aparecen los diputados, el sentido del voto de cada diputado, vamos a hacer, igual que hicimos la semana pasada, la votación levantán­dose sus señorías en el sentido del sí, del no o de la abstención.'

'¿Hay alguna duda al respecto? (Pausa.)'

'Pues comenzamos con el dictamen de comisión de esta primera comisión de investigación y a esta comisión... (Rumores en la sala.) Perdón, por favor, un poco de silencio, que se oye mal y además es... En relación con el relativo a la energía eólica, se ha presentado un voto particular por parte del Grupo Parlamentario Socialista. Para la defensa del voto particular y fijación de posición sobre el dictamen, en nombre del Grupo Socialista tiene la palabra el señor Pérez.'

'El señor Pérez García: Señor presidente. Señoras y señores diputados.'

'Unas primeras palabras para referirme al ambiente y a las circunstancias en las que se ha producido la labor investigadora del Parlamento de Canarias.'

'Esta ha sido una investigación parlamentaria que ha discurrido en paralelo, simultáneamente, a una investigación judicial sobre los mismos hechos. Algún grupo parlamentario comentó, cuando se discutía en este Parlamento la con­veniencia de constituir una comisión inves­tigadora, algún grupo parlamentario manifestó que había que dejar terminar la investigación judicial para luego, en su caso, abrir un procedimiento para la exigencia de responsabilidades parlamentarias. El grupo, los grupos que plantearon esta cuestión no han tenido el menor impedimento, llegada la terminación de la legislatura, para cerrar apresura­damente la labor investigadora del Parlamento, para tratar de fijar unas conclusiones diame­tralmente opuestas en muchos aspectos a las que van resultando de la investigación judicial y, además, para dar un paso más en esta última fase, al que luego me referiré.'

'Coalición Canaria y el Partido Popular, en el acuerdo de última hora que han suscrito, han perseguido una serie de objetivos políticos en la culminación de esta labor investigadora. Objetivos políticos que colocan a este Parlamento, una vez más, ante la frustración de una de las labores más características de los parlamentos democráticos: la función investigadora. Es la función que más se parece materialmente, en las democracias avanzadas, a la labor judicial y no en vano porque en la historia del parlamentarismo algunas de las funciones que realizaron los parlamentos eran también funciones de naturaleza judicial.'

'En este episodio investigador se han dado también algunas circunstancias, a nuestro modo de ver, paradójicas. La primera de ellas, y que modestamente creemos que contradice los principios comunes de los pueblos civilizados, ha consistido en que una autoridad, que podía verse involucrada, relacionada con los hechos inves­tigados, ha participado en la investigación. ¿Habrá algún precepto en nuestro ordenamiento jurídico que lo impida? Con toda seguridad y hay varios: en las leyes procesales, que tienen carácter de Derecho común, pero, en cualquier caso, lo exigen los principios comunes de los pueblos civilizados. Una autoridad no puede participar ejerciendo sus funciones de autoridad en ningún asunto con el que pueda estar relacionada.'

'Y otro factor que nos ha llamado la atención y que lo hemos puesto de manifiesto en la sesión de la comisión que dictaminó las conclusiones de esta investigación: en cualquier tipo de investigación, en un Estado de Derecho, en un país civilizado, sea judicial, sea parlamentaria, sea administrativa, cualquier investigación reglada por el Derecho, hay un principio crucial, el de la inmediatez, porque es la inmediatez la que les permite a las personas responsables de la investigación poder evaluar la fiabilidad de los testigos, poder comprobar el resultado de las pruebas, de tal manera que lo lógico es que quienes participan en la investigación sean luego quienes elaboran las conclusiones de las mismas. Cuando no se hace así, y aquí hay un grupo que no lo ha hecho así, es como si después de un procedimiento judicial basado en el principio de la oralidad, como el procedimiento penal, tradicionalmente, a la hora de dictar la sentencia, se cambiara al juez que presidió el procedimiento para nombrar a otro que aprobara la sentencia.'

'Son elementos verdaderamente difíciles de entender, no ya en el parlamento de una sociedad democrática, en las actuaciones regladas por el Derecho de cualquier país civilizado.'

'¿Qué han pretendido las conclusiones que figuran en el dictamen, frente al que nuestro grupo ha presentado un voto particular? Yo creo que, en primer lugar, establecer un cinturón sanitario; una especie de cortafuegos entre la Dirección General de Industria, en la que se estaban elaborando las bases del concurso de potencia eólica, y la estructura de la consejería. Esto es relativamente fácil observarlo cuando cotejamos la propuesta de conclusiones, de hechos, que, según una de las ponentes de Coalición Canaria, la señora Allende Riera, resultaban de la investigación y el dictamen definitivo pactado por Coalición Canaria y el Partido Popular. Decía, en la relación de hechos que iba adelantando la señora Allende, que entre junio de 2004, entre mayo de 2004 y junio de 2005, se vislumbra una falta de control en las actuaciones de la Dirección General de Industria y esta circunstancia le permitió al director general de Industria un margen de maniobra para operar en la elaboración de las bases y en todo este procedimiento, en los términos en que ya sus señorías conocen y que yo no voy a repetirles.'

'Miren, hay un partido político que hace algunos años, pocos, aplicó intensamente, en el terreno de la responsabilidad política, dos principios, dos principios de los que hicieron doctrina casi indiscutible: el principio de la culpa in eligendo y el principio de la culpa in vigilando. El principio de la culpa in eligendo tiene que ver con el error en la designación de un cargo público que luego ha incurrido en responsabilidades políticas; y el principio de la culpa in vigilando implica que la autoridad de la que depende otra no ejerza una labor de control, de seguimiento, y de ello para la autoridad superior pueden derivarse responsabilidades políticas. Esto se ha tratado de eliminar radicalmente, en contra de los hechos, porque el señor Celso Perdomo no cayó en un paracaídas en la Dirección General de Industria, no nació debajo de una col ni nació para ser director general de Industria, ¡lo nombraron! Y no solo lo nombraron sino luego mantuvieron plena confianza en el mismo, a pesar de que ya había iniciativas parlamentarias poniendo de manifiesto las irregularidades que habían trascendido en los medios de comu­nicación. Todo esto se trata de eliminar, de difuminar; hay que barrer las huellas como en las películas del oeste se hacía con las huellas de los comanches o de los apaches. Borrar las huellas, simplemente, de responsabilidades políticas que para cualquier persona mediana­mente observadora sabe que se han producido en este asunto.'

'En el dictamen que han pactado ambos partidos, recomponiendo una mayoría parlamentaria que en más de una ocasión ha llevado a la labor investi­gadora de este Parlamento a la frustración, se ha llegado a establecer la paradójica afirmación: "se ha demostrado que el ámbito personal en la elaboración de las bases del concurso quedó constreñido a la Dirección General de Industria, ya que ni siquiera se trató este tema en el consejo de dirección de la consejería -¡agárrense, señorías!- dada la complejidad del mismo". Es decir, es precisamente la complejidad del mismo la que hacía absolutamente injustificada la elaboración exclusivamente en el círculo cerrado de la Dirección General de Industria. Y, además, esa afirmación, la experiencia común indica que simplemente no es cierta. Simplemente no es cierta.'

'A partir de esta serie de afirmaciones se teje un auténtico cordón de seguridad, que es una parte esencial de este pacto.'

'¿Qué otros asuntos se eliminan radicalmente del dictamen y algunos de ellos venían ya apuntados y perfilados en los escritos que adelantaba una de las ponentes más activas de esta comisión? Les voy a decir cuáles: todo lo que tiene que ver, todo lo que tiene que ver, con los avatares de la empresa promotora de recursos eólicos, ¡todos!; todos los que tienen que ver con las decisiones que se tomaron por parte de la presidencia de la Autoridad Portuaria de Las Palmas de Gran Canaria y por la presidencia de la empresa pública Megaturbinas.'

