Diario de Sesiones 138, de fecha 7/10/2014
Punto 24
8L/C-0762 COMPARECENCIA DEL GOBIERNO -CONSEJERA DE CULTURA, DEPORTES, POLÍTICAS SOCIALES Y VIVIENDA-, INSTADA POR EL GRUPO PARLAMENTARIO NACIONALISTA CANARIO (CC-PNC-CCN), SOBRE EL PLAN DE ACOGIDA.
El señor PRESIDENTE: Comparecencia de la señora consejera de Cultura, Deportes, Políticas Sociales y Vivienda, instada por el Grupo Nacionalista Canario, sobre el plan de acogida.
Doña Flora Marrero.
La señora MARRERO RAMOS: Muchas gracias, señor presidente.
Señora consejera, venimos, desde el Grupo Parlamentario Nacionalista, a pedirle una comparecencia. Hemos visto varias iniciativas parlamentarias de los diferentes grupos en relación con este tema, pero a nosotros siempre nos parece importante que de los niños y las niñas veamos su situación, su problemática, en sede parlamentaria.
La comparecencia es sobre el plan de acogida del Gobierno de Canarias. Y, desde luego, coincidimos todos los grupos: estoy convencida de que lo que queremos es que todas las niñas y todos los niños crezcan felices en un entorno adecuado para su infancia, en ese periodo de vida como es la infancia, que es un referente y que nos marca para siempre. Pero, cuando no es posible crecer en ese entorno adecuado, cuando no tenemos esa familia, pues, es trabajo de la Administración.
Tenemos en esta sociedad de bienestar esa suerte, entre comillas, donde los menores, antes en un centro residencial, ahora estamos viendo, con el plan de acogida, cada vez menos. Pero, desde luego, en otros lugares del mundo, el destino de la infancia de esos niños que no tienen esa familia es la mendicidad, la prostitución infantil, los niños guerrilleros, etcétera. Pero también en nuestra sociedad de bienestar tenemos nuestras propias miserias y nuestras propias vergüenzas. Estoy hablando de los niños y las niñas víctimas de violencia de género, los casos de prostitución infantil, los casos de pederastia que estamos viendo en los medios de comunicación.
Pero nosotros venimos a esta comparecencia a preguntarle por el plan de acogida. Está en la página web la guía de acogimiento familiar, la campaña que se ha llevado a cabo. Y nosotros queremos preguntarle, aprovechar esta comparecencia para que nos explique toda esta red que existe en este momento, cómo están la situación del acogimiento familiar y su relación. Tenemos los datos, que los hemos visto en sede parlamentaria, su relación en los últimos años; el balance del programa de canarios en familia ajena.
Hemos visto, por preguntas que he solicitado por escrito, cómo se ha ido incrementando, afortunadamente -siempre hablar afortunadamente en esta situación hay que ponerlo entre comillas-, pero los niños y las niñas pueden tener una familia. Pero sí que nos gustaría que algún día se pudiese llegar a ese objetivo de cien por cien, a corto o medio plazo, de niños que puedan estar en familias de acogida. Evitar lo que nosotros hemos dicho muchas veces, los denominados -que no nos gusta la terminología- como los niños y las niñas "institucionalizados". Sí que nos gustaría, si nos pudiese concretar, el perfil de la familia acogente; el tiempo desde que una persona decide ser familia acogente hasta que finalmente llega la resolución de la Dirección General del Menor; y cualquier otra información que usted nos pueda dar.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, doña Flora Marrero.
La señora consejera de Cultura, Deportes, Políticas Sociales y Vivienda, doña Inés Rojas.
La señora CONSEJERA DE CULTURA, DEPORTES, POLÍTICAS SOCIALES Y VIVIENDA (Rojas de León): Buenas tardes. Gracias, señor presidente.
Comparece el Gobierno, a petición del Grupo Nacionalista, para informar sobre el plan de acogida o el programa de acogida de infancia del Gobierno de Canarias.
Usted lo decía, señora diputada, señora Marrero: la infancia debe crecer feliz y la infancia debe crecer, además, en un entorno adecuado. Cuando la familia biológica no garantiza ese entorno adecuado, es decir, ese derecho de los niños y las niñas, tiene que recurrirse al amparo del Gobierno de Canarias. El amparo del Gobierno de Canarias puede hacerse, como se ha hecho en los últimos años y casi hasta hace muy poco, en centros de acogida, atendidos por profesionales cualificados, o en la familia extensa.
