Diario de Sesiones 7, de fecha 10/9/2015
Punto 4

9L/C-0007 COMPARECENCIA DEL GOBIERNO -CONSEJERO DE SANIDAD-, INSTADA POR EL GRUPO PARLAMENTARIO POPULAR, SOBRE PACTO POR LA SANIDAD.

La señora PRESIDENTA: Continuamos con la siguiente comparecencia, solicitada por el Grupo Popular, al consejero de Sanidad, sobre el Pacto por la Sanidad.

Tiene la palabra el señor Guillermo Díaz Guerra.

El señor DÍAZ GUERRA: Gracias, presidenta. Miembros del Gobierno, señorías, buenos días.

Hoy vamos a hablar de sanidad, un tema del que se habla muchísimo en la calle. Todos tenemos experiencia en sanidad, todos tenemos historias que nos cuentan, historias propias, historias buenas, historias malas. Es muy fácil hablar de sanidad y a todos nos gusta porque es un indicador de la calidad de vida. Por lo tanto, debemos preocuparnos y trasladar a este Parlamento lo que afecta a la calidad de vida de los canarios.

Nosotros queremos hablar en esta legislatura de las personas; queremos hablar, señor consejero, de los enfermos, de los sanos, de los profesionales, de los que trabajan en la sanidad y de los que quieren trabajar en la sanidad, y también de la familia de todos ellos.

Yo no sé si ustedes, todos los que estamos aquí, son usuarios del 38/ o son 35/, pero la mayor parte de la población canaria sí que lo es. La mayor parte de la población canaria cuando enferma pide cita en un centro de salud, acude a su médico de cabecera, le remite al especialista, le pide una prueba diagnóstica, le aplica un tratamiento, a lo mejor una cirugía, y, en medio de todo eso, hay tiempo de espera, hay citas, hay desplazamientos, hay molestias y a veces hay dolores. Por lo tanto, es muy importante que hablemos de cómo perciben y cómo reciben la sanidad los canarios. Y la verdad es que la reciben muy mal. La cosa está muy mal, mejor que hace veinte años, por supuesto, y mejor que hace diez, pero tengo la impresión de que en Canarias la sanidad no ha evolucionado como en el resto de las comunidades autónomas y como en el resto de España, y no es solo una impresión, usted también lo sabe, y lo leíamos ayer en los periódicos, que la cosa va muy mal. Ya no somos los penúltimos, como hasta hace poco, ya la sanidad canaria es la última de España, la última. Lo dicen los usuarios y lo dice usted. Hace muy poco hacía públicos los datos objetivos de cómo está la sanidad canaria. Hablamos de las listas de espera, hablamos de los gastos, hablamos de unas cifras muy malas.

Usted decía ayer que lo que le interesa es cómo está la cosa ahora, cómo está la cosa ahora, y a nosotros, ¿sabe lo que nos interesa? Lo que va a hacer y cómo va a estar en el futuro. Y los canarios queremos saber lo que va a hacer usted y lo que vamos a hacer en esta Cámara para mejorar la sanidad de todos los canarios. Los datos que usted daba ayer eran muy malos, malísimos. Son datos que nos dicen que... bueno, lo decía usted, realmente, que la sanidad canaria está tan deteriorada que sería un tremendo ejercicio dialéctico tratar de demostrar lo contrario. Lo decía usted aquí aproximadamente en febrero. Los datos que usted trajo, con retraso por cierto, los datos en finales de junio los ha hecho usted públicos en agosto, no sé si es que quería quitarle el maquillaje que nos dio el anterior Gobierno o lo quiso maquillar para que pareciera que estaba un poquito peor. Lo cierto es que los datos nos dicen que Canarias va muy mal, la sanidad está muy mal, y en sus manos, en las del Gobierno y en las de todos nosotros está frenar e invertir esa tendencia.

