Diario de Sesiones 14, de fecha 10/11/2015
Punto 28

9L/C-0224 COMPARECENCIA DEL GOBIERNO -CONSEJERO DE ECONOMÍA, INDUSTRIA, COMERCIO Y CONOCIMIENTO-, INSTADA POR EL GRUPO PARLAMENTARIO MIXTO, SOBRE LOS PLANES DE ZONAS COMERCIALES ABIERTAS.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Vamos a dar paso a la siguiente comparecencia.

Por acuerdo de la Junta de Portavoces se unifican dos comparecencias, la 3.3 y la 3.4, sobre programas de zonas comerciales abiertas.

Comienza el Grupo Nacionalista. Las comparecencias son del Grupo Nacionalista y del Grupo Mixto. Comienza la señora Socorro por tiempo de cinco minutos.

La señora BEATO CASTELLANO: Buenas tardes. Gracias, presidente.

Tradicionalmente, el comercio en Canarias se concentraba básicamente en los cascos históricos de las ciudades y de los pueblos, fundamentalmente en pequeños establecimientos, la mayoría de carácter familiar.

Algunos recordarán aquellas tiendas conocidas en Gran Canaria como "las tiendas de aceite y vinagre", en Tenerife eran "la venta", que constituían el comercio habitual de proximidad y reunían una amplia gama de productos, de géneros, desde comestibles, textil, material escolar, calderos, loza, productos de limpieza, bebidas, piezas de ferretería... Eran, además, lugares de encuentro y de convivencia para los vecinos. Y en los momentos más duros fueron la tabla de salvación para muchas familias.

La llegada de los nuevos modelos de comercio y las grandes superficies revolucionó el sector comercial en Canarias. Irrumpen en el mercado ofreciendo al consumidor diversas ventajas, ofertando una amplia gama de productos a precios competitivos y con un horario comercial flexible.

De este modo comienzan a cambiar los hábitos de los consumidores.

Se reorientan los flujos de personas y se crean nuevas áreas comerciales. Los comercios tradicionales no podían competir, y gradualmente comienza a producirse una desertización de los cascos históricos en los municipios. El comercio tradicional perdía clientela, y sufría las consecuencias de la degradación ambiental y social de estos barrios, ya que la desertización daba lugar en algunos casos al aumento de la inseguridad, con el consiguiente deterioro del entorno.

En el año 2002 un gran planificador, alguien con una visión casi profética del archipiélago, creó el Programa de actuación plurianual para la potenciación de las zonas comerciales abiertas 2002-2007, con el objetivo de potenciar el pequeño y mediano comercio, con actuaciones dirigidas a la dinamización de las zonas ubicadas en cascos históricos y en municipios turísticos, a fin de recuperar, mantener y promocionar los centros tradicionales de compra. Nace entonces el concepto de zona comercial abierta, como un conglomerado de comercios, en un espacio acotado y al aire libre, en el centro de la ciudad y barrios, donde se aplica una gestión conjunta.

El programa se ejecutó a través de convenios de colaboración con los siete cabildos insulares y los ayuntamientos, invirtiendo entonces en aquel programa más de 45 millones de euros, y apoyando el desarrollo de 72 zonas comerciales abiertas.

Posteriormente, en el año 2010, se aprueba un segundo programa plurianual, 2010-2013, que finalizará próximamente, el 31 de diciembre de este año, también con unos resultados excelentes.

Aquel visionario fue Adán Martín, entonces consejero de Economía y Hacienda y vicepresidente del Gobierno, que acertó plenamente en el diagnóstico.

Hoy por hoy los beneficios de ambos programas, financiados con los fondos europeos de desarrollo regional, Feder, son constatables. Se han transformado muchos entornos y se ha contribuido a fortalecer el comercio tradicional, amortiguando de alguna manera los efectos de la crisis en el sector. Así lo demuestran los datos sobre el crecimiento del comercio minorista en Canarias, que viene acumulando un crecimiento ininterrumpido en los últimos años.

Señor consejero, hemos solicitado esta comparecencia para que nos confirme cómo tiene previsto el Gobierno potenciar las zonas comerciales abiertas. Tenemos la idea de que la financiación ha disminuido, ha variado. Queremos que nos explique cómo piensa optimizar los recursos y en dónde va a centrar los esfuerzos en función de las demandas del sector.

Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señora Socorro.

Por el Grupo Mixto, señor Curbelo.

El señor CURBELO CURBELO: Muchas gracias, presidente.

Señor consejero de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento, voy a utilizar esta comparecencia para hacer algunas reflexiones de tipo general sobre cómo concibe Agrupación Socialista Gomera y un socialista la filosofía de Canarias en el futuro.

Es un hecho evidente que Canarias vive del sector servicios. El año pasado dio trabajo a 624 000 personas del total de 704 000 trabajadores registrados, y representa la parte más importante del PIB canario. Dentro del sector servicios, las dos actividades privadas más importantes son el turismo y el comercio. Estaremos de acuerdo.

Y pregunto: ¿quién participa en mayor medida de esos sectores? ¿Quién se beneficia más de esa riqueza? Es fácil averiguarlo, es fácil verlo.

Para saber cuáles son las islas más ricas y cuáles son las más pobres de Canarias no hay que fijarse sino en una cosa: las que tienen turismo y las que no. El crecimiento económico, el desarrollo de grandes infraestructuras y el aumento poblacional se han producido en aquellas islas donde ha existido una explosión del sector comercial y sector turístico. Lanzarote, por ejemplo, pasó de tener 64 000 habitantes en el año 1991 a 142 000 hoy. Y en el mismo periodo, Fuerteventura rompió los récord pasando de 37 000 a los 106 000 de hoy. Ese crecimiento también se nota en los aeropuertos, en el tráfico de mercancías, en el comercio, en el desarrollo urbano, en las vías de comunicación y en general en la calidad de vida en términos de renta per cápita y de servicios públicos.

Señor consejero, señorías, en esta tribuna he hablado de las necesidades de equilibrar el desarrollo en Canarias, he hablado de la defensa de las islas más desfavorecidas, más lejanas y con menos economía, y mucho me temo que me volverán a oír ustedes hablar muchas veces de este tema, porque la pobreza es recurrente y porque nuestro deber es denunciarlo mientras no existan políticas destinadas a remediarlo. El Gobierno de Canarias, señor consejero, ha desarrollado programas de fomento al comercio que se han ejecutado a lo largo de los años, pero, como es obvio, la gran parte de las actuaciones se han producido en zonas ya consolidadas y con un enorme volumen de desarrollo y de mercado en comparación con otras zonas más deprimidas. A lo largo del pasado mandato se han ejecutado proyectos por importe de 32 millones de euros en zonas comerciales abiertas de nuestras islas, y, lamentablemente, por lo que he podido averiguar, la mayor parte de estas inversiones se han producido en las dos islas más importantes y más densamente pobladas de Canarias.