'Y les voy a poner un ejemplo. En el mes de junio del año 2004, cuando estaban en plena fase de elaboración las bases del concurso, que fueron publicadas en el mes de octubre de ese mismo año, el señor Arnáiz Bra, de afinidades políticas -ya que a sus señorías en este dictamen les gusta hablar de afinidades políticas- más que es­tablecidas, apuntó en el Consejo de Admi­nistración de Megaturbinas que se abrían unas magníficas expectativas para que Megaturbinas obtuviera concesión de suelo público en el concurso que se pensaba convocar por la Consejería de Industria y, en consecuencia, se propuso enajenar determinados activos para hacer partícipe de Megaturbinas al capital privado. ¡Claro!, que esta propuesta, en el mes de junio, casa muy mal con la propuesta que el mismo presidente del consejo, en noviembre de ese año, hace y obtiene, de la renuncia de Megaturbinas a participar en el concurso para la asignación de potencia eólica.'

'Y los diputados que hemos estado participando en la comisión hemos podido, con gran per­plejidad, ver cómo se intentaba, con el objeto social de Megaturbinas sobre la mesa, tratar de negar que el objeto de Megaturbinas no se constreñía solo a actividades de investigación, desarrollo e innovación. Y se ha tratado de convencernos de que, al margen de lo que establece el artículo 13 del decreto sobre regulación de la potencia eólica, que fue anulado, que decía que aquellas empresas de investigación y desarrollo que quieran, en un plazo temporalmente breve, ser adjudicatarias, ser autorizadas para la utilización, para la generación de potencia eólica, no necesitan participar en un concurso. ¡Claro!, pero para un periodo muy breve y para actividades estric­tamente ligadas al objetivo de la investigación, desarrollo e innovación. Pero si una empresa de capital público, dedicada a eso, pero que además su objeto social permite explotar la energía eólica con fines de autofinanciarse, con fines de autofinanciarse, y sus estatutos sociales níti­damente lo permiten, hay que tomar la decisión para que esa empresa no participe en el concurso eólico y quede el terreno explanado a otras apetencias empresariales. ¿Las de quiénes? Las de quienes a lo largo de todo ese tiempo, en reuniones que han sido constatadas en la comisión de investigación, han ido conociendo los proyectos tecnológicos, las ideas de la empresa Megatur­binas, que se fundó en el año 2003 y hasta la fecha, señoras y señores, está prácticamente inédita en su actividad empresarial, no digamos cuál es su situación financiera. Curiosamente, los mismos empresarios que participan con don Luis Soria en un viaje para verificar sobre el terreno tecnologías que eran muy apropiadas a las bases del concurso que luego se aprobaron.'

'Don Luis Soria en este Parlamento, ni siquiera cuando empezaron a trascender noticias sobre irregularidades en la elaboración de las bases del concurso, tomó medidas, porque se le propusieron por mi compañera Gutiérrez Arteaga, doña Gloria Gutiérrez Arteaga, para intentar reconducir el proceso.'

'Acaba reconociendo el escrito de la señora Allende que, cuando se conocieron todas estas noticias y las reacciones sucesivas de don Luis Soria fue "pongo las manos en el fuego", limitarse a preguntarle al viceconsejero si el director general -del Partido Popular- estaba realizando algunas andanzas en la elaboración y en la gestación de aquel tema... Intentar comprobar a través del Cibercentro -que es el servidor del Gobierno de Canarias- la autenticidad de los correos, de su origen y de su destino, porque eso habría permitido, según la diputada, señora Allende, tomar medidas para encauzar la situación.'

'Todo esto se ha venido poniendo de manifiesto en la comisión investigadora. ¿Qué han hecho los señores diputados y diputadas de Coalición Canaria y el Partido Popular, teniendo en el trasfondo otra investigación simultánea, en este caso la investigación parlamentaria sobre el caso Amorós? Pues ponerse de acuerdo. ¿Ponerse de acuerdo para decir que ni en uno ni en otro caso hay responsabilidades políticas? No, señorías: ya no solo se ponen de acuerdo en eso, se han puesto de acuerdo en intentar criminalizar al partido de la Oposición, que desde antes de que este tema estuviera en manos judiciales ha venido insistiendo permanentemente en el Parlamento en la necesidad de aclarar lo que estaba ocurriendo, de tomar medidas y ha mantenido una actitud activa en la investigación hasta la fecha.'

'¿Qué ficción utilizan para esta actitud crimina­lizadora? Que no creo que tenga precedentes en el parlamentarismo democrático, hasta donde uno lo conoce, ¿no? Esto de tapar responsabilidades sí tiene precedentes. No es bueno pero forma parte de la condición humana y a veces de eso que llaman "de la política", pero ir a criminalizar a la Oposición, señoras y señores diputados, eso no tiene precedentes. ¿Con qué base? Con una base sumamente endeble, primero, tratan de captar un cordón umbilical entre el caso eólico y el Partido Socialista. Este cordón umbilical, al que me voy a referir simplemente porque se le utiliza como cordón umbilical para criminalizar al Partido Socialista Canario-PSOE, es don José Francisco Henríquez, quien, en la investigación judicial, no figura como imputado.'

'¿Qué asuntos retiran de la relación de hechos que ha quedado evidenciada en la investigación, que la señora Allende subrayaba y que el Partido Socialista incluye en su voto particular? Todo lo que tiene que ver con la singladura de la empresa Promotora de Recursos Eólicos. Pero a don José Francisco Henríquez, a partir de una cinta grabada policialmente, con autorización judicial, en la que el director general, el director general, le propone una serie de fechorías y don José Francisco Henríquez se limita a decir "me parece bien", nunca, en la historia del mundo mundial, de una frase pronunciada en ese contexto se han extraído tan estrepitosas consecuencias.'

'Miren, don José Francisco Henríquez, si hubiera estado en condiciones de pactar algo en nombre del Partido Socialista, los hechos lo habrían puesto de manifiesto y el Partido Socialista ha mantenido una actitud escrupulosa de com­promiso con la transparencia y con el control de la gestión de los asuntos públicos. Y estos son los datos.'

'¿Y cuál es el otro dato? Pues probablemente el dato de que esa propuesta de un Celso Perdomo ya un poco obnubilado por sus propias andanzas, metido en su propia madeja, demuestra lo que jurídicamente se llamaría una "tentativa im­posible", porque la supuesta contrapartida era prometer algo que no estaba al alcance del que prometía, como es la incorporación de dos personas en una comisión de selección, cuyo presidente lo designaría don Luis Soria, cuyo secretario lo designaría a su vez el presidente designado por don Luis Soria y cuyos com­ponentes, técnicos, también los nombraría el presidente designado por don Luis Soria. Esto se llamaría una "tentativa imposible". Yo les puedo decir eso, señorías, si podemos organizar un golpe de mano para derrocar al emperador de China, pero resulta que el emperador de China ya no existe y si existiera, lo nuestro sería una tentativa verdaderamente imposible. En Derecho hay argumentaciones que se ilustran, pues, llevando la línea que se trata de establecer al absurdo. Y esta es la técnica que yo estoy utilizando, porque para una afirmación absurda, una forma de desmontarla, recurriendo al argumento ad absurdum.'

'En definitiva, en todo este proceso se ha tratado de establecer un cordón de seguridad, un cinturón.'