Hace unos cuantos años, al final ya de la legislatura pasada, el Gobierno de Canarias ponía en marcha el Programa de Acogimiento Familiar, en familia ajena y en familia profesional. El objetivo, señoría, el que usted decía: que el cien por cien termine siendo acogido; que los niños y niñas amparados por el Gobierno estén acogidos en una familia, tanto extensa o ajena como profesional.
Es, además, también una directiva de la propia Unión Europea la que nos propone que, desde luego, en un determinado tiempo, logremos que todos los niños y niñas terminen siempre acogidos en una familia. Por eso es tan importante decirles hoy que sí, que el objetivo es el cien por cien, pero le arranco ya con este dato: en estos momentos, el 60% de los niños y niñas amparados por el Gobierno de Canarias están viviendo, están siendo acogidos, en una familia. Por lo tanto, creo que el porcentaje, como saben, se ha elevado muchísimo en los últimos años; afortunadamente, en los últimos cuatro o cinco años, de forma importante.
Y otro dato, para que veamos que, efectivamente, este programa está funcionando y está funcionando bien: en los últimos dos años, más de tres mil familias, señorías, más de tres mil familias han solicitado información sobre el Programa de Acogimiento Familiar en Canarias. De estas, el 76% de estas familias que lo han solicitado han continuado interesándose.
Recuerden siempre, señorías, que este es un proceso de: primero, pido la información; luego, veo si continúo con el programa, que sería con la formación; luego, vería si continúo, que sería la idoneidad de la familia para, desde luego, ser familia acogente. Es decir, esto lleva un proceso que muchas familias, pues, a lo mejor, se paran en alguno de esos momentos o continúan. Creo que es un porcentaje muy elevado que de esas 3.000 familias hoy el 76% de ellas continúen en el proceso; es decir, son 2.280, exactamente.
Y que ya de forma definitiva, o sea, sería como el segundo o tercer dato, de forma definitiva, ya tenemos un banco de familias acogentes permanente, en estos momentos ya cerrado, de algo más de doscientas familias.
Por lo tanto, señorías, creo que esa es una garantía que nos lleva a que hoy toda la infancia que tiene que amparar el Gobierno de 0 a 6 años ya no va a un centro de acogida atendido por profesionales, sino que va directamente a una familia que se escoge dentro del banco de familias acogentes. Eso es absolutamente importante: nuestro objetivo también es que sean los niños de todas las edades, pero en un primer momento ya hemos logrado que de... ¿Recuerdan que hace no tanto yo les decía de 0 a 3, y que nuestro objetivo era de 0 a 6? Bien, pues ya hemos llegado al objetivo de 0 a 6, pero el objetivo es, además, el cien por cien, y, por lo tanto, todas las edades.
Decirles que, en los dos últimos años, son 185 niños y niñas los que han podido convivir en una familia acogente, proporcionándoles, por tanto, un entorno familiar, una vez que han tenido que salir del entorno familiar biológico por circunstancias que todos nos podemos imaginar.
El hecho de volver a una familia, y lo siguiente, señorías, el hecho de que la familia biológica, en la inmensísima mayoría de los casos, conoce que sus niños o niñas van a ser acogidos en una familia acogente -además, siempre que también se pueda, se conocen las dos familias-, hacen que, desde luego, la situación de amparo por parte del Gobierno para esta infancia sea bastante menos dramática, traumática, y, por lo tanto, que se produzca, como se está produciendo también, que, una vez resuelta la situación que llevó al amparo del Gobierno -porque se trabaja con la familia ante la dificultad que haya podido tener para que el entorno, como decíamos, no sea el propicio para el desarrollo del niño o la niña-, en muchos casos, si la situación no es irreversible, el niño o la niña que está acogido en esa familia acogente ajena vuelve a la familia biológica o a la familia extensa, que es realmente de lo que se trata.
Y el niño, el hecho de que no esté en esos primeros años y en esos primeros días de vida en un centro, aunque sea atendido por magníficos profesionales, sino al calor de una familia, pues, nos da, desde luego, primero, son los derechos de la infancia; y segundo, todos sabemos que esos primeros momentos son muy importantes, que se crezca o que se tenga el calor de un hogar.