Nosotros, la Agrupación Socialista, señor consejero, no logramos entender cómo se puede hacer políticas para el desarrollo que destinen la mayor parte de sus recursos a los más desarrollados; no lo entendemos. ¿No debería ser al contrario? ¿No se deberían destinar las políticas para el desarrollo a los menos desarrollados, a los que están más atrasados? Pero eso es lo que está pasando en Canarias, que se está haciendo un esfuerzo para desarrollar el comercio en aquellas zonas que más desarrolladas están, que es como echar agua en los pozos que ya están llenos y dejar secos los que están vacíos. Aproximadamente, de esos 32 millones de euros, se invirtieron en La Gomera, señor consejero, varias acciones que además dieron su fruto de forma satisfactoria, actuaciones muy importantes en el municipio de San Sebastián, la capital de la isla, y también en Valle Gran Rey, lógicamente coordinadas con el Cabildo Insular de La Gomera, que en la intervención anterior..., no está ya la vicepresidenta aquí, pero, efectivamente, los cabildos canarios van a ser parte activa en la aportación de recursos para mitigar el desempleo en nuestras islas.

A nosotros nos parece que cuando se quiere realizar un esfuerzo para luchar contra la falta de formación educativa, los mayores recursos, la inversión más importante, se destina a aquellos alumnos que más lo necesitan, porque gastarse el dinero público en los que disfrutan de mejores condiciones y mejores notas no tendría sentido. Eso es lo que se ha venido haciendo hasta ahora en nuestras islas, y nosotros esperamos sinceramente que se produzca un cambio de filosofía, que este nuevo Gobierno sea capaz de favorecer a los más desfavorecidos para intentar establecer una comunidad de islas con las mismas condiciones y la misma calidad de vida, tanto para las islas que tienen mayor densidad demográfica como para las islas de El Hierro, La Gomera, La Palma, Lanzarote y Fuerteventura, con esos habitantes que hoy disponen.

Así que consumo mi primer turno. Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Curbelo.

Por tiempo de doce minutos, el señor consejero, don Pedro Ortega.

El señor CONSEJERO DE ECONOMÍA, INDUSTRIA, COMERCIO Y CONOCIMIENTO (Ortega Rodríguez): Señora Beato, señor Curbelo, el programa de las zonas comerciales abiertas desarrollado por el Gobierno de Canarias, sin duda alguna, ha sido un acierto. Ha permitido dotar de unas necesarias infraestructuras no solo a las grandes capitales, sino a pueblos y localidades de menor población. El comercio es fuente de riqueza y empleo, además de un potente atractivo para el sector turístico. Después de años difíciles de crisis y con una débil demanda interna y descensos notables en el consumo, el comercio ha resistido el embate. Las ventas del comercio minorista al mes de septiembre subieron en Canarias un 4 % con respecto al mismo mes del año anterior, aumento que se acumula al crecimiento ininterrumpido que se registra desde el 2013. La importancia del sector en términos de empleo la evidencian las cifras: los afiliados a la Seguridad Social al cierre del tercer trimestre ascendieron a 98 000 personas, lo que supone un 14 % del total de los empleados de Canarias.

Por tanto, y en la medida en que genera actividad y crea o mantiene empleo, es indudable la relevancia que tiene este sector comercial para nuestras islas. Y para contribuir a su revitalización, el Gobierno de Canarias, junto a las corporaciones locales, viene desarrollando el programa de zonas comerciales, iniciándose en un primer periodo entre los años 2002 y 2009, al que sucedió el que ahora finaliza y que comenzó en el 2010.

En el primero de ellos, y con la cofinanciación de la Unión Europea, se invirtieron 45,6 millones de euros, de los que se beneficiaron 45 municipios canarios a través de 51 actuaciones. De esta inversión global, se destinaron partidas a 5 municipios de Lanzarote, 4 de Fuerteventura, 17 de Gran Canaria, 14 de Tenerife, 1 de La Gomera, 2 de El Hierro y 2 de La Palma.

A este periodo de programación, el de 2002-2009, le siguió el comprendido entre el 2010 y el 2013, donde se firmaron los convenios correspondientes con los cabildos para continuar con la apertura de nuevas zonas comerciales abiertas, convenios que fueron prorrogados entre el 2014 y el 2015 para poder seguir ejecutando las obras pendientes y cuya finalización está fechada, sin posibilidad de prórroga, el próximo 31 de diciembre.

Con esta ampliación de plazos y también con la cofinanciación de Europa, el presupuesto total del Gobierno de Canarias entre 2010 y 2015 para estas actuaciones -algunas de ellas aún en proceso de finalización-, asciende a 16,2 millones de euros. De ellos, en torno a 2 millones de euros corresponden a la anualidad del presente ejercicio 2015. El desglose por islas es el siguiente: Lanzarote, 1,4 millones; Fuerteventura, 1,2 millones; Gran Canaria, 4,6 millones; Tenerife, 5,3 millones; La Gomera, 735 000 euros; La Palma, 1 millón de euros; y El Hierro, 660 000. Cantidades destinadas, en este caso, a 26 municipios, con la siguiente distribución: dos en La Palma, dos en La Gomera, cinco en Tenerife, diez en Gran Canaria, tres en Lanzarote, dos en Fuerteventura y otros dos en El Hierro, es decir, en toda Canarias.

En este sentido, pongo a disposición de los diputados la relación pormenorizada de estas localidades, con las dotaciones económicas correspondientes, en las que se han ejecutado o están en proceso de hacerlo las obras con cargo a este programa, un programa que está a punto de finalizar, y cuyo grado de ejecución -aún pendiente de cerrar el plazo- estimamos que alcanzará más del 80 %.

En resumen, actuaciones que han supuesto importantes dotaciones entre el 2002 y el 2015 por parte del Gobierno de Canarias, a las que se añade la aportación de las corporaciones locales y la inversión que también ha generado, cómo no, el sector privado que está implicado en esta renovación; esfuerzo del ámbito público y del privado para disponer de unas infraestructuras que no existían, de unas zonas comerciales abiertas que activan el comercio, mantienen vivas ciudades y pueblos, y que sobre todo ofrecen puestos de trabajo, algo que demanda nuestra sociedad.

Tras estas inversiones, y aún quedando algunas infraestructuras por hacer, ahora es necesario volcar el esfuerzo en dinamizarlas, en optimizar las obras ya realizadas, de forma que logren el máximo atractivo posible para los usuarios. Así lo concluye también el análisis de los resultados del programa realizado en mayo de 2010 por una auditoría externa. En dicha auditoría, tanto los consumidores como los empresarios valoran positivamente la mejora del entorno de la zona después de la ejecución de las obras; sin embargo, consideran que este hecho no es suficiente, opinan que solo el entorno no es determinante para la obtención de unos resultados positivos, por lo que se va a requerir una mejor gestión, que aumente la calidad de los servicios. Como ejemplo exponen la apertura conjunta en festivos, la disponibilidad de aparcamientos, el suministro de catálogos promocionales o la realización de actividades lúdicas o culturales que, combinadas con la actividad comercial y de restauración, amplíen el abanico de la oferta y hagan atractivas esas zonas para los usuarios.