'¿Y qué otras cosas quedan fuera? Yo les voy a decir cuáles, señorías. Todo el conjunto de hechos que se han gestado partiendo del Cabildo Insular de Gran Canaria para diseñar un procedimiento para comprometer, adjudicar, suelo público perteneciente al Cabildo Insular de Gran Canaria a organismos autónomos dependientes del mismo, como el Consejo Insular de Aguas, y a deter­minados municipios gobernados por el PP; un procedimiento atípico, sin base legal, que contradice no solo las normas sobre la gestión de los bienes de las entidades locales sino las normas en general sobre la gestión del patrimonio público. Cuando uno quiere enajenar patrimonio público, una institución, o cederla en arrendamiento por un número determinado de años, tiene que convocar un concurso, para que la libre con­currencia -de la que hablan algunos liberales tanto-, esa libre concurrencia se traduzca en las mejores ofertas para el interés público como contrapartida por la enajenación o por la cesión de esos bienes. Esto es exactamente lo que no se hizo. Se diseñó un procedimiento atípico, ilegal, sin el menor informe -¡porque miren que lo hemos requerido!-, preceptivo, de la secretaría general de la corporación, de la intervención general de esa corporación o de otras, que practicaron y que pusieron en práctica un procedimiento similar para, al final, conseguir, ¿qué objetivos?: el objetivo de que la misma autoridad que decidiera en la Consejería de Industria la resolución de este concurso, que venía siendo trucado por las andanzas de don Celso Perdomo y de su entorno, la misma autoridad, sin competencias para ello, fuera la que, en definitiva, cediera el suelo público de potencial eólico de determinadas entidades locales, sin las debidas contrapartidas para estas entidades y sin tener competencia para ello. Porque las debidas contrapartidas solo pueden fijarse a través del principio de la libre concurrencia, de un concurso público en forma. Luego, las andanzas de don Celso Perdomo se complementan con los hechos que acabo de describir, que, en definitiva, desembocaban en que la misma autoridad que decidiera el concurso en la Consejería de Industria, el concurso para la asignación de potencia eólica, la misma autoridad, de facto, decidía sobre el suelo de las entidades locales del Cabildo Insular y de otros ayuntamientos del archipiélago, suelo con potencial eólico.'

'Porque verdaderamente es pintoresca la decisión que se tomó a través de este diseño ilegal, al margen del Derecho, consistía en entregar un certificado a todas las personas, a todas las empresas que solicitaban suelo, diciendo: "si usted gana el concurso, tiene este suelo". ¡Claro!, cuando se decida el concurso, se decide quién va a disfrutar del suelo público, que resultaba premiado en las bases del concurso.'

'Señoras y señores diputados, sus señorías pueden ser muy libres de tomar la decisión que les corresponda, pero les voy a decir algo: en el dictamen, al que nosotros nos oponemos con nuestro voto particular, que incluye una relación de hechos fundada en los argumentos, en las consideraciones que yo acabo de manifestar, hay una imputación que es delictiva. Y quiero que sus señorías lo sepan claramente. En el dictamen que ustedes van a votar se establece, con la base tan endeble a la que acabo de referirme, que entre don Celso Perdomo y don José Francisco Henríquez se produjeron unos hechos que entran de lleno en tráfico de influencias político. Y yo les voy a decir algo, señorías: no existe tráfico de influencias político que no sea al mismo tiempo tráfico de influencias penal. Están ustedes imputando, sin base legal e injustamente, aprovechando su situación parlamentaria, un delito, del cual se derivarán responsabilidades a ustedes. Que no sea por no advertírselo, ¿eh? Es que, cuando uno hace pactos políticos, no con la intención de respetar la verdad, sino con otros objetivos, a veces se les va la mano. Y se les va la mano cuando al tratar de entresacar, de expurgar de una relación de hechos plausibles, la responsabilidad de don Luis Soria, al tratar de hacerlo, resulta que parece que don Celso Perdomo, que no tenía control, como anunciaba la señora Allende, tuvo un gran margen de maniobra.'

'Al final hasta los párrafos que ustedes han redactado carecen de sentido gramaticalmente. Es que las operaciones políticas hechas a contrarreloj y de espaldas a la verdad no suelen terminar nunca en buen lugar.'

'Señor presidente, creo haber defendido el voto particular de mi grupo y muchas gracias por su atención.'

'(Aplausos.)'

'El señor presidente: Muchas gracias, señoría.'

'Empezamos el turno de los grupos que no presentaron voto particular. En nombre del Grupo Parlamentario Mixto, tiene la palabra el señor Betancor.'

'El señor Betancor Delgado: Buenas tardes, señorías. Gracias, señor presidente.'

'Nosotros habíamos manifestado en anteriores intervenciones, donde se debatía la necesidad o no de crear una comisión parlamentaria que investigara los hechos acaecidos en relación con la asignación de potencia, en la modalidad de instalación de nuevos parques eólicos en Canarias, tras las denuncias públicas y la posterior in­tervención de la justicia en el caso que nos ocupa, ya habíamos manifestado y habíamos dicho en aquel momento, y lo seguimos manteniendo, que era muy difícil, era muy difícil, y no era con­veniente, la creación de esta comisión de investigación.'

'Yo creo que los resultados, las pruebas, los datos, los acontecimientos y los días nos han dado la razón.'

'Y lo decíamos porque nuestra principal argumentación se ceñía en que esta era una causa que estaba abierta en los juzgados, bajo el secreto sumarial, y que ello, nuestra actuación en esa comisión, igual iba a interferir no solo en la labor que se les tiene encomendada a los órganos de la justicia sino, asimismo, lesionar algunos derechos, que a las personas que podríamos llamar o a los que llamábamos a comparecer ante esta comisión...; como bien digo, se podría interferir no solo en la labor sino en esos derechos que ellos tienen. Y siempre, siempre -ustedes lo recordarán- se nos dijo que nuestro trabajo de investigación se limitaba a depurar o a encontrar responsabilidades políticas. Esa era la intención, ese era el planteamiento, pero, aun así, nosotros pensábamos que no era bueno que se creara esta comisión de investigación y que nosotros, sinceramente, no confiábamos en los resultados que de ella se podrían extraer. Y creo que estos hechos que nosotros planteábamos en aquellos momentos se han evidenciado por las distintas personas que han comparecido en esa comisión y que, por supuesto, ha sido muy difícil establecer responsabilidades políticas, no más allá de los simples comentarios que podíamos escuchar por la prensa o los comentarios que se podían hacer de las diferentes personas o acusaciones que se establecían y que tuvieron lugar, sobre todo, en las primeras comparecencias, en un sentido o en otro, relacionando a partidos políticos en esta trama.'

'También hemos podido observar a lo largo de estos meses las discusiones partidistas en un sentido o en otro, intentando establecer conexiones y connotaciones en relación a partidos políticos en esa trama, no solo en las declaraciones de las personas que fueron citadas y que allí pudieron argumentar en base a las preguntas que se les hacían, sino en el propio devenir de los señores diputados integrantes en esta comisión.'

'Y al final nosotros pensamos que la conclusión es que hemos estado discutiendo durante mucho tiempo para al final no llegar a una conclusión común. Eso es lo que se puede plasmar o nosotros observamos de esta comisión. Y digo esto porque han sido, son manifestaciones derivadas de los propios trabajos internos de esta comisión. Habría que preguntarse si tenían sentido o han tenido sentido los trabajos y el tiempo que hemos estado investigando o preguntando. Lo decíamos al principio y lo seguimos manteniendo: no era propicio hacerlo porque al final no nos iba a conducir a ningún sitio. Quizás nos ha conducido a un terreno mucho más escabroso, que es la disputa, la discusión y transmitirle a la opinión pública, transmitirle a los medios de comunicación y transmitirle a los ciudadanos de Canarias, que la labor política en esta Comunidad no es lo buena, lo acertada que debería ser, y yo creo que eso no es lo correcto ni es lo que se pretende ni es lo que debe hacer este Parlamento.'

'Y para colmo, lo digo bien claro, y remate, los últimos acontecimientos internos, en el seno de la comisión -yo creo que a nadie se le esconden-, cuando no se ha estado de acuerdo en los pareceres de unos y de otros, pues, han surgido ciertas discrepancias que rayan más allá del respeto a la actividad parlamentaria. Y nosotros, sinceramente, pensamos que estas actitudes no conducen a ningún sitio, no son propias del respeto ni de la actividad parlamentaria. Lo que me permite decir y asegurar -porque así, y yo me meto dentro, nosotros nos lo hemos hecho ver- que hemos perdido el tiempo, ha sido una comisión sin sentido, poco aclaratoria, y no hemos podido encontrar ningún atisbo de responsabilidad política, salvo en el caso del ex director general de Industria, sobre el cual la justicia ya ha intervenido. Por lo demás, simples conjeturas... (Rumores en la sala.)'

'El señor presidente: ¡Señorías, por favor!'

'El señor Betancor Delgado: ...y aprecia­ciones en cuanto a irregularidades basadas en el tráfico de influencias de ciertas personas ajenas a la esfera política, que pudieran ser objeto de investigación por parte de este Parlamento.'