Por lo tanto, decirles, señorías, que, en Canarias, el año pasado, el año 2013 lo cerramos con 2.359 niños y niñas con una medida de amparo por parte del Gobierno. Es decir, señorías, 243 menos de los que teníamos amparados en el año 2008. Digo este dato de comparar lo del 2008 con el 2013 porque siempre hemos pensado que este periodo de crisis económica había llevado a que el Gobierno tuviera que amparar a más infancia. Recuerden, y siempre estoy defendiéndoles, que, con toda probabilidad, lo tenemos comprobado, que un hecho de crisis económica como esta hace que en los lazos familiares y el entorno -valga aquí, además, el parecido de la palabra- se proteja muchísimo más a la infancia, y no se vean el Gobierno ni los ayuntamientos ni los cabildos en la necesidad de amparar a esa infancia.
Por lo tanto, lo que sí hacemos es detectar a la infancia que está en una situación de riesgo para, desde luego, trabajarla y evitar el amparo. Eso, como les digo, hace que tengamos, en el año 2013, 243 niños y niñas menos.
Pues bien, señorías, de estos que hasta el año 2008 y 2009 teníamos -cerca de mil trescientos niños- en los centros de acogida, atendidos por profesionales, acabamos el 2013 con 937 en los centros de acogida y 1.422 en familias de acogida; por lo tanto, un porcentaje, como ven, absolutamente importante.
Estamos hablando, señorías, de que un Programa de Acogimiento Familiar, que no supone en ningún momento derecho a la adopción ni tampoco supone nunca un acogimiento indefinido temporalmente hablando, eso tiene una complejidad importante: primero, las familias han de asumir eso, han de saber eso; segundo, el Gobierno, desde la Dirección de Dependencia, Infancia y Familia, también ha de articular las medidas y los mecanismos para que eso tenga garantía.
Por eso, de ahí que se elaboren esos equipos técnicos que, además, trabajan en colaboración con los cabildos -especialmente, con los cabildos-, que tienen la competencia transferida de la gestión de los centros de menores amparados por el Gobierno, para que esos equipos técnicos trabajen las veinticuatro horas del día, todos los días del año, acompañando, haciendo un seguimiento; pero, sobre todo, den acompañamiento a las familias acogentes. Por lo tanto, complejo sí; pero, como ven, hay datos absolutamente prometedores.
Por eso les decía que es un trabajo, además, conjunto; aquí el mérito o el éxito no es solo del Gobierno de Canarias: es de las tres administraciones trabajando conjuntamente. Y, por lo tanto, en esta primera intervención, señorías, un 60% de los niños amparados por el Gobierno viven hoy y están hoy acogidos en una familia extensa, ajena o profesionalizada, y el objetivo del Gobierno es llegar al cien por cien de los mismos.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, doña Inés Rojas, señora consejera.
Los grupos no solicitantes de la comparecencia. Grupo Parlamentario Mixto, don Pedro Justo.
El señor JUSTO BRITO (Desde su escaño): Gracias, señor presidente.
Nosotros estamos absolutamente a favor, obviamente, de este programa de acogida de menores en familias. Nos parece positivo para los menores, y nos parece positivo para la sociedad, porque el favorecer este tipo de criterios en la sociedad de tener esta solidaridad para acoger a personas que tienen problemas -en este caso, a menores-, pues, nos parece muy positivo.
Yo solo tengo una pregunta, porque tengo una duda. Dice usted que hay ahora, lo acaba de comentar, 1.422 niños acogidos en familias, y yo tengo aquí una respuesta de usted, de abril, que pone "familias seleccionadas para acoger a menores", y pone que el total de familias idóneas era 146. Entonces, no me cuadra mucho que haya 146 familias y 1.400 niños, supongo que es que yo no lo entiendo.
Y, luego, simplemente comentarle que en los Servicios Sociales de algunos ayuntamientos nos han dicho que ellos sí están viendo un mayor número de menores en riesgo, pero que están enviando informes a los servicios de la consejería y que la consejería ha endurecido, por decirlo así, los criterios para aceptar a niños, o sea, a menores, como menores en riesgo. Simplemente, que me lo aclare.
Gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, don Pedro.
Grupo Socialista Canario, doña Rosa Guadalupe Jerez Padilla.
La señora JEREZ PADILLA (Desde su escaño): Gracias, señor presidente. Buenas tardes, señorías.
Señora consejera, este es un programa, desde luego, muy bueno; es bastante positivo, porque facilita a los menores que se encuentren en familias normalizadas, sobre todo, cuando se trata de niños pequeños.