Y es en esta línea, sin duda alguna, donde actuará el Gobierno de Canarias el próximo año. Así lo recoge el proyecto de Ley de Presupuestos para el 2016 en las partidas referidas a esta área, con una asignación de 1,2 millones de euros. Una cantidad que se va a destinar a actuaciones que dinamicen las zonas comerciales abiertas, con el fin de optimizar las infraestructuras que ya están realizadas, una partida que no es la única destinada al sector comercial, ¡faltaría más! A través de los programas presupuestarios dirigidos a las pymes y al emprendimiento, y con un importe global de 11,6 millones de euros, las empresas del sector van a poder acceder específicamente a otras acciones públicas. Se trata de dotaciones dirigidas a introducir elementos innovadores en el comercio, para aumentar su competitividad y actividades tales como el mayor uso de las TIC, del comercio electrónico, de herramientas informáticas de gestión o de la promoción de su negocio a través de internet, elementos que coinciden con las políticas preferentes que la Comisión Europea nos exige para el periodo de programación establecido hasta el 2020, y también con las líneas de actuación que este Parlamento aprobó en la pasada legislatura, a través de la RIS3, donde se recogen políticas encaminadas a fomentar la innovación y la competitividad de nuestros sectores productivos.

Con todo, ya hemos abierto el diálogo con el sector para atender sus peticiones y necesidades, tanto en lo referente a la dinamización del comercio como a lo que se refiere al fomento de la innovación.

Por su parte, la continuación de obra nueva para el próximo ejercicio en zonas comerciales abiertas no fue incluida en la anterior legislatura en la programación de los fondos operativos que se remitió desde Canarias a la Comisión Europea; en consecuencia, para el 2016 no existen fondos comunitarios para nuevas infraestructuras, a diferencia de lo que ocurrió en años anteriores, que siempre contaron con la cofinanciación europea. Sin embargo, a pesar de esta circunstancia, y ante las demandas de varios municipios para incorporar nuevas zonas, vamos a explorar todas las posibilidades para poder contar con recursos que nos permitan reanudar esas obras lo antes posible.

Y ahora, sin fondos europeos, nos toca afrontar con recursos propios el dinamizar las zonas comerciales abiertas que tanta inversión pública han generado en estos años, en concreto, 73 millones de euros aportados por el Gobierno y por las corporaciones locales. Dinamizar estas infraestructuras y mejorar su competitividad a través de la innovación va a ser, sin duda alguna, nuestro objetivo.

Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor consejero.

Por los grupos no solicitantes, el Grupo Nueva Canarias. Señor Pedro Rodríguez, por tiempo de cuatro minutos.

El señor RODRÍGUEZ PÉREZ (don Pedro Manuel): Señor presidente, señor consejero, señorías.

Es una realidad palpable que los programas de zonas comerciales abiertas han servido para transformar toda Canarias, rehabilitando importantes cascos históricos y reinventando el comercio en nuestras ciudades. Han creado empleo no solo en el sector del comercio sino también en la construcción a través de la rehabilitación. Las enormes bondades de la zona comercial abierta y el desarrollo que genera en los espacios urbanos en los que se implementa han cambiado radicalmente el paisaje urbano de los municipios canarios y constituye un estímulo importante para el pequeño y mediano comercio de las islas.

Las consecuencias de la crisis económica se han cebado principalmente con los más débiles y, por tanto, con aquellas economías de escasa diversificación en su tejido productivo, como es el caso de nuestra comunidad autónoma.

Los poderes públicos tenemos la responsabilidad no ya de propiciar el cambio del modelo productivo sino de liderarlo en estrecha colaboración con los sectores empresariales.

Canarias, comunidad autónoma, por cierto, pionera en España, algo bueno que hizo mi compañero Román Rodríguez, y también quiero recordar a don Adán Martín, que en paz descanse, porque fue el responsable como consejero de Hacienda en ese momento con este tipo de iniciativas con los programas 2002-2009 y 2010-2014, viene apostando ininterrumpidamente por esta iniciativa, pues, representa un medio de intervención social de apoyo a las pymes; entre 2010, ya usted lo ha dicho, entre 2010 y 2014 ha supuesto más de 15 millones de euros. Y, por cierto, no sé si eran declaraciones de intenciones, pero hace apenas un año también quien era responsable en ese momento de esa dirección general decía que en los próximos años, de 2015 al 2020, podría ascender a más de 50 millones de euros. Señor Matos, lamento que se haya equivocado porque no solo no ha aumento sino que se ha eliminado dicha partida presupuestaria.

Dicho esto, y dado que nos encontramos en un momento administrativo de cierre del mencionado programa para la potenciación de las zonas comerciales abiertas, es el momento, señor consejero, de reflexionar sobre la decisión de suspender esta financiación porque en las islas hay más de 25 000 establecimientos comerciales, el 80 % se encuentra en las zonas comerciales abiertas, porque a 30 de septiembre de 2015 144 121 trabajadores del comercio canario, un sector capaz de generar empleo porque ha aumentado con respecto al año 2014 en 4316, según el tercer informe de la Cámara de Comercio de Tenerife, y porque la decisión del Gobierno de Canarias supone paralizar las actuaciones de todos los ayuntamientos y cabildos de Canarias frenando el desarrollo de los proyectos que ya están en marcha, y lo que aún es más grave, la creación de empleo y la consolidación de una línea de apoyo a nuestras pymes.

Cero euros en inversión material de su consejería en las zonas comerciales abiertas de Canarias. Elimina usted los dos millones y medio para transferir a los cabildos insulares, a su vez, esa inversión se duplica con el dinero de los cabildos y los ayuntamientos además de colaboraciones con asociaciones empresariales.

Dedica usted un millón de euros para la dinamización en estudios y trabajos técnicos, ¿qué más estudios?, llevamos trece años con este empleo, sigamos con las acciones.

Por eso, señor consejero, le pido que nos tomemos esto en serio y que, además de dinamizar, sea usted capaz de enmendar los presupuestos que todavía están en trámite, para aumentar y para poner y recuperar la línea de financiación de las zonas comerciales abiertas porque realmente el problema que ha habido es que no se ha tenido en cuenta y no se incluyó este programa de zonas comerciales abiertas en el programa operativo Feder.

Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Rodríguez.

Por el Grupo Podemos, la señora Del Río.