'Yo creo que es nuestra apreciación sobre los trabajos de esta comisión y el resultado -creo que todos ustedes lo conocen- ha sido resultado de la crispación, resultado del enfrentamiento, resultado de que no postula ningún trabajo serio, de que deja mucho que decir sobre la actividad parlamentaria; que hemos interferido en la labor de la justicia. Y al final lo que hemos transmitido al ciudadano es que, en ciertas cuestiones tan importantes como ésta, no hemos sabido dar la talla y al final hemos llegado a unas propuestas que en sí son unas propuestas muy simples, no van más allá de lo que es una propia comisión de investigación.'

'Y, en definitiva, sinceramente, no la teníamos que haber hecho, hemos perdido el tiempo y hemos hecho un flaco favor a la labor parlamentaria de este Parlamento en la Comunidad de Canarias.'

'Muchas gracias, señor presidente.'

'El señor presidente: Muchas gracias, señoría.'

'En nombre del Grupo Parlamentario Popular, tiene la palabra el señor Rodríguez.'

'El señor Rodríguez Pérez: Señor presidente. Señorías.'

'Hoy se debate ante el Pleno del Parlamento de Canarias el dictamen de los trabajos de la comisión de investigación creada para esclarecer los hechos, actuaciones, comportamientos de las administracio­nes públicas canarias, así como la determinación de las responsabilidades, consecuencia del concurso público convocado por la Consejería de Industria en su momento relativo a la energía eólica.'

'No es la primera vez, señorías, que este Pleno conoce el dictamen de una comisión de inves­tigación; en casi todas las legislaturas, yo no he estado aquí, pero al menos en las últimas, se han creado algunas. Por tanto, ha habido ejemplos de comisiones de investigación, pero es justo reconocer que la comisión del llamado caso eólico no ha sido una comisión más.'

'El respeto a la sociedad que representamos todos los que estamos aquí nos ha exigido a todos en esta comisión una especial sensibilidad. Propusimos su creación y participamos de su aprobación, aun a sabiendas de que no somos un tribunal, conscientes de que, con un proceso penal abierto, que está investigando los mismos hechos que motivaron la apertura de esta comisión, había un riesgo de interferencia. No está bien definido, señor presidente, y es una asignatura pendiente que tenemos para alguna próxima legislatura en esta Cámara, el papel que debe jugar una comisión de investigación cuando en paralelo existe una investigación judicial abierta. En todo caso, y pese a ello, lo cierto es que nuestra responsabilidad nos exigió actuar con el máximo rigor en los trabajos de la misma.'

'Señorías, el Grupo Parlamentario Popular solicitó la creación de la comisión de investiga­ción. Queríamos que se supiera qué había ocurrido con el concurso de asignación de energía eólica y que ese esclarecimiento pasara a ser un objetivo central de este Parlamento.'

'Por su parte, y por lo visto, el Partido Socialista solo buscó, durante todo el transcurso de los trabajos de la comisión, un instrumento para reafirmar un guión, escrito por cierto de antemano, porque buscaban pruebas que inculparan al Partido Popular, que nos inculparan al Partido Popular ante la sociedad canaria, y resulta que después de meses de investigación, de meses de transcurrir de la comisión, esa evidencia no ha aparecido por ningún lado, señorías, ¡y miren que lo han intentado!, ¡y miren que lo han intentado! No ha aparecido ni un dato ni una sola declaración, ¡ni una!, que avale la calumnia en la que ustedes se instalaron desde un primer momento, infligiendo al Cabildo de Gran Canaria, a don José Manuel Soria como presidente y a don Luis Soria, ex consejero de Industria del Gobierno de Canarias. Jamás apareció y jamás aparecerá, ¡ni una!, sencillamente porque el ex consejero, don Luis Soria, actuó recta y honestamente, señorías, al frente del departamento de la Consejería de Industria cuando el Partido Popular estaba en el Gobierno. De la misma forma que el Cabildo de Gran Canaria, en todo este proceso, actuó correcta y honestamente, como así lo hizo también su presidente, don José Manuel Soria, también diputado regional.'

'Señorías, y especialmente señorías socialistas, a medida que transcurría la comisión, sus trabajos -los trabajos de la comisión- les llenaban a ustedes de frustración. Desde que se constituyó la comisión se fueron descubriendo y conociendo nuevos datos. ¡Conexiones inquietantes, señorías!, conexiones, contactos inquietantes entre miembros destacados del Partido Socialista con el origen de la trama, que estaba precisamente situada en el ex director general de Industria, don Celso Perdomo. Se supo de amistades peligrosas. Las certezas, las pocas certezas, las hemos puesto todas nosotros, señorías. Nosotros hemos dado la cara, suspen­dimos de militancia a don Celso Perdomo, del Partido Popular. Ustedes no han hecho nada parecido.'

'Miren, señorías, desde que se conocieron las actuaciones procesales del Juzgado de Instrucción número 7 de Las Palmas de Gran Canaria sobre este mismo caso ustedes no han perdido ni un minuto en lanzarse como una jauría, presumiendo, enjuiciando, inmediatamente sentenciando responsabilidades de todo orden sobre dirigentes del Partido Popular. Pero, miren, ese camino no tiene atajos y a esa meta desde luego no se llega a través de barrizales. Este grupo parlamentario no va a consentir absolutamente nada, pero nada, que tenga que ver con someterse a su ambición de poder y sus ganas de revanchismo.'

'Miren, demostraron ustedes en la comisión, señorías socialistas, que son portadores del virus de la inmunodeficiencia democrática y mantienen, miren, y mantienen, porque no han evolucionado ustedes en absoluto, mantienen todavía al tío Pepe en el rincón de sus preferencias. Pero no me refiero al vino fino jerezano sino al Pepe Stalin, porque han devaluado la política a la categoría de espectáculo, a la vista de todo lo actuado en la comisión.'

'Miren, su imaginación les ha llevado a confundir la realidad con sus deseos, señorías, siguiendo esa táctica goebbelsiana de repetir una mentira tantas veces con la intención de convertirla en realidad. Simplemente han querido y siguen queriendo descalificar con el fin de degradar la imagen del Partido Popular.'

'Señor presidente, el Grupo Parlamentario Popular hace suyo el dictamen llegado a este Pleno y lo votaremos afirmativamente. Se trata de conclusiones que se basan en hechos objetivos, fundamentados en la documentación a disposición de la comisión, los testimonios de los com­parecientes y las informaciones publicadas en los medios de comunicación sobre el desarrollo y contenido del sumario abierto. Y son conclusiones que se circunscriben a indicar los hechos que la comisión ha podido contrastar, aportando las responsabilidades políticas correspondientes a dichos hechos.'

'El desarrollo en paralelo de una investigación judicial y el necesario respeto al principio de presunción de inocencia de las personas que aparecen como supuestamente implicadas, bueno, nos han aconsejado la elaboración de unas conclusiones basadas estrictamente en actuaciones contrastadas o que son de dominio público.'

'¿Y cuáles son esos hechos? Pues, miren, la implicación de determinadas personas vinculadas al Partido Socialista Obrero Español-Partido Socialista Canario, cuestión que quedó ab­solutamente clara y de manifiesto por las propias manifestaciones, por ejemplo, de don José Francisco Henríquez ante la misma comisión, reconociendo la existencia de conversaciones con el ex director general de Industria y por las noticias que sobre el sumario se han ido publicando a lo largo del tiempo. Así que la evidente y confesa relación de amistad entre el ex director general de Industria y los señores Henríquez y Lucendo es un hecho al menos indubitado, que no se puede cuestionar, al igual que la existencia de conversaciones que man­tuvieron durante la fase de elaboración de las bases del concurso que permitieron a destacados miembros, estos destacados miembros del Partido Socialista, manejar una información privilegiada e incluso discutir con el ex director general, don Celso Perdomo, diversas cuestiones sobre la composición de la comisión de evaluación de los proyectos, en orden a favorecer la entrada en la misma de personas vinculadas al Partido Socia­lista. Por cierto, cuestión esta, la de incorporar a destacados miembros o simpatizantes del Partido Socialista, no desvelada; por cierto, no sabemos cuáles eran los oscuros intereses de poder estar dentro de esa comisión.'