Es un programa que, ante la situación social que ha llevado a la crisis a muchas familias, con situaciones como desempleo, desahucio, exclusión social -en definitiva, a situaciones límite-, hace que las instituciones funcionen realmente como todos esperamos. Es un programa en que se les está dando una gran oportunidad a esos niños y niñas de no tener que vivir en un centro de protección. Y creo, como decía al principio, que es un gran programa y con el cual creo que debe continuar.
Por eso, este -y todos los que pertenecemos a la Comisión de Servicios Sociales...- es un tema que ha ido continuamente a esta comisión, hemos hablado mes sí y mes no de los planes, del plan de acogida que tiene la consejería, y, por tanto, lo que sí me gustaría saber, por parte de usted, y que me aclarase, es: si realmente este plan va a continuar -porque el presupuesto es muy importante para los planes-, con cuánto, cuál es el presupuesto que tiene este plan, o con cuánto va a contar, porque, en la última comisión que tuvimos de Servicios Sociales, hablamos de menores en acogida, ¿se acuerda usted?, y hablaba yo de que los ayuntamientos no estaban de acuerdo en cuándo estaban recibiendo el dinero, el presupuesto para esos menores, que había que agilizarlo. Esa es una pregunta.
Y cuánto tiempo -porque yo creo que todo plan tiene que ser evaluado-, cuándo o cuánto tiempo tiene usted para traer o para llevar a cabo la valoración del plan, para saber si los objetivos son los adecuados, si hay que ampliar esos objetivos; en definitiva, si está dando los resultados que realmente usted está hoy manifestando aquí.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, doña Rosa Guadalupe.
Por el Grupo Parlamentario Popular, doña Milagros Bethencourt.
La señora BETHENCOURT AGUILAR: Gracias, señor presidente. Buenas tardes, señorías.
Mucho hemos debatido en esta Cámara sobre acogimiento familiar, y el Grupo Parlamentario Popular por supuesto que está de acuerdo en estas campañas y en este acogimiento, porque es lo mejor para los niños y niñas de toda la sociedad.
Sin embargo, señora consejera, hoy no vemos -ni usted ha expuesto- ningún avance relevante en el acogimiento familiar en Canarias. De la realidad de la infancia en Canarias hablan los datos de Unicef: 130.000 menores en el umbral de la pobreza. Y este Gobierno de Canarias, por no tener, por no tener, no tiene ni plan de infancia aprobado; pero tampoco -tampoco- contempló medidas específicas para la infancia en la estrategia de lucha contra la pobreza. Los datos de menores en riesgo, desamparo y guarda en Canarias siguen siendo desoladores. ¿Y por qué son desoladores?, porque el Gobierno de Canarias tampoco trabaja en la raíz del problema, en las familias, en las madres, con los padres, en la mediación, en la formación, en el empleo.
Señora consejera, 2.696 menores declarados en riesgo en Canarias, esos son los datos; 1.493 declarados en desamparo. Y una cifra que me parece tremenda: 110 menores entregados en guarda por sus propios padres porque no podían atender a su menor y tuvieron que entregarlo al Gobierno de Canarias para que el Gobierno de Canarias pudiera atender a esos menores.
A pesar de las campañas de acogimiento familiar, señora consejera, todavía hoy tenemos en Canarias -todavía el Gobierno de Canarias tiene- a 920 menores, niños y niñas, tutelados en centros y hogares. Y le voy a dar los datos por islas: Gran Canaria, 407; Lanzarote, 50; Fuerteventura, 48; Tenerife, 382 menores; La Palma, 23; e incluso mi isla, La Gomera, 10 menores declarados en desamparo.
Señora consejera, más de doscientas familias a las que felicito por su solidaridad en el banco de acogimiento, pero es que el Gobierno de Canarias todavía ha sido incapaz de conectar a estas familias que están en el banco de acogida familiar con esos novecientos menores, niños y niñas, que están pendientes de ser acogidos por familias extensas o ajenas -mejor la familia extensa, porque no sale de su núcleo familiar, y en eso estamos de acuerdo, señora consejera-.