La señora DEL RÍO SÁNCHEZ: Señor presidente. Buenos días, compañeros y compañeras diputadas. Señor consejero.

El Programa de las zonas comerciales abiertas es una buena oportunidad para el apoyo a la pequeña y mediana empresa, algo esencial especialmente en Canarias donde más del 90 % de las empresas son pymes y la mitad de ellas son empresas sin personal asalariado. Para todas estas empresas el comercio es uno de los sectores más importantes, principalmente el comercio al por menor. Hablamos de un tejido empresarial con más de 130 000 trabajadoras y trabajadores, que ha sido erosionado en estos años de crisis donde muchas personas autónomas y propietarias de pequeñas empresas se han visto abocadas a cerrar sus negocios. Los comercios tradicionales se aglutinan en su mayor parte en las zonas céntricas y cascos históricos de las ciudades, de ahí que el programa de apoyo para la potenciación de las zonas comerciales abiertas suponga un valioso empujón para potenciar las ventajas de este comercio frente a los grandes centros comerciales. Todo ello sin olvidar las acciones paralelas que son imprescindibles: ayudas para el acceso al crédito, esencial para la financiación y supervivencia, y, por supuesto, planes de potenciación, sobre todo para fortalecer el tejido empresarial dotándole de capacidad de generar más empleo. Para ello es importante una planificación reglada de nuestras ciudades, especialmente ante el riesgo de intervenir en algunas partes de la ciudad sin una mirada social adecuada que promocione, integre y beneficie a los sectores más vulnerables que son los que suelen quedan excluidos de los elementos de valor que se generan en estas zonas.

Los puntos más débiles de este programa suelen ser la falta de mecanismos para la participación de la sociedad civil y la falta de desarrollo de instrumentos políticos que contribuyan a generar consenso. El riesgo que observamos desde Podemos es que estos programas estén diseñados pensando en intereses que en muchos casos no responden a cuestiones de interés general sino a operaciones meramente especulativas. La falta de coordinación con su correspondiente planteamiento urbanístico puede desvirtuar la función y el sentido del programa, teniendo además como consecuencia directa la expansión de la ciudad de una forma desordenada y el desplazamiento de la población original.

Por tanto, proponemos un plan de segunda generación de convergencia para la consolidación y avance de estas zonas comerciales que contenga un desarrollo normativo con las siguientes características: que incluya acciones de gestión, promoción conjunta y gerencia profesionalizada para que la autogestión y la autofinanciación sean un objetivo a corto plazo; que desarrolle programas de calidad y de creación de empleo en estas zonas; que equilibre la inversión pública y privada sin olvidar la importancia de la vinculación de los fondos Feder en estos proyectos, cosa que tenemos mal; una inversión que desarrolle nuevas centralidades en la ciudad; que revalorice y genere más espacios públicos; que rehabilite viviendas de carácter social; que impulse políticas urbanas en las que se apueste por un desarrollo social y económico; que contribuya a la cohesión social de la ciudadanía; que promocione el ocio y la cultura como servicio público; y, sobre todo, que no se convierta en un ejercicio de derroche o mera especulación al interés de determinados actores.

Entendemos que la promoción de la actividad económica es vital para la cohesión social, por tanto el Gobierno de Canarias debería de considerar estos programas como uno de los ejes principales del proyecto urbano, para ello es necesario reemplazar los viejos sistemas de funcionamiento socioeconómico por nuevas actividades más innovadoras y sostenibles, intentando que estas nuevas sean compatibles con los valores y la identidad canaria consolidada en estos espacios simbólicos sin olvidar que el aspecto cultural e identitario es: centrar para la diferenciación, y potenciar nuestra artesanía, la agricultura tradicional y ecológica, la gastronomía local, la música y la cultura en general.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señora Del Río.

Por tiempo de cuatro minutos, el Grupo Popular. Señor Jorge, desde su escaño.

El señor JORGE BLANCO (Desde su escaño): Gracias, señor presidente. Señorías. Señor consejero de Comercio.

El Gobierno de Canarias tiene una manera, señor consejero, muy original de apostar firmemente por las zonas comerciales abiertas. Me explico: en el acuerdo -que no sé si usted participó en la redacción, me parece que no, pero le recuerdo, seguro que usted lo sabe- que en la página 21, en relación con el comercio, dice así: "potenciar la continuidad del programa de zonas comerciales abiertas con el que se ha conseguido el objetivo de desarrollar este modelo en 57 municipios". Si nos vamos al proyecto de presupuestos de la comunidad autónoma en el que sí ha participado usted, señor consejero, dice en el Programa 431B, Comercio interior: "Para conseguir estos objetivos se mantienen las siguientes actuaciones: la apuesta por un nuevo Programa de Zonas Comerciales Abiertas en Canarias, concentrando los esfuerzos inversores del Gobierno de Canarias, con el de los de los Cabildos y Ayuntamientos, para priorizar los proyectos más necesarios...", etcétera, etcétera.

Por tanto, programa y acuerdo de gobierno entre Partido Socialista y Coalición Canaria, discurso de investidura del señor Clavijo el día en que lo ofreció a la Cámara y fue investido por ello; memoria presupuestaria que le acabo a usted de enseñar en relación a la prioridad, a la apuesta segura y decidida de las zonas comerciales abiertas en Canarias. Pues bien, señor consejero, la gran apuesta del Gobierno de Canarias en el año 2016 es reducir un 65 % los presupuestos en relación a estas áreas comerciales abiertas. Si en 2015 había 2 663 000 euros, en 2016 tenemos 1 200 000, o sea, 1 400 000 euros menos. Esta, señor consejero, es la originalidad del Gobierno: cuanto mayor es la apuesta del Gobierno por una cosa, menor es el presupuesto que pone en el año 2016. Pero estoy seguro que usted hará milagros, señor consejero, con esos 1 200 000 euros hará milagros en relación a las zonas comerciales abiertas.

Mire, mi grupo está de acuerdo, cree de verdad que ha sido una gran apuesta, ha sido una buena apuesta de los gobierno anteriores, pero es que en el año 2014, señor consejero, había 3 500 000, en el 2015, 2 500 000, y ahora 1 200 000 euros dedicados a este tema.

Hay un programa de actuación plurianual donde se incide en debilidades como los aparcamientos, la formación laboral y comercial de las pequeñas y medianas empresas, la unificación de horarios comerciales, la unidad de gestión de esas zonas comerciales abiertas, resistencia al cambio, que también la hay, de esos pequeños comercios, poca flexibilidad de los planes urbanísticos, de los planes de ordenación, para adaptarse a los nuevos retos comerciales existentes en esas zonas comerciales abiertas, escasa promoción...