'Consta en las conclusiones también, señor presidente, señorías, otra constatación derivada de lo actuado en la comisión, y es la no implicación, y por tanto la correcta actuación, tanto del anterior equipo directivo de la Consejería de Industria cuando lo presidía don Luis Soria como del actual equipo de la consejería, presidido por doña Marisa Tejedor. Y evidentemente sí ha quedado acreditada la actuación absolutamente unilateral y por motivos de índole personal, amistad entre otras, del ex director.'

'Señorías, insistiré en algo: las comisiones de investigación deben ceñirse a la determinación de los hechos que sean de relevancia para el cumplimiento de los objetivos y la concreción de la que fue objeto la creación de la comisión correspondiente. Por tanto, el dictamen que apoyamos resulta coherente con dichos objetivos y huye de la criminalización generalizada de personas y formaciones políticas que tanto el Partido Socialista como algunos medios de comunicación afines han intentado llevar a cabo de manera desproporcionada y sin fundamento, intentando ocultar la implicación de personas vinculadas con dicha formación política.'

'Y otra cosa quiero añadir: el esfuerzo hecho por los grupos del Partido Popular y de Coalición Canaria -que no pacto alguno, señor Pérez, que no pacto alguno- ha sido precisamente para intentar sumar, para intentar sumar, porque hubo coincidencias en unas conclusiones que han sido coherentes con los hechos objetivos contrastados por la comisión y respetuosas con la investigación judicial abierta y los derechos de los imputados. Contrasta esto con la actitud del Grupo Parla­mentario Socialista, que ha intentado imponer a grito pelado, a grito pelado, y demostrando nada de talante, unas conclusiones de tinte novelesco, alejadas de la realidad y orientadas a manchar a personas que jamás tuvieron relación alguna con el tema que hoy nos ocupa.'

'En definitiva, el dictamen que apoyamos pone las cosas en su sitio, pese a que ello le duela al Partido Socialista, y permite poner el acento en lo que realmente le interesa a la sociedad canaria. En primer lugar, que se sepa la verdad, lo que ocurrió y lo que no ocurrió, pero que a ustedes les hubiese gustado que hubiera ocurrido; y, en segundo lugar, que conste el interés del Parlamento de instar a la Consejería de Industria y Energía, alcanzar el objetivo de impulsar, de una vez por todas, el desarrollo de la energía eólica en Canarias.'

'Y me voy a ocupar ahora del voto particular del Grupo Parlamentario Socialista, no sin antes proponer a sus señorías en esta Cámara que en el documento que llega de dictamen a esta Cámara hay una cuestión que, in voce, voy a sugerir que pueda ser eliminada, porque es redundante e incluso contradictoria con el siguiente párrafo, y es, en la última página, en la página 17, al final del primer punto, al final del último punto y seguido, cuando dice, "por ello, de confirmarse mediante condena judicial firme", para luego decir, en el siguiente párrafo, "al margen de lo que efectivamente se concluya en la vía penal abierta", yo creo que el párrafo donde dice "por ello, de confirmarse mediante condena judicial firme las imputaciones", quitarlo y continuar con el siguiente punto y aparte, es decir, el último párrafo.'

'Mire, nos oponemos rotundamente, rotun­damente, al voto particular del Grupo Par­lamentario Socialista. Y nos oponemos porque en él se contiene, señor Pérez, señores, señorías del Grupo Parlamentario Socialista, en él se contiene un calumnioso e injurioso exabrupto contra el Partido Popular. Así de directo, así de tajante. Y eso mismo lo convierte en un simple panfleto carente del menor rigor. Miren, señorías so­cialistas, señor Pérez... señora Gutiérrez, que ha participado en su elaboración, con su documento yo creo que ha realizado usted su mayor, única y mejor aportación a la lánguida política cultural de Canarias, porque parece que ha concurrido usted a una especie de certamen de novela corta y resulta que ha salido usted premiada. Se ha llevado usted el premio en el apartado de ficción, pero también al de la constancia, señora Gutiérrez. Repito, han querido otorgar ustedes categoría, de verdad, incontestable a lo que la propia comisión, la propia investigación parlamentaria, demostró que era una gran patraña.'

'Y sus pretendidas evidencias, señorías, no aparecieron por ninguna parte, por ningún lado, y miren -repito- que lo intentaron. Removieron Roma con Santiago, ¡pero nada!, no hay ni un dato que avale sus teorías, que avale sus doctrinas. Más bien, calumnia tras calumnia. Sencillamente, señorías, porque el Partido Popular, su consejero entonces en el Gobierno de Canarias, don Luis Soria, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, el mismo cabildo, actuaron correcta y hones­tamente y ni mintieron ni amañaron ni manipularon ni engañaron, porque en todo el transcurso de los trabajos de la comisión, señorías, hemos visto cómo, con claro y manifiesto desprecio a la verdad, ustedes intentaron cuantos medios tuvieron a su alcance, especialmente los de comunicación afines, para convertir lo que presuntamente parece que ocurrió con lo que realmente ustedes mismos saben que no ocurrió.'

'Y, sin embargo, el Partido Popular sí que se ocupó, y gran parte de su trabajo en la comisión -y yo creo que lo hemos conseguido-, lo que en ningún caso han sido los hechos, por más que algunos, persistiendo en el intento, sin duda en vano, buscando atajos que les concedan alguna ventaja, a dos meses de las elecciones. Si venían ustedes, señorías socialistas, a esa comisión de investigación pensando que en ella iban o se iban a cobrar la pieza política de su sueño fracasaron en su intento. Lo lamento, fracasaron en su intento. Y su reacción no ha sido otra que levantar un muro de injurias, descalificaciones e impu­taciones de indignidad, y todo por su ansiosa perentoriedad por el poder. Nosotros, mire, al poder, al Gobierno, preferimos llegar por la confianza ilusionada de los canarios y no por la ruina y el descrédito de nuestros adversarios, como sí practican ustedes, sacando a pasear la ira que albergan dentro de ustedes mismos, señorías. Les encanta tapar la boca a los que se oponen a sus tesis.'

'Y están decididos a todo: a insultar, a descalificar, a mentir e incluso a intimidar, como hoy, esta tarde mismo, hemos oído del señor Pérez: ¡a intimidar! Y también a convertir la campaña electoral próxima en una campaña contra el Partido Popular y, para muestra, un botón. Señorías, miren, ha elaborado el Partido Socialista un manual para sus candidatos que podríamos calificar de "manual del perfecto crispador" (Rumores en la sala). ¡No, no!, les extraigo, les extraigo una muestra, un botón de muestra, escuchen, escuchen. Dice textualmente: "cada campaña es una guerra a nivel general de partido y del candidato; cada elección hay que diseñarla como una batalla. Hay que sopesar posibles riesgos y preparar la defensa. El objetivo es conquistar la mente de la gente" (Rumores en la sala).'

'El señor presidente: ¡Señorías, por favor!'

'El señor Rodríguez Pérez: Eso lo dice el manual del candidato del Partido Socialista. Ante este manual de guerra, con un lenguaje abier­tamente bélico, pues, ¿qué vamos a pensar?, ¿cómo no han tenido ustedes en la comisión de inves­tigación un comportamiento diferente? ¡Ustedes han buscado el enfrentamiento desde el primer momento!'

'Y usted, señor Pérez -se lo tengo que decir-, se aprendió el manual de memoria, ha sido usted el mejor alumno, señor Pérez.'

'El único peligro -y lo voy a decir-, el único peligro que nos acecha en Canarias, el único peligro que acecha a los canarios, son las mentiras patológicas del Partido Socialista, que en su afán de desprestigiar a sus adversarios políticos no duda en recurrir, en una y en otra ocasión, a la humillación, como digo, a la intimidación, a la descalificación y al engaño como sus únicas armas electorales.'

'Les ocurre a ustedes, señorías socialistas, lo que a los escorpiones: sus mentiras les hieren su credibilidad, y ya lo hemos visto. El Partido Socialista cuando está nervioso electoralmente miente y mucho, y hoy les ha tocado a ustedes mentir en la trama eólica.'