Y creo que ahí ha estado el fracaso de la campaña, en no saber conectar a estas familias con los menores para que el porcentaje de menores en centros y hogares siga bajando, no solamente de menores de 0 a 3 años, sino menores de 0 a 18 años, señora consejera. Ahí está el fracaso. Y yo le voy a poner el ejemplo de dos familias santacruceras, que se las puedo traer para que se reúnan con usted, señora consejera, que están a punto de caducarles sus certificados de idoneidad y el Gobierno de Canarias no les ha dado respuesta, que llevan dos años con su certificado esperando por los menores y que el Gobierno de Canarias no les ha entregado a ese menor para ser atendido.
Gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, doña Milagros.
Por el grupo solicitante de la comparecencia, doña Flora Marrero.
La señora MARRERO RAMOS: Muchas gracias, señor presidente. Señora consejera.
Decíamos en la primera intervención que teníamos los datos, pues, del incremento progresivo que ha habido del acogimiento familiar: en el año 2007 había 1.296, y ahora, actualmente, estamos hablando de 1.420; y, lógicamente, se ha reducido lo que es el acogimiento residencial. A mí me parece que es una cifra en que se ve que hay un progreso. Decíamos del 2007: un 48% de acogimiento residencial frente a un 52% del familiar; y usted nos daba la cifra hoy de un 63%, y después el residencial, pues, se ha reducido a un 37%. Desde luego, yo coincido con la representante del Partido Popular en que tenemos que mejorar, pero es que los datos están aquí, ha habido una mejora bastante importante.
Por eso nosotros le vamos a pedir que se siga con las campañas de acogimiento, nos parece que son importantes. Este incremento de doscientas familias, porque también nos tenemos que poner en el lugar de esas familias. Es decir, son unas familias que tienen el valor de tener en su casa, durante un periodo de tiempo, a unos niños o unas niñas a los que al final les coges un cariño, y que sabes que posiblemente no los va a ver más. Es una situación que, desde luego, hay que ponerla en valor; hay que reconocerles esa valentía a esas familias o a esa persona que decide tener a esos menores en acogimiento, pero también es una experiencia -porque conozco casos, además- gratificante, pero también es dura. Se dan las dos situaciones: muy gratificante cuando viene el niño, cuando lo educas, además lo tienes durante meses, lo tienes durante años, le tienes ese cariño, le tienes que explicar que no vas a estar ahí toda la vida. Y después es muy duro cuando se va, bien -que es el objetivo de este programa- con su familia biológica, o bien con la familia adoptante.
Usted nos daba la información de que había 3.000 familias que han solicitado esa información de ese Programa de Acogimiento Familiar. Y, desde luego, tenemos que ponernos como objetivo -usted, desde el Gobierno, y nosotros, como grupo parlamentario- de que por lo menos el 50% pudiese terminar como familia acogente. Bien es verdad que no es lo mismo ver una campaña que después superar cada uno de los requisitos, porque es difícil, y no todas -también hay que decirlo-, no todas las familias que solicitan ser familias acogentes son idóneas, porque esa también es una situación que se da. Y estamos viviendo, además, la situación de los nuevos modelos de familia que alguna vez hemos visto en sede parlamentaria.
Decíamos que el objetivo es la reintegración familiar a la familia biológica. Ese trabajo, que me parece que tenemos que destacarlo, que se hace con la familia biológica. Hay un trabajo con la familia acogente de formarlos, tienen un apoyo los trescientos sesenta y cinco días, las veinticuatro horas del día; pero también, cuando no es posible ese reintegro en la familia acogente, queda la adopción, queda la adopción.
Y a mí me parece que también aquí hay que hacer un impulso de que no tarden mucho tiempo, que se puede diagnosticar en un periodo de tiempo más corto, que esos niños no permanezcan en esa indefinición. Sabemos que es muy complicado, que es muy complicado, pero sí que nos parece que es importante, sobre todo, para evitar los niños institucionalizados, porque que estén durante un periodo en que existan esas expectativas de que pueden volver a su familia biológica y que después no se dé...
Y después sabemos que hay otra realidad: que siempre es mucho más fácil adoptar a un niño pequeño que a un niño ya cuando tiene cierta edad, porque tiene un ciclo vital y es mucho más complicado. Por eso nosotros, en la medida en que se pueda, pues, que en esos periodos de adopción se pueda tomar esa decisión cuando el niño es pequeño.
Hablábamos de las campañas que en su momento tenía la consejería, y vemos la guía que está en la página web, como "Le enseñarías a aprender", "Le enseñarías a crecer", "Le enseñarías a jugar". Usted ha comentado el trabajo con los ayuntamientos y los cabildos, que a nosotros nos parece importante, y también con otros tipos de colectivos de carácter social, porque además tienen mucha más facilidad para contactar o para conocer a esas familias que pueden ser acogentes; no todas las campañas tienen que ser a través de los medios de comunicación, pueden ser también campañas directas, dar esa información.