Pero, señor consejero, en definitiva, esta es una apuesta que debe continuar. Cualquiera que vaya a la calle Triana, en Las Palmas de Gran Canaria, el primer domingo de cada mes puede comprobar el exitazo tremendo que significa apostar por las zonas comerciales abiertas, y usted ha ido, que yo le he visto.

Finalmente, este es un éxito de todos, o fue un éxito de todos. A mi grupo le gustaría que siguiera siendo, y que siguiera contando y...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Jorge.

Por tiempo de cuatro minutos, el Grupo Socialista Canario. Señor Matos.

El señor MATOS EXPÓSITO: Señorías, buenas tardes.

Resumir cuatro años de la vida de uno en cuatro minutos es difícil. Lo digo porque el Programa de zonas comerciales abiertas desde el año 2011 hasta hace muy poco me tocó gestionarlo en mi anterior responsabilidad de gobierno, y, por lo tanto, resulta complicado resumir cuatro años en cuatro minutos.

Pero déjenme decirles algunas cuestiones rápidas y telegráficas casi, a ver si puedo condensar todo lo que me gustaría decirles en el día de hoy.

Miren, el Programa de zonas comerciales abiertas no es un desconocido en esta Cámara. Lo sabe don Mario Cabrera, con el que tuve que trabajar, por ejemplo, en la zona comercial abierta de Pájara. Lo sabe don Héctor Gómez, que ahora no está, con quien trabajamos las zonas comerciales de Guía. Lo sabe María Dolores Corujo, alcaldesa de San Bartolomé, donde sacamos adelante la zona comercial abierta de Playa Honda. Lo sabe don Luis Campos, cuando sacamos adelante la zona comercial abierta de Santa Lucía.

Miren, el origen de esto no podemos perderlo de vista. El origen del Programa de zonas comerciales abiertas está cuando a mitad de los años noventa desembarcan en Canarias los grandes establecimientos comerciales, se crean operaciones especulativas en los entornos de las ciudades, sin orden ni concierto, y, después, con dinero público hubo que adaptar infraestructuras, con millones de euros de dinero público, para poder adaptar el colapso, por ejemplo, de transporte público de servicios que generaba el aterrizaje de esas grandes superficies.

Pues miren, la situación hoy no es mejor, es peor. Porque no nos olvidemos que la legislación actual por trasposición de la Directiva de servicios, la famosa Directiva Bolkestein, ha eliminado cualquier limitación a la implantación de grandes superficies comerciales en Canarias, excepto con algunas escusas de tipo territorial que tenemos que seguir trabajando en ese sentido.

Por tanto, si antes tenía sentido el mantenimiento del programa de zonas comerciales abiertas, mucho más en este momento; mucho más, además, cuando hay un intento por parte del Gobierno del Partido Popular de liberalizar el sector comercial sin contar con los interlocutores del sector, favoreciendo a una parte sola y exclusivamente de un formato comercial específico. Y esta es una realidad. Lo hemos vivido en los últimos años y sigue siendo así. Por tanto, es imprescindible que el Gobierno mantenga el Programa de zonas comerciales abiertas.

Miren, no hay nada que influya más en una ciudad, en un municipio, en una forma de entender la vida, que cómo entendemos el comercio. No hay nada que influya más en el diseño de una ciudad que un gran establecimiento comercial, más que 1000 planes generales de ordenación urbana. Define un modelo social. Del pequeño y mediano empleo, el último en marcharse es el propietario del establecimiento, el despido casi no se ha producido estos años, ha sido un sector, además, supergeneroso desde el punto de vista social, ha aguantado en condiciones durísimas el empleo en Canarias. No se merece que en estos momentos le demos la espalda, no se lo merece, porque además vendría en contra de nuestros propios intereses como sociedad.

Este programa, además, es un programa superrentable para las administraciones públicas. Primero, porque mejora el consumo, por tanto hay una mejora en la recaudación evidente, y Canarias lleva del orden de casi dieciocho meses consecutivos liderando el consumo en comercio minorista a nivel nacional, pero, además, cada céntimo de euro, cada euro que se invierte de dinero público en rehabilitar un espacio urbano se multiplica por tres en dinero privado. Esto es una realidad.

Y termino, esta es una cuestión, la tengo que citar rápidamente, este programa, que se consensuó con los cabildos. También trabajé con don Casimiro Curbelo, cuando era presidente del cabildo aunque en aquel momento en un partido estatalista, pero trabajé con don Casimiro Curbelo y sacamos adelante las zonas comerciales de las Vueltas y Ruiz de Padrón. Y los cabildos aportaron la financiación que quisieron, porque tenían que aportar el 50 % de la financiación e hicimos el programa conforme ellos querían para poder...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Muchas gracias, señor Matos.

El señor MATOS EXPÓSITO: ...vuelva el Feder a las zonas comerciales abiertas.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Matos.

Por tiempo de once minutos, los grupos proponentes. Por el Grupo Nacionalista Canario, señora Socorro.

La señora BEATO CASTELLANO: Gracias, presidente.

Nos complace escuchar que todos los grupos de alguna manera se arrogan el éxito de estas políticas. Y nos complace escuchar que todos los grupos hacen una valoración positiva de las zonas comerciales abiertas. No en vano son un referente nacional que han reconocido a nivel estatal con el Premio Nacional de Comercio a zonas como la de Triana en Gran Canaria o la de La Laguna en Tenerife.

El comercio representa el 12 % del PIB canario y un 20 % del empleo; por tanto, una mejora en el sector comercial tiene un efecto directo y multiplicador sobre el conjunto de la economía, porque actúa como motor para generar y mantener el empleo en otros sectores. Hasta ahora contábamos con una tasa de cofinanciación del 75 % del Fondo Europeo de Desarrollo Regional, el Feder, a través del programa operativo Feder de Canarias 2007-2013, cuyo periodo de elegibilidad finaliza el 31 de diciembre de este año. Por tanto, para el próximo año, como decía el consejero, los recursos los aporta exclusivamente el Gobierno de Canarias.

Señorías, sin duda los recursos podrían mejorar, y este es un claro ejemplo de cómo la Ley de Estabilidad Presupuestaria, con la limitación de la regla de gasto, nos impide aplicar más recursos a políticas que generan empleo productivo, y que son, además, tractores en el comercio: la construcción, el turismo, la hostelería, restaurantes, ocio, bares, cafeterías, la cultura. Somos una comunidad autónoma que está saneada, que ha cumplido, que ha pagado su deuda. Nuestra economía crece, y el Estado nos impide revertir ese crecimiento con inversión productiva en la sociedad para crear fundamentalmente empleo. Canarias está sometida injustamente a un corralito por parte del Gobierno de España.