Hace unos meses había 3500 personas, por ponerle un ejemplo, en la lista de espera de alergología. Hoy son 5000. No sé qué tenemos que decirle a quien esté en el puesto 4999. La lista de obstetricia se ha multiplicado por cuatro. La de pediatría ha pasado de 850 a 1400 niños. ¿Qué hace el padre del niño 1399? ¿Qué tiene que hacer la gente? ¿Qué tienen que hacer aquellos que tienen el 38/y el 35/? En cirugía teníamos 25000. Ya no son 25000, ahora son 30000 los que están esperando por una operación. ¿Y una prueba diagnóstica? Hay 2000 mujeres esperando por una mamografía, hay 3776 personas esperando por un TAC y casi 20000 canarios esperando por una ecografía. Usted dígame si esto es normal, que alguien me explique si esto es normal, porque yo creo que todos percibimos que esto es absolutamente anormal.

Todo el mundo sabe, y defenderemos lógicamente los profesionales de la sanidad, que el problema es el acceso a los servicios y no la calidad asistencial en sí. Decía alguien que el problema es que no se han cumplido los pactos de Coalición Canaria y el PSOE, y que con el PSOE en el Gobierno esto no pasaría. Usted es del PSOE, esas palabras son de la actual vicepresidenta, su líder político, su líder político, usted es el Partido Socialista, demuéstrenos y cuente con nosotros para ver qué es lo que sabe hacer y cuente con el apoyo del Partido Popular siempre que sus propuestas sean positivas.

Gracias.

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señor Díaz.

En nombre del Gobierno, el señor consejero de Sanidad, por diez minutos.

El señor CONSEJERO DE SANIDAD (Morera Molina): Buenos días, señora presidenta.

Bueno, pues comienzo mis intervenciones en el estrado en esta legislatura como consejero de Sanidad de la mejor manera que se me hubiera ocurrido, que es hablando de acuerdos (Abandona su lugar en la Mesa la señora presidenta. Ocupa la Presidencia el señor vicepresidente primero, De la Hoz Fernández). Tendiendo la mano para que entre todos hagamos de la sanidad pública canaria la que queremos: un servicio público de calidad, a la altura de lo que nuestros ciudadanos demandan. Estoy convencido de que las soluciones a los múltiples problemas que tiene nuestro sistema sanitario -que, efectivamente, señor Díaz Guerra, los tiene- serán más fácilmente reconocibles y abordables si todos los que estamos aquí ponemos de nuestra parte.

Yo estoy dispuesto a compartir información, a escuchar alternativas y a acordar sobre las materias que sea necesario. La sanidad pública canaria ha sufrido los recortes presupuestarios causados por las políticas de austeridad como pocas áreas. Pese al esfuerzo realizado en el anterior mandato por el Gobierno de Canarias para mantener los servicios públicos esenciales, lo cierto es que en los últimos seis años el presupuesto del Servicio Canario de la Salud ha disminuido unos 375 millones de euros, si bien es cierto que el porcentaje relativo de la sanidad sobre el presupuesto global de nuestra comunidad se ha mantenido o incluso ha aumentado. Esto es una realidad y, ante esta realidad, ¿cabe algún pacto, pregunto?

A nadie se le escapa que hay problemas que amenazan con convertirse en estructurales si no se actúa sobre ellos de una forma urgente y decidida, pero para eso es necesario el máximo acuerdo. No solo entre las formaciones políticas que hoy nos encontramos en este Parlamento, sino también con los agentes sociales y con los trabajadores de la sanidad pública, que han tenido y tienen un comportamiento ejemplar y que en muchas ocasiones han sido los verdaderos artífices de que el sistema no haya quebrado. Es necesario, más que nunca, un pacto por la sanidad que ponga de relieve que en Canarias las necesidades de los ciudadanos y el bienestar social están por encima de los diferentes posicionamientos políticos.

Durante los últimos cuatro años, pertenecí a esta Cámara, como ustedes saben, y fui portavoz en materia de sanidad del Partido Socialista. Este hecho me faculta para asegurar que es más lo que nos une que lo que nos separa, sin duda, que las diferencias de criterio se pueden limar y se pueden llegar a acuerdos y que se puede desarrollar una política sanitaria que dé al paciente el lugar que le corresponde dentro del sistema sanitario, que no es otro que el de ser el centro de todas y cada una de las medidas que se tomen.