'Así que, si no están de acuerdo, señorías socialistas, hagan lo que han hecho hasta ahora, que es como el niño en el colegio cuando en el recreo juega al fútbol, si no le gustan sus adversarios, coge el balón y se va. Cojan ustedes hoy el balón y márchense si no son capaces de votar hoy aquí este dictamen, que han convenido coincidentemente el Grupo Parlamentario de Coalición Canaria y el Partido Popular.'

'Muchas gracias.'

'El señor presidente: Gracias, señoría.'

'(Rumores en la sala.)'

'¡Por favor, señorías!'

'En nombre del Grupo Parlamentario de Coalición Canaria, tiene la palabra el señor González.'

'El señor González Hernández: Gracias, señor presidente.'

'(Rumores en la sala.)'

'Como todos...'

'El señor presidente: Perdón, señor González. ¡Señorías, por favor!'

'¡Señorías! Gracias.'

'Adelante, señor González.'

'El señor González Hernández: Obviamente, participo para defender el dictamen.'

'Quisiera precisarle algo, algo de la intervención previa al portavoz del Partido Socialista, cuando dijo que... el señor Celso Betancor, que ya estaba diciendo que no se podían haber alcanzado conclusiones. Si usted lee el dictamen, verá que dice claramente que nos parecía absolutamente inadecuado el que se debatiera este tema en el Parlamento cuando estaba pendiente una investi­gación judicial, expresando la duda de que si se pudieran alcanzar algunas conclusiones, la comisión, que debe estar regida por el inviolable principio de presunción de inocencia para todas aquellas personas, pudieran determinarse respon­sabilidades políticas. Es decir, no exactamente lo que usted dijo.'

'Primero, no voy a hablar del voto particular demasiado. Sí que voy a hablar de una cosa, y es del último párrafo. A mí me parece una absoluta indignidad el que ustedes puedan decir que la investigación que llevó a cabo la consejera, señora Tejedor, fue "una pantomima, sin ningún tipo de rigor, habiendo quedado de manifiesto la falta de voluntad investigadora por parte del Gobierno". Están acusando ustedes a la consejera de prevaricación (Rumores en la sala).'

'El señor presidente: ¡Señorías, por favor!'

'El señor González Hernández: Don Santiago Pérez, me referiré después a lo que dice el dictamen sobre el señor Caco Henríquez, o don José Francisco Henríquez, pero a mí me parece que usted no se ha leído su propio voto particular, porque, si se lo lee, verá que en el primero se imputa un delito, en el segundo se imputan dos delitos y en el tercero otro delito. ¿Y viene usted a decirnos a nosotros que cuando tangencialmente tocamos al señor Caco Henríquez y decimos, textualmente -voy a leerlo, porque parece que tampoco se lo ha leído, lo que dice. Perdone que lo busque (Pausa)-, dice: "una relación tan especial como la descrita -y habla de la amistad, que reconoció el señor Henríquez, con los señores Lucendo y don Celso Perdomo y la conversación que usted refiere, que no fue en ese contexto-, entra de lleno en lo que políticamente podría reprobarse como tráfico de influencias". Esto es lo único que decimos nosotros del señor Caco Henríquez. Y lo que sí decimos es que el respon­sable es don Celso Perdomo y ustedes han querido decir a la calle que nuestro partido ha dicho que el que ha montado esta trama es el Partido Socialista. Y eso es una absoluta mentira y para eso basta leer lo que dice el texto. Nosotros decimos que el responsable era don Celso Perdomo, y decimos: "y aquellas responsabilidades que resultaren de la autoridad judicial", porque ustedes saben que no hemos contado con el apoyo del juzgado, ni se nos dio, no ya solo por el cierre que ha habido, del proceso de estar bajo el secreto del sumario, sino que incluso se nos denegó al Parlamento disponer del sumario para ver cuál era la realidad. Y nosotros no cerramos nada, porque decimos que las responsabilidades serán las que resulten, resulten del resultado judicial.'

'Y tampoco váyanse a decir que... y por eso digo, esa imputación de un delito, que nos quiere asustar don Santiago Pérez. El señor Caco Henríquez estuvo imputado un año, ¿o estoy yo equivocado? ¿Qué quiere decir usted, que el juez lo tuvo un año imputado sin causa ninguna ni motivo ni nada, fue una pura casu alidad, el juez pasó por el lado del señor Henríquez y lo tuvo imputado un año? ¿Que lo ha dejado de imputar ahora por falta de pruebas sustanciales?, me alegro por él, no le deseo ningún mal.'

'Muchas gracias.'

'El señor presidente: Muchas gracias, señoría.'

'Se ha planteado por el señor Rodríguez una enmienda, no tal enmienda in voce, yo creo que es una corrección técnica del texto del dictamen, en el sentido de evitar una reiteración o alguna cuestión que pudiera malinterpretarse o malen­tenderse por repetición, de eliminar el párrafo, en la página 17, "por ello", y hasta el final, y dejando luego a continuación... ¿Hay alguna objeción por parte de la Cámara para esta corrección? (El señor Becerra Robayna solicita la palabra.)'

'Sí, señor Becerra.'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): ...(Sin micrófono.)'

'(El señor Pérez García solicita la palabra.)'

'El señor presidente: ¿En relación con este tema?'

'El señor Pérez García (Desde su escaño): Señor presidente, en relación con este tema, con su permiso.'

'El señor presidente: Sí.'

'El señor Pérez García (Desde su escaño): A nuestro entender no se trata de una mera corrección técnica sino una enmienda verbal, que requiere la unanimidad, y el Partido Socialista no la acepta.'

'El señor presidente: Por eso lo he preguntado. En todo caso, la técnica también lo requería en este momento cuando viene de un dictamen de la comisión y, por tanto, no sometido a enmiendas. Pues se mantiene el texto del dictamen como está.'

'¿Sí, señor Becerra, a qué efectos?'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Señor presidente, a los efectos de invocar el artículo 12.4 del Estatuto de Autonomía de Canarias y el 89 del Reglamento de esta Cámara.'

'El señor presidente: ¿Cuál del Reglamento, perdón?'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): El 12.4 del Estatuto de Autonomía de Canarias o también el 89 del Reglamento de la Cámara.'

'El señor presidente: Sí, ¿en qué sentido?'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Señor presidente, los diputados que suscriben el presente documento, el que les habla, además de Alejandro José Díaz Hernández, Isaac Castellano San Ginés, doña Manuela Armas Rodríguez y don Andrés Fuentes Pérez, diputados del Parlamento de Canarias, entendemos que lo que hoy se pretende votar en este Parlamento, el dictamen que se trae a esta Cámara, no deja de ser un atentado a la inteligencia de los ciudadanos de Canarias...'

'El señor presidente: Perdón, perdón, vamos a ver, señor Becerra, sin perjuicio de que usted luego pueda hablar, lo que yo necesito es que me diga, a los efectos del 89... Dice claramente el Reglamento que, "antes de comenzar una votación anunciada -eso ha hecho usted-, si se opusieran a su celebración al menos los dos tercios de los diputados representantes de una isla", si me quiere acreditar que dos tercios de representantes de una isla, en este caso supongo que está hablando de Lanzarote, se oponen a la votación, pero me lo deberá dar en todo caso, antes de hacer cualquier... Le ruego me haga llegar el escrito, porque, si no, no lo puedo saber (El señor Becerra Robayna le entrega el escrito a la Presidencia). (Pausa.)'

'Señorías, damos un receso de dos minutos a los efectos de clarificar una cuestión.'

'(Se suspende la sesión a las diecisiete horas y cincuenta minutos.)'

'(Se reanuda la sesión a las dieciocho horas y diecisiete minutos.)'

'El señor presidente: Señorías, ruego ocupen sus escaños.'

'La Mesa de la Cámara, a la vista del escrito presentado... (El señor Lorenzo Tejera solicita la palabra.)'

'Sí, señor Lorenzo.'

'El señor Lorenzo Tejera (Desde su escaño): Señor presidente, si me permite, para manifestar que el resto de los diputados por la isla de Lanzarote, que somos más de un tercio de los diputados, consideramos que ese acuerdo no es perjudicial para los intereses de nuestra isla.'