Desde el Grupo Nacionalista Canario vamos a luchar para que el próximo Gobierno de España cambie esta ley tan arbitraria con Canarias. Hasta entonces, señor consejero, los recursos son los que son y, como usted señalaba, es preciso optimizar al máximo estos recursos incorporando los de áreas como promoción económica o innovación tecnológica. Si bien lo más impactante del programa es lo que se ve a simple vista, es decir, la transformación de las áreas urbanas, con intervenciones en el entorno a través de actuaciones de peatonalización, de acerado, de rehabilitación de fachadas, jardines, alumbrado, zonas de aparcamiento, accesibilidad o renovación del mobiliario urbano, también hay otras cuestiones que no se ven, pero que son también importantes, igualmente necesarias. Por eso valoramos positivamente la intención del Gobierno de centrar los esfuerzos en esta nueva etapa en la dinamización de las zonas existentes y en el apoyo a la innovación de nuestras pymes.

Señorías, la política no desaparece, la política se reorienta, y los recursos se ordenan en función de la disponibilidad. Medidas como el fomento al asociacionismo, programas de formación e innovación orientados a la especialización de la oferta y la mejora de la productividad, así como acciones promocionales y campañas, pueden contribuir a esa dinamización y al impulso de esta zona.

Señor consejero, estamos convencidos de que la voluntad del Gobierno es que ninguna isla quede detrás, y propiciar un equilibrio de las zonas rurales y las zonas urbanas, promocionando un nivel de servicios mínimos igual a todos los ciudadanos, cualquiera que sea su lugar en el territorio. Y dentro de las ciudades, también en los barrios, para mantener el desarrollo comercial potenciando la creación de pequeñas zonas comerciales abiertas, también, en nuestros barrios, porque cada territorio tiene su singularidad y sus necesidades concretas.

Estamos plenamente de acuerdo con el señor Curbelo: los recursos han de ir donde están las necesidades, el principio de equidad y el principio de proporcionalidad, porque es de justicia tratar igual a los iguales y desigual a los desiguales. Especialmente en La Gomera y en todas las islas no capitalinas, los esfuerzos deben ser mayores. En La Gomera, las zonas comerciales prioritarias son las de San Sebastián y Valle Gran Rey, en Vueltas, que son las únicas, hasta el momento, que tienen un plan director aprobado. Pero no hay que olvidarse de que también hay que apoyar el desarrollo de Valle Gran Rey Playa, Playa Santiago y Vallehermoso, que están aún poco consolidadas y necesitan un impulso. Además, el caso de Agulo y Hermigua, en este caso las zonas no reúnen aún, en sentido estricto, las características de una zona comercial abierta, tal como está definida en los programas, no obstante, tienen una gran potencialidad para ser un atractivo turístico rural, por lo que hay que ir pensando también, señor consejero, en cómo potenciarla para dinamizar ambos municipios.

Si en los años 90 la amenaza fueron las grandes superficies, que cambiaron la estructura comercial en Canarias, el comercio actual se sigue enfrentando a nuevos desafíos, con un consumidor cada vez más exigente, y ahora hay que pensar tanto en la captación y la fidelización del cliente físico como del cliente online. Por eso resulta muy acertado que el Gobierno apoye dotarles de instrumentos para introducir la innovación a través de las tecnologías de la información y el comercio electrónico.

En fin, señorías, muchos son los retos y pocos los recursos. Todos le dicen, señor consejero, que hay que incrementar los recursos. Hay un problema: el techo de gasto, no podemos saltárnoslo. Nadie le dice, nadie le sugiere, nadie le plantea cómo podría hacerlo. Desde el Grupo Nacionalista Canario queremos lanzarle una idea, queremos que estudie si cree que sería posible explorar la posibilidad de obtener fondos europeos a través de un enfoque orientado a la definición de estrategias integradas de desarrollos urbanos sostenibles, esta es la línea sostenible que está Europa apoyando, habida cuenta que el artículo 7 del Reglamento 1301/2013, del Parlamento Europeo y del Consejo, sobre el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, Feder, señala que este apoyará el desarrollo urbano sostenible a través de estrategias que establezcan medidas integradas para hacer frente a los retos económicos, ambientales, climáticos, demográficos y sociales que afectan a las zonas urbanas, pero también teniendo en cuenta al mismo tiempo la necesidad de promover los vínculos entre el ámbito rural y el ámbito urbano.

Estamos convencidos de que hay un escenario que invita a la esperanza, confiamos plenamente en que los esfuerzos del Gobierno para captar financiación y para optimizar al máximo los recursos existentes darán sus frutos para seguir recuperando y rehabilitando zonas degradadas y obsoletas, mejorando el paisaje urbano y nuestros entornos rurales.

Desde el Grupo Nacionalista Canario queremos seguir apostando por unos pueblos y ciudades más sostenibles y más vivos que no languidezcan a partir de las tres de la tarde, cuando desaparece la actividad administrativa. Unas ciudades y pueblos donde ciudadanos y turistas disfruten de un ambiente agradable, seguro y accesible, con una oferta comercial que se complemente con la restauración, las actividades de ocio, las actividades culturales, que beneficien, que impulsen, que mejoren la creación de empleo y el impulso de nuestra economía en todas las islas y en todos los territorios.

Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señora Socorro.

Por tiempo de once minutos, el portavoz del Grupo Mixto, el señor Curbelo.

El señor CURBELO CURBELO: Señor presidente, señorías.

Quiero, en primer lugar, transmitirle a mi estimado amigo Gustavo Matos que sería cuando usted era director general y yo era presidente del cabildo, porque no es director general y yo sigo siendo presidente del cabildo. Me refería a usted, dicho (risas en la sala), dicho con todo el cariño, ¿no?

Bien. Yo les digo con sinceridad que hace muchos años, cuando decidí entrar en política, lo hice básicamente por dos razones: primero, porque quería luchar por un mundo mejor y más justo; y, segundo, porque quería hacerlo empezando por mi tierra, por Canarias y por la isla a la que tanto quiero, la isla de La Gomera. Desde entonces hasta hoy han pasado muchos años, pero no ha habido un momento en que haya dejado de ser socialista, porque para muchas personas ser socialista es precisamente estar en la lucha permanente contra las injusticias y contra la desigualdad.

Digo todo esto, señorías, señor consejero de Economía, porque en este Parlamento de Canarias se va a escuchar mucho hablar de desigualdades y de injusticias a lo largo de los próximos cuatro años, porque aquí están chocando dos mundos, aquí han entrado en colisión los dos grandes bloques en que está dividida la opinión pública canaria desde la creación de la autonomía: uno, el de los que creen que la acción de gobernar consiste en aplicar las matemáticas a la política y a la gestión pública, esos que cuando hablan del sistema electoral canario dicen "un hombre, un voto", esos que cuando hablan del reparto de la riqueza dicen que hay que dividir el dinero que se reparte entre el número de pobladores de Canarias para que a cada ciudadano le toque lo mismo. Yo he dicho aquí, y vuelvo a decir ahora, que la política no son matemáticas, y que si los matemáticos son los que van a gobernar Canarias, que vayan a las islas menos pobladas, a La Gomera, a El Hierro, y nos traigan a todos los canarios que vivimos allí, y nos traigan como quieran. Cierren ustedes las islas periféricas y traigan a la gente a los cinturones de los barrios de las áreas metropolitanas, porque eso va a ser mejor que seguir perpetuando una política que favorece la desigualdad y que aumenta la brecha de desarrollo entre los que menos tienen y los que mejor viven.