Garantizar un sistema universal y de calidad es el punto de partida en el que estoy seguro de que todos estaremos de acuerdo, pero hay otros muchos puntos en los que habrá que llegar a acuerdos. Los recursos económicos y humanos deben ir a más y hay que ampliarlos cuanto antes. Estoy convencido de que también habrá consenso, pero nosotros solos no podemos, tenemos que apoyarnos en el Gobierno del Estado por la necesidad de financiación. Como comunidad autónoma que somos, tenemos un margen de maniobra limitado; es cierto que la financiación no lo es todo, y que una buena gestión es crucial, no cabe duda, pero, llegados a un punto, por muy buena gestión que se haga, no se puede crecer sin financiación. Nuestra comunidad es muy dependiente para su financiación de los presupuestos generales del Estado, como ha referido ahora mismo la consejera de Hacienda. Por ello, un motivo para el acuerdo debería ser la exigencia de que aquí, igual que allí, reclamemos una adecuada financiación para los servicios públicos.

A la ciudadanía le preocupa la sanidad cada vez más y esa preocupación no es ajena a este consejero. Somos conscientes de que la impresión manifestada por los ciudadanos de esta comunidad en varias encuestas es de insatisfacción, usted lo ha referido ahora mismo. Por el contrario, las encuestas que realizamos a los usuarios atendidos recientemente muestran una amplia satisfacción. Ello indica algo que ya suponíamos, y es que el problema que tiene nuestro sistema es sobre todo un problema de accesibilidad. En este sentido, las urgencias y las listas de espera marcan dos puntos negros de nuestra organización y no cabe esconderlos. Por ello, nos hemos comprometido a elaborar un plan de urgencias y lo haremos con gente de la casa, contando con los trabajadores. Y una vez que tengamos el borrador, lo enviaremos a los partidos políticos, por supuesto, a la mesa sectorial y a otros agentes sociales con el ánimo de obtener el mayor acuerdo posible. Nuestro compromiso es que esté listo ese plan en el mes de junio que viene, y determinará la reorganización y la correcta dotación de los servicios.

Las listas de espera son otra cuestión con mucho calado en la población, ya lo ha citado usted, es cierto. Continuamente se han utilizado como arma arrojadiza entre la Oposición y el Gobierno sin el más mínimo pudor, si antes se fue Oposición y luego Gobierno, y viceversa. Esto lo hemos vivido recientemente. Este sí que es un punto que merecería la pena abordar en una mesa de acuerdo; me parece que sería un punto muy interesante, en que nos pusiéramos de acuerdo en cómo abordar las listas de espera. También estaremos de acuerdo en que ha llegado un momento de dar el impulso definitivo a las infraestructuras sanitarias y acabar de una vez por todas con la red de hospitales, dándole prioridad al Hospital de Fuerteventura, a los del norte y el sur de Tenerife, pero también a acometer las obras de mantenimiento y remozamiento que tan necesarias son en los centros de salud como en los más viejos hospitales. Todo ello se conseguiría con más prontitud si Canarias contara, obviamente, con una financiación justa.

Soy, como saben, defensor de la sanidad pública y para que esta se desarrolle resulta esencial que pueda evolucionar tecnológicamente. Me gustaría también que llegáramos a acuerdos sobre los criterios para la introducción de nuevas tecnologías y nuevos medicamentos en el sistema, y la importancia que deben tener los estudios de coste/utilidad para estas decisiones.

Otra cuestión merecedora de acuerdo es el papel que debemos dar a la sanidad pública, a las tareas de promoción y educación para la salud, para nosotros son francamente importantes.

La población canaria ha cambiado y lo sigue haciendo y sus necesidades son otras, obviamente, también la sanitaria. Por eso estaremos de acuerdo en que deberemos dirigir nuestros esfuerzos y nuestra estrategia hacia los pacientes con enfermedades crónicas. De la misma forma, podremos acordar también que debemos potenciar las unidades de hospitalización domiciliaria y las unidades de atención en cuidados paliativos.