Después, en su momento, se trabajó -y yo creo que fue una experiencia bastante positiva, porque lo hemos hablado en sede parlamentaria- con las empresas, por ejemplo, con Aguas de Teror, donde tienen un importante compromiso social, y yo lo quiero aquí relacionar con lo que son las cláusulas sociales, que desde luego vimos que están recogidas en la estrategia frente a la pobreza, porque repercuten indirectamente sobre el menor. Las cláusulas sociales están dirigidas directamente a las personas en exclusión social, pero si también, si contactamos, decíamos, con esas organizaciones, con esas empresas que puedan difundir, pues, indirectamente, benefician también al menor.
Por eso, nosotros queremos reiterar la necesidad de esas campañas, de seguir potenciándolas, de ese teléfono de información, ese 012 de asesoramiento. Y, después, recordar lo que son los propios objetivos del acogimiento, ¿no?, que es una alternativa de convivencia familiar para que el menor no esté institucionalizado. Me parece que es importante ese incremento, que es un objetivo que está recogido en la propia página del Gobierno de Canarias, el número de familias acogentes.
Va a tener usted siempre nuestro apoyo. Ese apoyo a las familias -de formación, de seguimiento, de asesoramiento-, sobre todo, para que con esas 3.000 personas que se interesen podamos llegar a ese 50% que yo le ponía como objetivo; esa coordinación, que es imprescindible, de las diferentes entidades.
Y después sabemos que hay diferentes modelos de acogimiento: el simple, que es hasta los dieciocho meses, que es un periodo corto de tiempo en que es cuando se trabaja conjuntamente con la familia biológica, y además usted lo ha comentado y lo ha dicho muchas veces -incluso, existe relación de la familia acogente con la familia biológica-; después, el permanente, que ahí es donde yo quiero hacer hincapié en el tema de la adopción, cuando ya se sabe que no es posible la reintegración familiar, pues, que se le busque una solución a ese menor.
Sabemos ahora las dificultades que hay para la adopción internacional, y sabemos que existen niños en Canarias que pueden ser adoptados. Trabajar esa materia, porque, además, conozco casos que se están dando.
Y después quizás la parte más dura es el acogimiento que se denomina, dentro de las diferentes modalidades, acogimiento familiar "de urgencia", que es cuando la familia acogente recibe a ese niño, no tiene historia, la historia vital de ese niño, de esa familia biológica que tiene..., quizás es la parte más dura, pero me parece que también hay que hacer un refuerzo, porque estamos hablando de situaciones de desesperación, en las que hay que sacar a ese niño de ese entorno por circunstancias que no queremos ni imaginar, pero que se dan.
Con lo cual, me parece que tenemos el reto -y estoy convencida de que se puede hacer, porque los datos están aquí- de lograr que los menores, los niños y las niñas, en Canarias, puedan tener, con el drama que tienen en su entorno, una infancia feliz. Ahí va a tener siempre nuestro apoyo, y siempre seguiremos haciendo iniciativas parlamentarias en esta línea.
Muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, doña Flora Marrero.
La señora consejera de Cultura, Deportes, Políticas Sociales y Vivienda, doña Inés Rojas.
La señora CONSEJERA DE CULTURA, DEPORTES, POLÍTICAS SOCIALES Y VIVIENDA (Rojas de León): Gracias, señor presidente. Señorías.
Primero, para ir aclarando algunas cosas, algunas dudas que tiene algún grupo parlamentario, como el Grupo Mixto: sí, efectivamente, usted tendrá una respuesta con ese número de niños o de familias acogentes. Estamos hablando, con toda probabilidad, de que esta pregunta se refirió en su momento a familias acogentes ajenas al niño o la niña. Estamos hablando de un porcentaje muy elevado, es el más elevado, el del acogimiento en familia extensa. Porque lo que hay que tener en cuenta es que el Gobierno de Canarias..., tampoco se trata de números, señorías, pero que nos valgan los números para saber un poco dónde estamos, que por un niño que tengamos amparado por el Gobierno... -yo prefiero llamarlos "niños amparados por el Gobierno" que "niños en desamparo"; son niños amparados por el Gobierno, porque están en una situación complicada-. Por lo tanto, tienen amparo, no están desamparados, tienen amparo.