Hemos hablado antes, y se ha hablado en este Parlamento, del desarrollo del sector comercial en Canarias, y en el desarrollo del comercio intervienen muchos factores: están los transportes, que favorecen el movimiento de viajeros y mercancías, y que en el caso de las islas más periféricas de Canarias supone un hándicap de tiempo y sobrecostos; están las infraestructuras, los centros logísticos de estocaje, que forman otro bloque de limitaciones para las actividades comerciales en los pequeños mercados insulares; hay factores de orden natural, que condicionan la actividad comercial, y cuyo cambio no está en manos de ningún gobierno, la lejanía, la fragmentación, la inexistencia de grandes mercados, todo eso que afecta a las islas periféricas no se puede cambiar, lo que cambia la acción política, la voluntad del ser humano son los sobrecostos derivados de estas limitaciones, lo que hace el político que cree en la justicia social es tratar desigualmente a los desiguales y ayudar a los más desfavorecidos, aunque eso no entre dentro de la tabla de multiplicar insularista.

Un plan para el estímulo del comercio en las islas periféricas debe apostar por invertir en la mejora de sus zonas comerciales, pero debe conectarse, señor consejero, de forma trasversal con la mejora de las comunicaciones que permita aumentar el mercado con la presencia de visitantes. Y debe estar también en sintonía con el desarrollo de proyectos estratégicos en un mercado turístico que esté en la búsqueda de alternativas a los grandes mercados tradicionales de Canarias. Son medidas a medio y a largo plazo, pero que se tienen que construir poco a poco, piedra a piedra (se reincorpora a su lugar en la Mesa la señora presidenta).

El presidente del Gobierno de Canarias aceptó hace unas semanas repartir los fondos del ITE a partes iguales entre las dos grandes islas y las islas menores, ustedes son todos testigos de la que se lió, yo felicité al señor presidente del Gobierno, al señor Clavijo, por haber tenido la sensibilidad y la valentía de aceptarlo y mantenerlo y le felicitaré aún más a usted y a la señora Patricia Hernández, por nombrar la otra parte que da estabilidad al Gobierno, si son capaces de defenderlo hasta el final porque cuando se hace política por los más desfavorecidos, cuando se hace política sin la tabla de multiplicar insularista en las manos, entonces se paga un precio porque se mueven grandes fuerzas que no quieren que se cambien las reglas de juego, que quieren que los recursos públicos se sigan distribuyendo por la regla numérica de los habitantes en vez de por el criterio social de necesidades que emane de cualquier isla.

Por un fondo de 160 millones de euros solamente se sacó la tabla de multiplicar insularista y casi dividir el total del dinero por el total de ciudadanos porque algunos que hablan del centralismo de Madrid con Canarias son igual de centralistas cuando se habla de Canarias en Canarias de las islas capitalinas y las periféricas. Desgraciadamente esto es así y todos lo sabemos.

El reparto de los fondos destinados a zonas comerciales abiertas es un hijo legítimo de los criterios que siempre se ha seguido para gobernar Canarias, más para los que más tienen que es como el mal gerente de un hospital que manda el mismo presupuesto al área de enfermos agudos porque solo hay 10 pacientes que al área de catarros porque hay 100 enfermos. Gran Canaria y Tenerife tienen los grandes puertos y aeropuertos de Canarias, tienen 1 800 000 habitantes y de los 13 000 000 de turistas reciben 10 000 000, ¿de verdad creen ustedes que las políticas de estímulo de las zonas comerciales abiertas tienen que concentrarse en quienes ya disfrutan de un extraordinario desarrollo? Por supuesto que hay que invertir y mejorar en Gran Canaria, en Tenerife y en todas las islas, por supuesto que hay ser competitivos, tenemos que renovar nuestras ofertas comerciales y turísticas, pero eso no nos debe hacer olvidar que no es lo mismo el esfuerzo que debemos hacer para mantener nuestro éxito que el que nos exige solucionar nuestro fracaso. No es lo mismo impulsar lo que ya funciona que crear donde no existe.

Es verdad, señora portavoz del Grupo Parlamentario Nacionalista, existe un plan director para la isla de La Gomera que se ha confeccionado desde el diálogo entre el Gobierno, el cabildo y los ayuntamientos afectados, hay un plan director de futuro que prevé una zona comercial abierta en cada uno de los municipios, esperemos que la dinámica de la tramitación del presupuesto permita alguna enmienda para incorporar esos 1,2 millones de euros porque, desde luego, no le pidan peras al olmo al señor consejero, hay que darle recursos si queremos que se cumplan sus predicciones.

Yo he venido a esta Cámara a defender, como he dicho, a mi isla de La Gomera pero también a algo muy importante que es defender la idea de Canarias, otra idea que es socialista y que yo entiendo que a muchas de sus señorías no les guste, yo lo entiendo, pero quiero defender una comunidad donde los que menos tienen reciban más y los que más tienen aporten más, quiero defender una Canarias donde algunas islas no se vean despobladas porque la gente se termina marchando a donde están los grandes hospitales, los grandes puertos, los grandes aeropuertos, las grandes empresas. La geografía física de Canarias no se puede cambiar pero sí la humana.

Quiero proponerle, señor consejero de Economía, que tenga usted el mismo valor que el presidente del Gobierno, que se atreva a que los planes de inversión en zonas comerciales abiertas para esta legislatura se cuele un poco de sentido de justicia distributiva y que junto a la fría máquina que mide a los canarios como un número ponga usted el corazón, no le haga caso a los que manejan la calculadora insularista, invierta usted más en donde menos hay, siembre más en donde menos frutos se recogen y hoy peor vive la gente. Y las islas periféricas necesitan irse incorporando poco a poco al mercado de éxito de Canarias, que es la venta de los servicios turísticos y comerciales, pero eso va a estar seriamente limitado por el transporte, por la lejanía y por los sobrecostes derivados de esta situación. Debiera existir un plan integral que recogiera una estrategia de crecimiento y de riqueza para estas islas singulares, pero mientras tanto está en manos de las distintas consejerías que exista una política con mayúsculas que discrimine favorablemente a los que peor condiciones padecen en términos de infraestructuras comerciales y de tamaño de los mercados.