Una de las claves para que todo esto pueda llevarse a cabo de forma ordenada y eficaz es la valoración del III Plan de Salud de Canarias, un objetivo básico para este Gobierno y entiendo que para esta Cámara y que las formalidades burocráticas, como ustedes saben, obligaron a dejar sobre la mesa al final de la legislatura pasada. Urge que se ponga en funcionamiento y que lo haga con el apoyo de todos los grupos. Nos proponemos volver a presentarlo en esta Cámara en el próximo mes para que haga su recorrido parlamentario, será un buen momento para evaluar las posibilidades que tenemos de acordar cosas. El plan está fechado como fecha 2015-2017 y esto supone que tendremos que elaborar otro plan al final de la legislatura, será otro momento importante para ver nuestra capacidad de diálogo y de pacto.

Igualmente, es necesario también la aprobación o la elaboración de un plan integral de recursos humanos que homogeneice los procesos y dé seguridad a los trabajadores de la sanidad pública canaria, que han demostrado su profesionalidad y compromiso en los últimos años. A nosotros nos corresponde, ahora, también terminar la oferta pública de empleo del año 2007, una fecha que cada vez que digo me causa cierto rubor, porque parece increíble que aún siga abierta una convocatoria durante ocho años, pero hay que ir mirando ya hacia el futuro y prever la siguiente con el objetivo de que se adquiera una dinámica de trabajo lo suficientemente ágil como para que permita sacar plazas a concurso cada tres años. Esto también debería ser materia de acuerdo entre todos.

Pero debemos ser conscientes de que el Gobierno tiene que gobernar y habrá circunstancias en las que, a pesar del diálogo y el intento de acuerdo, este no llegará. Por eso, si lo que los grupos de la Cámara pretenden es llegar a un acuerdo, a un documento firmado le sugiero que lo hagamos sobre unos mínimos, unos mínimos que, a mi entender, deben recoger el compromiso por un modelo sanitario de prestación universal, de gestión pública, de calidad y centrado en el paciente. Por otra parte, debería también recoger el compromiso de los actores por la consecución, allá donde fuere, de una financiación adecuada para dotar al servicio público de los recursos necesarios para su óptimo desarrollo. Además, deberá llevar incluido un apartado con el compromiso por el uso racional del sistema en el que resulta de franca importancia la participación de agentes sociales y de trabajadores del sistema. Y, por último, pero no menos importante, la apuesta por un modelo donde se priorice la predicción, la promoción y la educación para salud.

No soy ambicioso y tampoco quiero perder el tiempo y tampoco quiero que lo pierdan ustedes: hay asuntos en los que será difícil llegar a acuerdo, esto es obvio. Por ejemplo, la forma de resolver las listas de espera, el papel de la medicina concertada, la priorización de infraestructuras, etcétera. Tampoco soy partícipe de que abordemos o de que abramos un proceso interminable con infinidad de reuniones, expertos del mundo entero, gastos y gastos en reuniones para generar un tremendo documento sin recorrido, que se guarda en un cajón y no sirve para nada, y a los ejemplos me remito. Miren, el 29 de mayo del año 2006 se firmó el Pacto Social por la Sanidad en Canarias después de casi un año de trabajo de un comité de expertos nombrados ad hoc y que elaboró un magnífico documento que sirvió de base para el posterior documento de pacto, que luego se intentó consensuar con partidos políticos, con sindicatos, con colegios profesionales, pasó incluso por el Consejo Económico y Social, fue al Consejo Canario de Salud, no vino al Parlamento, es cierto... Bueno, aquel documento era un documento interesante que tenía nueve líneas estratégicas articuladas en 126 propuestas. No sé cuántos de ustedes conocen aquel documento, pero lo cierto es que su recorrido fue más bien escaso. La voluntad era buena, el ejercicio de reflexión sobre el sistema fue notorio, pero mi conclusión es que no se ha respetado y eso es lo que no quiero que vuelva a suceder...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Le queda un minuto más.