Por cualquiera, el número más ínfimo que tengamos, desde luego, ya es un problema; pero también para que nos pongamos en la magnitud exacta del problema. De ahí las cifras, sin son mil o si dos mil o dos mil trescientos. Bien, pues, sin son dos mil trescientos, la inmensa mayoría de los niños están acogidos en familia extensa -sus abuelos, en general, casi siempre-. Lo que hemos hecho en los últimos años es extender un programa -que ya estaba previsto, pero que no terminaba de arrancar, la gente no se animaba a hacerlo- en que esas personas que no tienen ningún vínculo familiar con estos niños y niñas que están amparados por el Gobierno decidan también acogerlos en casa. A esa cifra se refería. Por lo tanto, seguro que aclarada ahí su duda.
Y, en cuanto a que el Gobierno ha endurecido los criterios para amparar a un niño que esté en una situación complicada -o una niña-, pues, mire, según como se mire, porque hay gente que lo que ha dicho es que todo lo contrario; que, desde que vemos que una familia no tiene para darles de comer a sus niños, enseguida los ampara el Gobierno. Pues, mire, no: el Gobierno no ha endurecido. El Gobierno, como le puede pasar a cualquiera de nosotros, toma todas las medidas necesarias, imprescindibles, para evitar, desde luego, amparar a un niño o a una niña por el Gobierno. Procuramos siempre, tanto desde el ayuntamiento que previene, desde el cabildo que interviene en declarar el amparo para el Gobierno, hacemos todo lo posible para lograr que en su entorno el niño tenga lo que le corresponde y lo que necesita.
Una vez que se agota todo eso es cuando se llega al amparo. Es decir, no es tan fácil que de la noche a la mañana tengamos que amparar a un niño en condiciones relativamente normales. Hay casos y casos, como decía la diputada proponente, la señora Marrero. Si tienes un caso absolutamente urgente, de forma inmediata... -es más, señorías, ante la duda, preferimos actuar; ante la duda, preferimos actuar inmediatamente-. En este momento hay una garantía. Si tenemos que actuar con un bebé, con un niño muy pequeñito, inmediatamente va a una familia acogente.
Me decía también la diputada del Partido Popular que sabe de diez u once casos de familias, padres o madres -o ambos- que han venido al Gobierno a decir: "oiga, acoja usted a mis hijos, porque yo no puedo". Se dan esos casos. Sí. Se da algún caso, pero tengamos en cuenta lo siguiente: el hecho de tener incluso el acogimiento familiar les da la posibilidad a estas familias de resolverles la situación complicada que dicen tener para no poder atender ellos a sus hijos. Y, en el caso de que se pueda atender eso de forma temporal, de forma temporal, y con el beneplácito de esa familia, los niños van a una familia acogente. Oye, hasta que papá, mamá, resuelvan, encuentren un medio de vida, tal. Con lo cual, tampoco ahí el drama es absolutamente o demasiado fuerte, sino que el niño y la niña entienden que tienen dos familias ahí que están luchando por ellos.
Por lo tanto, creo que es absolutamente importante que, desde luego, lo pongamos en valor. Lo que me decía de las dos familias, a mí, desde luego, me sorprende muchísimo, pero con usted ya hemos quedado para que me dé los datos. Y, en general, suele pasar cuando alguien tiene la idoneidad para adopciones. Si es la idoneidad para acogimiento, pues, también, desde luego, lo vemos. Para adopciones es un poco más complejo, como seguro que usted también sabe. Por lo tanto, no: el Gobierno -al Grupo Mixto- no ha endurecido los criterios, seguimos en lo mismo.
Y, al Grupo Parlamentario Socialista, decirle lo siguiente: esto ya es imparable, señoría. Es decir, el Gobierno -la comunidad autónoma canaria- no va a eliminar nunca el acogimiento familiar; ya no es posible hacerlo. Es más, como bien le decía, incluso la directiva europea va hacia eso.
Y, además, como bien saben sus señorías, y aprovecho también para comentar este tema, en el plan de infancia que tenemos elaborado, como saben, en el departamento, en la comisión interdepartamental en la que estamos toda la sociedad organizada y que tiene que ver con la infancia recogida, y que está elaborado el plan y que estamos funcionando con base en ese plan, aunque no haya sido aprobado, pendiente solo de la aprobación definitiva de la ficha financiera, que está en estos momentos pendiente de informe económico, nada más, pero estamos funcionando con base en ese plan, como expliqué en sede parlamentaria hace pocos días.