Espero de usted, señor consejero, lo mejor y lo más justo, que a veces es enemigo de lo cómodo, posiblemente tenga usted voces que le critiquen porque apoyara a los más débiles, pero le aseguro que el egoísmo no tiene fronteras.

Sé que tiene un reto complicado porque no dispone usted de fondos comunitarios para hacer un plan comercial de zonas abiertas como antes, tiene usted algunos recursos en el presupuesto, que hayan algunas enmiendas y que esta filosofía impere en su área, que, lógicamente, la intentaré repetir reiteradamente para que sea una filosofía que impregne todas las áreas del Gobierno para buscar en Canarias una sociedad más justa.

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señor Curbelo.

Señor consejero.

El señor CONSEJERO DE ECONOMÍA, INDUSTRIA, COMERCIO Y CONOCIMIENTO (Ortega Rodríguez): Señorías, estamos todos de acuerdo en que las zonas comerciales abiertas han sido buenas para Canarias, pero vivir del recuerdo no es lo más adecuado; ante los problemas, soluciones.

En este momento la foto es: no hay programa Feder para zonas comerciales abiertas, y no hay más. A partir de ahí lo que tenemos que hacer es que con los recursos que tengamos intentar que lo que hayamos hecho en zonas comerciales abiertas vaya hacia delante.

Lo que nos hemos planteado es: no tenemos recursos suficientes pero vamos a poner más dinero desde el Gobierno de Canarias. Dos millones y medio con un 85 de financiación, evidentemente son menores recursos que 1 000 000 de euros o 1 200 000 del Gobierno de Canarias, sacados y puestos a disposición.

Hay una segunda cosa que queremos hacer: ser eficientes en la gestión de esos euros. Y yo para eso, señor Curbelo, tengo que decir que no se trata de dar más o comparar más, se trata de ser justo y de intentar que todo aquel que lo haga bien tenga más y que todos vayan adelante.

Yo también vine aquí, me incorporé al Gobierno de Canarias porque quiero defender a Canarias, y Canarias en todas sus islas, en las ocho. Y entiendo una Canarias unida, y entiendo que el transporte es un problema, y entiendo que las islas pequeñas, o como se les llama, que siempre lo he dicho, las islas no capitalinas, tienen un problema de población, tienen un problema de acceso y necesitan una mayor compensación. Lo he defendido en la negociación del REF económico, pero hoy estoy hablando de zonas comerciales abiertas, y, señor Curbelo, voy a decirle una cosa, políticamente igual no es correcto pero lo digo, es lo que siento: con una zona comercial abierta pequeña, cualquier pueblo en cualquier isla, tiene el mismo problema, pero es verdad que en una isla de las que llaman mayores tienen mayores problemas porque se enfrenta a los centros comerciales, y eso hace que se queden vacíos los pueblos y que la gente vaya a los centros comerciales, y que los negocios que se montan en las zonas comerciales, porque tienen centros comerciales grandes cercanos, desaparezcan. Es triste ver que hay pueblos en los que a las zonas comerciales la gente no va, se convierten en bares, en terrazas,... ¡Eso es triste!

Es por eso que ante el problema, solución. ¿Qué hemos pensado? Tenemos dinero -1 200 000 euros-, vamos a pedirle a esas zonas comerciales abiertas, a esos 81 proyectos que se han hecho, a esos 73 millones de euros que se han gastado, que sean rentables, que hagan que la gente vaya allí, que no que se queden fuera, que la gente vaya, que la gente utilice esos espacios que ya hemos trabajado. Esa es una primera actuación que vamos a hacer.

Vamos a conseguir que nos impliquemos todos en que vaya la gente a las zonas comerciales. No se trata de tener zonas comerciales bonitas, espacios bonitos, se trata de tener espacios vivos, que los pueblos estén llenos y que la gente compre, que haya negocio, que un pequeño emprendedor pueda hacerlo, al igual que ocurre en las capitales. Pero es verdad que un pueblo de Gran Canaria o un pueblo de Tenerife tiene problemas similares a los que tiene Valle Gran Rey o a los que tiene San Sebastián o a los que tiene cualquier pueblo de las islas; y es verdad que los centros comerciales y que el nuevo modelo de distribución nos está matando los centros de los pueblos. Y yo creo que ahí hay que trabajar, hay que mantenerlos vivos, y para eso dinamización, y la dinamización es lo que vamos a hacer, y ahí, como decía usted, quien más lo necesite, quien menos tenga, más recursos va a tener. Lo digo porque evidentemente lo que tenemos es un plan de inversión de 1 200 000 euros -me gustaría tener más, me gustaría poder hacer más actividades, pero, bueno, es lo que tenemos- y con eso vamos a trabajar.

Es por ello que decimos que nosotros no vamos a abandonar las zonas comerciales abiertas, no es nuestra intención abandonarlas, nuestra intención es otra, es dinamizarlas.

Pero es que además, antes nos decía el señor Jorge, me decía, que nos enfrentamos a empresarios en zonas que son reacios al cambio. Nosotros vamos a poner 11,6 millones de euros, vamos a poner todos los planes en las pymes para que puedan modernizarse, para que tengan mejor uso de las nuevas tecnologías, para que tengan mejores programas de gestión, y lo queremos hacer en toda Canarias y lo queremos hacer con igualdad y con justicia.

Yo no sé si vamos a hacer un plan de segunda generación o un...Vamos a dinamizar, vamos a hacer las cosas lo mejor que... Vamos a que tengamos pueblos vivos, a que tengamos centros comerciales vivos.

Y, por supuesto, tenemos un problema: no tenemos fondos operativos disponibles para esto. Es, por tanto, que a lo que vamos es a explorar las posibilidades para reprogramar, a ver de qué forma se pueden reprogramar estos fondos. Vamos a intentar, vamos a intentar, que en el futuro, en estos años, en los tres que queden después, podamos recuperar y podamos volver a actuar tanto con las zonas comerciales abiertas en las que ya hemos gastado, en las que ya hemos invertido, en las que ya están acabadas, como en otras que hay. Sabemos que hay demanda de que haya actuaciones en zonas comerciales abiertas, pero, créanme, con lo que tenemos y con las encuestas que tenemos, yo creo que sería una buena acción invertir en generar actividades, en hacer que sean zonas vivas, que sean atractivas y que puedan competir con otras zonas; que las personas quieran salir a utilizarlas y que las disfruten.

Me gustaría decir más y me gustaría decir que tenemos más millones y que con más millones haremos más cosas, pero es lo que tenemos en estos momentos. Y yo les digo una cosa, vamos a intentar ser lo más eficientes posible y que cada euro se gaste de la mejor forma posible, para que haya una acción concreta que haga que vayan consumidores a usar, a disfrutar de las zonas comerciales abiertas, que hoy hemos creado con 73 millones de euros.

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señor consejero.

Hemos acabado el debate de esta comparecencia.