'El señor presidente: De acuerdo. Gracias.'

'Señorías, yo iba a anunciar que la Mesa de la Cámara ha decidido, por mayoría, lo digo en esos términos, que no ha lugar a la solicitud efectuada por cinco diputados de Lanzarote. El argumento jurídico es claro: el Reglamento exige que "al menos, dos tercios de los diputados de la isla"; dos tercios de ocho son más de cinco y, por tanto, los que han suscrito ese escrito son cinco diputados. Evidentemente hay más de un tercio, como ahora mismo se ha puesto de manifiesto, que no lo ha suscrito; por tanto, no cabe que hubiera más de tres tercios. En ese sentido, la decisión de la Mesa es no admitir el escrito y, por tanto, someter a votación la propuesta.'

'Sí, señor Becerra.'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Señor presidente, dos tercios de los diputados de la isla de Lanzarote, si no me fallan las cuentas, son 5,32. Es imposible, materialmente imposible, traer 0,32 diputados aquí. Es cierto, señor presidente, que la interpretación común es que cuando es menos de 5,5 tendría que ser 5. Por encima del 5,5 evidentemente estaría yo de acuerdo con la Mesa. Es cierto, está claro, usted lo ha anunciado, que esa es la propuesta de la Mesa del Parlamento y yo le anuncio un recurso de reposición ante la misma Mesa por considerar que se está vulnerando el Reglamento de la Cámara.'

'(El señor Cruz Hernández solicita la palabra.)'

'El señor presidente: De acuerdo, señoría. Así consta.'

'Sí, señor Cruz.'

'El señor Cruz Hernández (Desde su escaño): Señor presidente, una cuestión también de orden.'

'En este caso, los diputados socialistas por la isla de La Gomera, el que les habla, José Ramón Mora Hernández y Rosa Guadalupe Jerez Padilla, diputados todos del Grupo Parlamentario Socialista, que constituyen más de dos tercios de los representantes de la isla de La Gomera, por medio del presente, y a tenor de lo dispuesto en el artículo 12.4 del Estatuto de Autonomía de Canarias y en el artículo 89 del Reglamento de esta Cámara, expresan su oposición a la celebra­ción de la votación del dictamen de la comisión de investigación para esclarecer los hechos y actuaciones de las administraciones públicas canarias, así como la determinación de las responsabilidades consecuencia del concurso público convocado por la Consejería de Industria, Comercio y Nuevas Tecnologías, relativo a la energía eólica, por considerar tal acuerdo perjudicial para la isla de La Gomera.'

'Se lo adjunto...'

'El señor presidente: Gracias, señoría.'

'Me hace llegar el escrito, por favor.'

'(El señor Cruz Hernández entrega el escrito a la Presidencia.)'

'Gracias, señor diputado.'

'En este caso, dado que son cuatro los diputados elegidos por la circunscripción de La Gomera, es evidente que tres representan, al menos, el tercio de los diputados. Entendiendo, porque así lo ha manifestado en este momento, el portavoz del Grupo Socialista que este acuerdo puede consi­derarse lesivo o perjudicial para la misma, no se somete a votación y se deberá repetir la votación en la siguiente sesión plenaria que se celebre.'

'Pasamos al siguiente asunto: comisión de investigación sobre... -(Rumores en la sala.) ¡por favor, señorías!-, comisión de investigación sobre el alcance de las infracciones legales a la normativa vigente, advertidas por la Audiencia de Cuentas de Canarias en su informe de fiscalización IAC-20, imputadas -¡Señorías, señorías, ruego guarden silencio-, imputadas a la Dirección General del Tesoro en el ejercicio 2002. Dictamen de la comisión.'

'A este dictamen se han presentado tres votos particulares, de los Grupos Parlamentarios de Coalición Canaria, Popular y Socialista Canario. El régimen establecido para el debate es exactamente el mismo que en el asunto anterior.'

'(El señor Rodríguez Pérez solicita la palabra.)'

'Sí, señor Rodríguez.'

'El señor Rodríguez Pérez (Desde su escaño): Disculpe, señor presidente, aún estoy intentando asimilar la situación anterior (Risas en la sala.) y a mí me gustaría que, además de la aritmética, se nos explique al resto de la Cámara cuáles son los motivos que consideran perjudiciales para la isla de Lanzarote o de La Gomera de la votación que aquí tenga lugar en relación con el debate del dictamen de la comisión de investigación relativo al concurso de la energía eólica. Quiero saber cuál es el perjuicio para la isla de La Gomera o de Lanzarote de la votación del dictamen del concurso de asignación de energía eólica.'

'El señor presidente: Señor Rodríguez, ese es un tema, perdón, ese es un tema que hemos analizado también en la Mesa en relación con el anterior asunto y lo que se ha concluido, además de los propios precedentes que han existido en la Cámara, es que quien debe considerar si es perjudicial o no son los propios diputados de la isla que lo plantean. Ese es el requisito del Reglamento y, por tanto, no dice el Reglamento, ni la interpretación que se ha hecho hasta ahora en esta Cámara es esa, que tengan que motivar por qué o en qué se entienden perjudicados. Ese ha sido el criterio y por eso la decisión de la Mesa...'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Señor presidente...'

'El señor presidente: ...en el anterior supuesto y en éste es el mismo.'

'Sí, señor Becerra.'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Señor presidente, si usted me permite, yo...'

'El señor presidente: ¿Me dice qué le tengo que permitir?'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Si usted me permite, me gustaría explicar, explicar por qué considero que se ven perjudicados los intereses de Lanzarote cuando se hace un uso torticero de este Parlamento...'

'El señor presidente: Señor Becerra, señor Becerra...'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): ...sobre una imputación que ya...'

'El señor presidente: ¡Señor Becerra, por favor!, señor Becerra, si yo le permitiera explicar por qué ustedes lo entienden, tendría que permitir a la Cámara entender si es perjudicial o no y, por tanto, someteríamos a la interpretación de la Cámara si es perjudicial o no. Creo que no ha lugar ni a lo uno ni a lo otro; por tanto, la decisión es muy clara.'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Tiene razón, presidente.'

'El señor Rodríguez Pérez (Desde su escaño): Señor presidente.'

'El señor presidente: Señor Rodríguez.'

'El señor Rodríguez Pérez (Desde su escaño): Lo que sí es sorprendente, lo que sí es torticero es que unos tránsfugas, que unos tránsfugas...'

'El señor presidente: Señor Rodríguez, señor Rodríguez, señor Rodríguez...'

'El señor Rodríguez Pérez (Desde su escaño): ...que unos tránsfugas estén manejando...'

'El señor presidente: Señor Rodríguez, no tiene la palabra. Señor Rodríguez, no tiene la palabra.'

'Señorías, señorías, señorías...'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Señor presidente...'

'El señor presidente: Señor Becerra, tampoco tiene la palabra. No le voy a dar la palabra, señor Becerra...'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): No, señor presidente, solicito el amparo de la Presidencia...'

'El señor presidente: Señor Becerra...'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Señor presidente, estoy solicitando el amparo de la Presidencia.'

'El señor presidente: Señor Becerra, señor Becerra...'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Señor presidente...'

'El señor presidente: Dígame.'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Mire, no iba a intervenir en este sentido, señor presidente. Voy a solicitar el amparo de la Presidencia de este Parlamento cuando en el día de hoy un miembro de este Parlamento, de la Mesa del Parlamento, se ha dirigido a un diputado de esta Cámara con insultos graves única y exclusivamente por hacer un ejercicio de sus derechos como diputado.'

'El señor presidente: Señor Becerra, perdone un momento.'

'Yo desconozco que eso haya sucedido, desde luego en el Salón de Plenos y durante la sesión plenaria...'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Yo le pido...'

'El señor presidente: ...que hubiera sucedido y desconozco, repito, si ha sucedido. En todo caso, habiendo sucedido fuera de la Cámara, yo estoy dispuesto absolutamente...'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Señor presidente...'

'El señor presidente: Sí.'