Mire, me hablaba usted, la diputada del Grupo Popular, de que ni siquiera en la estrategia frente a la pobreza contemplamos la infancia, y yo es que, a ver: a ver si recordamos, señorías, que la estrategia frente a la pobreza una de las primeras cosas que además pone en marcha son, precisamente, los comedores escolares, ante la situación difícil de la infancia.
Segundo, la emergencia social va específica y más explícitamente a aquellas familias que tienen, desde luego, niños a su cargo. Modificamos la Ley de Vivienda, priorizando, desde luego, a las familias que tengan infancia a su cargo. Está en el Parlamento la modificación de la prestación canaria de inserción, y precisamente las modificaciones que se producen en ella van priorizando a la familia que tiene infancia a su cargo. Por lo tanto, la infancia, dentro de la situación compleja y complicada que tiene la sociedad en general, es la que, desde luego, necesita más de todos nosotros.
Dice que es un fracaso el que todavía tengamos a novecientos niños o niñas institucionalizados, es decir, en centros. Miren, primero, no es un fracaso que profesionales muy profesionales, y profesionales adecuados, atiendan a estos niños. Segundo -creo que la diputada Marrero también lo decía-: es más difícil acoger a un niño en edades avanzadas -15, 16, 17 años, tengan en cuenta que estamos hablando de menos de 18-, cuesta más en este mismo programa que tenemos de acogimiento en familia ajena, pero también a la extensa le cuesta más acoger a niños de edades más avanzadas que a niños más pequeñitos. Para nosotros es muy importante llegar primero que nada a los primeros, a los de 0 a 3, empezamos así, ¿recuerdan?; ya vamos por 0 a 6, y no nos rendimos en el resto de edades.
Es más, les puedo decir que muchas de las familias del banco de familias acogentes ajenas nos piden, y se está haciendo en algunos casos, que los niños, estos novecientos que están en centros, puedan ir con estas familias los fines de semana, que los fines de semana ellas los puedan llevar de paseo; es decir, vivir un fin de semana en un entorno familiar, y eso también se está propiciando, ante la dificultad -señorías, pongámonos todos en el lugar, y comprenderán que siempre es más complejo este tipo de acogimiento-. Pero que, afortunadamente, pues, también están saliendo grupos de hermanos y demás, que creo que es para poner en valor, como bien decía la diputada del Grupo Nacionalista, poner en valor el valor de las familias acogentes ajenas a esta infancia. Ponerlo en valor.
Es verdad que es muy gratificante esa labor, y que después también es muy dura; depende, es verdad que las despedidas siempre son difíciles, pero queda siempre el vínculo familiar con la familia extensa o la familia biológica, si se diera el caso; y a lo mejor, al poco tiempo, pues, ya te llega otro niño al que vuelves a darle vida y que, a su vez, a ti te da vida. Por lo tanto, se retroalimenta muchísimo.
Por lo tanto, señorías, sí, vamos a poner en marcha, como casi siempre hacemos, la campaña. Es verdad que, con todas las sugerencias que ustedes me han hecho, vamos mejorando esa campaña, llegando cada vez más; pretendemos este año hacerla también a colectivos, hacerla también a empresas, que toda la sociedad canaria sepa que tenemos niños y niñas amparados por el Gobierno que necesitan vivir temporalmente, el tiempo que cada cual pueda dedicarle a estos niños, para, en su tránsito, ir a una familia extensa o ir hacia la vida adulta.
Por lo tanto, señorías, creo que es absolutamente un éxito este programa. Hoy tenemos al 60% de esos niños, tenemos 3.000 familias en Canarias interesándose por este tema. Por favor, todas las familias que se animen, que pidan la información, que no las compromete a nada, y vemos. Si tenemos 3.000 familias y tenemos 900 niños en centros institucionalizados, pues imagínense, señorías; sobran familias y, por lo tanto, faltarían niños. Por lo tanto, es importante que sigamos avanzando en ello y, desde luego, volverle a... ¡Ah!, y también usted me preguntaba por la ficha, por la ficha financiera que tenía este programa: en estos momentos, está rondando los cuatro o cinco millones de euros el acogimiento familiar.
Nada más, muchas gracias.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, doña Inés Rojas, señora consejera.