'El señor Becerra Robayna (Desde su escaño): Ha ocurrido dentro de esta Cámara por un miembro de la Mesa del Parlamento y a mí me gustaría que pidiese las disculpas oportunas, porque si no me voy a ver obligado a pedir el amparo del presidente para ese diputado, que es don Alejandro Díaz.'

'El señor presidente: Gracias.'

'Señor Becerra, perdón, señor Becerra, usted puede pedir el amparo al presidente y, si ha lugar al amparo, el presidente se lo dará, como hago con todos los diputados. Le reitero, desconozco absolutamente que haya sucedido nada de esa índole. Desde luego durante la sesión plenaria no ha sucedido y, por tanto, este presidente lo desconoce. Si ha sucedido, hay unos métodos perfectamente claros para que se pueda dar satisfacción, en el caso de que tenga usted razón, en lo que ha sucedido, y nada más, pero creo que ni este es el momento ni el lugar ahora mismo oportuno para hacerlo durante la sesión plenaria, de algo que no ha sucedido durante esta sesión plenaria.'

'Y si les parece continuamos. Yo rogándoles que todos nos tranquilicemos, vayamos a lo que tenemos que hacer y analicemos el dictamen, empezando por los votos particulares, tal y como se había establecido.'

'Sí, señor Cruz.'

'El señor Cruz Hernández (Desde su escaño): Señor presidente, yo quisiera saber, es que me han interpelado directamente para que explicara una cuestión, en el ejercicio de mi derecho...'

'El señor presidente: ¿El qué?'

'El señor Cruz Hernández (Desde su escaño): ...de diputado y quisiera saber si puedo explicar mi ejercicio de derecho de diputado y tengo el amparo de la Mesa para el ejercicio del mismo en todo momento.'

'El señor presidente: No, no, no lo tiene. Si quiere que se lo diga así de claro, no lo tiene. Vamos a ver...'

'El señor Cruz Hernández (Desde su escaño): ¿No tengo amparo, me está diciendo?'

'El señor presidente: Señor Cruz, señor Cruz, en primer lugar, usted pidió la palabra y usted justificó el veto que usted... (Rumores en la sala.) ¡Señorías, por favor, un poco de tranquilidad! Usted pidió, usted pidió el veto, mandó el escrito, ha traído el escrito, ha tenido, como no podía ser de otra manera, el amparo de la Mesa de la Cámara y de esta Presidencia, porque así lo ampara el Reglamento, y, por tanto, yo creo que no ha lugar a ningún tipo de discusión más sobre ese aspecto.'

'(El señor presidente del Gobierno, Martín Menis, solicita la palabra.)'

'Estamos en otro punto del orden del día, estamos iniciando el debate de otro asunto, y es el que vamos a hacer ahora.'

'El señor presidente del Gobierno me pide la palabra, creo que para intervenir en este siguiente asunto, no habiendo cerrado el anterior, pero, bueno, en todo caso...'

'El señor presidente del Gobierno (Martín Menis): No sé si puedo...'

'El señor presidente: ...los miembros del Gobierno saben que tienen derecho a... (Rumores en la sala.)'

'El señor presidente del Gobierno (Martín Menis): Un segundo...'

'(El señor Hernández Spínola solicita la palabra.)'

'El señor presidente: ¡Señores!'

'Cualquier miembro del Gobierno, y por tanto su presidente, tienen derecho a intervenir en cualquier momento del debate y será el presidente el que otorgue este derecho o no. Les guste o no les guste, señorías. Igual que les gusta el Reglamento en un sentido, debe gustarles en el otro.'

'Señor Hernández Spínola, no tiene la palabra en este momento, la tiene el señor presidente del Gobierno.'

'El señor presidente del Gobierno (Martín Menis): Simplemente...'

'El señor Hernández Spínola (Desde su escaño): Una cuestión de orden, solo una cuestión de orden (Rumores en la sala).'

'El señor presidente: Señor Hernández... (Rumores en la sala.)'

'Señor Hernández Spínola...'

'El señor Hernández Spínola (Desde su escaño): Tranquilo, tranquilo.'

'El señor presidente: No, señor Hernández Spínola...'

'El señor Hernández Spínola (Desde su escaño): Una cuestión de orden. Sencillamente queríamos saber a qué efectos va a hablar el presidente del Gobierno, porque...'

'El señor presidente: Señor Hernández Spínola, señor Hernández Spínola,...'

'El señor presidente del Gobierno (Martín Menis): Si me deja hablar, se lo diré.'

'El señor presidente: ...el Gobierno puede intervenir en cualquier momento del debate y no tiene que justificar a qué efectos.'

'El señor Hernández Spínola (Desde su escaño): ¡Aquí no hay debate!'

'El señor presidente del Gobierno (Martín Menis): Si me deja...'

'El señor presidente: Sí, señor. Hemos empe­zado -perdón, señor presidente del Gobierno-, acabamos de iniciar el debate de un segundo asunto, pero no habiendo iniciado...'

'El señor Hernández Spínola (Desde su escaño): ¡Ah!, bien, bien, bien, sí.'

'El señor presidente: Perdón, perdón. No habiendo iniciado incluso el segundo asunto, ustedes, todos ustedes, señor Cruz, señor Hernández Spínola, señor Becerra, señor Rodríguez y alguno más, han intervenido, una vez que yo había anunciado el segundo asunto, han intervenido sobre el primero. El Gobierno y el presidente del Gobierno tienen derecho claramente a intervenir en cualquier asunto. Entiéndanlo en el asunto segundo, dentro de los dictámenes de comisión, o entiéndanlo en el primero. Así lo he entendido yo cuando, una vez ya emitida la decisión sobre el primero, habíamos empezado el segundo. ¿Le parece? Gracias.'

'Señor presidente del Gobierno, tiene la palabra.'

'El señor presidente del Gobierno (Martín Menis): Presidente, un segundo nada más.'

'Yo creo que tenemos que tranquilizarnos todos, lo han dicho todos.'

'Hemos trabajado juntos una legislatura, hemos ido sacando muchas cuestiones importantes para Canarias. Lo he hablado con todos los diputados de esta Cámara, hemos contribuido todos a que esta tierra avance y lo que no podemos hacer es perder unos valores que estamos llevando a todos los ciudadanos, cuando se nos llena la boca de educación en valores, que estemos dando un espectáculo. Yo les pido a todos, por favor, no sé, no estoy ni obedeciendo al Parlamento de la Cámara, con el mayor respeto a todos los diputados de esta Cámara, de todos los partidos, sigamos el Pleno con tranquilidad y sigamos avanzando, porque creo que hemos hecho muchas cosas bien.'

'Yo quería esta mañana agradecerles a todos el esfuerzo de estos años, porque hemos pasado dificultades, hemos pasado problemas, pero hemos avanzado, con la contribución de todos, del Estado también, y estamos acabando una legislatura y tenemos compromisos que sacar adelante.'

'Gracias.'

'(El señor Alemán Santana solicita la palabra.)'

'El señor presidente: Gracias, señor presidente del Gobierno.'

'Sí, señor Alemán.'

'El señor Alemán Santana (Desde su escaño): Yo quería pedir la palabra porque quiero también intervenir en razón de lo que ha dicho el presidente del Gobierno.'

'El señor presidente: No ha lugar, señor Alemán, a intervenir en razón de lo que ha dicho el señor presidente del Gobierno.'

'El señor presidente del Gobierno ha hecho su intervención en relación con el asunto que estamos, en el enfoque que ha querido darle el señor presidente del Gobierno, como cada uno de los intervinientes lo hace con absoluta libertad, como siempre ha permitido esta presidencia. Y, por tanto entiendo, y creo que usted también lo entiende perfectamente, que no ha lugar a ningún turno ahora tras la intervención del presidente del Gobierno.'

'El señor Alemán Santana (Desde su escaño): Señor presidente...'

'El señor presidente: Señor Alemán, creo que el tema está zanjado.'

'El señor Alemán Santana (Desde su escaño): Señor presidente, no, era para agradecerle, seguirle agradeciendo y, además, que usted me interprete.'

'Muchas gracias.'

'El señor presidente: Muchas gracias, señoría.'