El señor CONSEJERO DE SANIDAD (Morera Molina): Si nos ponemos todos de acuerdo, tiene que ser en cuestiones que se hagan realidad y que tengan una aplicación cierta en la mejora del sistema.

Gracias, señor presidente.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor consejero.

Por los grupos no solicitantes, el Grupo Mixto, señor Casimiro.

El señor CURBELO CURBELO: Señora presidenta, señor presidente, señorías, señor consejero de Sanidad.

Quiero comenzar mi intervención para hacer público un reconocimiento que muchas veces no se hace y es el reconocimiento a los grandes profesionales que trabajan en la sanidad canaria.

En segundo lugar, que hagamos una reflexión. Que Canarias, al igual que otras comunidades autónomas, pierde empleo, lo sufren las familias, no es bueno, nos preocupa, pierden la vivienda, es verdad que ocurre, también nos preocupa, pero cuando se empieza a perder la salud sí que es grave. Por eso yo creo que todos debemos hacer un esfuerzo para evitar perder la salud y que Canarias tenga unos ciudadanos saludables porque así podemos afrontar, entre otras cosas, mejor el futuro. Por tanto, la Agrupación Socialista Gomera, que integra el Grupo Mixto, se une al pacto por la sanidad y a la cooperación con el Gobierno para el pacto por la sanidad en Canarias en la búsqueda de esa calidad deseable para evitar las listas de espera, para trabajar porque hayan unas urgencia humanas...

Y todos sabemos que la sanidad en Canarias es difícil porque es que la orografía de Canarias también lo es. Hospitales de referencia en las dos islas grandes, hospitales en las islas pequeñas, centros de salud, zonas de salud, áreas de salud, consultorios locales... Ya cuando tengamos la oportunidad de la visita oficial en La Gomera hablaremos de la sanidad, cómo está el estado de la misma en la isla, pero, miren, debemos apostar por la recuperación -digo recuperación porque quiere decir que hay algo que recuperar-, mejora y fortalecimiento del sistema sanitario público, universal y gratuito, como principio fundamental.

En segundo lugar, es conveniente que en sus presupuestos tenga en cuenta la realidad de las islas pequeñas; sabemos que tiene que negociar una financiación importante para que ello sea así. Y le quiero recordar algo de lo que yo estoy escuchando hablar hace mucho tiempo, que es el hospital del sur. Pongámosle lógica a las cosas, el hospital del sur continúese ya, hágase ya, conclúyase ya, y que sea operativo definitivamente, porque hay miles de ciudadanos en el sur que tienen que desplazarse a Santa Cruz, al hospital, a la residencia La Candelaria o a otros puntos de referencia. Por tanto, pongámosle también un poco de lógica a la sanidad porque los recursos públicos son escasos y sanidad y educación se llevan buena parte de los recursos autonómicos, como todos sabemos. Y centremos la atención, una vez reconocida esa realidad conjunta, compleja, difícil, en el paciente, que es la clave para tener una sanidad como todos deseamos.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Curbelo.

Por el Grupo Nueva Canarias, señor Rodríguez.

El señor RODRÍGUEZ RODRÍGUEZ: Señorías, si hay un servicio público que legitima el papel del Estado es la sanidad. Genera una enorme base social a la legitimación de los poderes públicos y a la necesidad de su existencia, porque ataca, responde a una de las cuestiones más apreciada por los ciudadanos: una respuesta cuando uno tiene dificultades en su salud.

El sistema sanitario público español fue el mejor del mundo, no hace siglos, hace una década. El mejor, el más eficiente, con la mejor cartera de servicios, con gratuidad, con niveles de desarrollo tecnológico puntero, conseguía mejores resultados. Han sido la crisis económica, los recortes, los que han colocado a la sanidad pública española en crisis, y a la sanidad canaria de manera especial. Hemos perdido en la última década posiciones de forma destacada. Yo, los pactos me parecen bien y si hay un espacio para hablar hablaremos, pero aquí lo que necesitamos es, primero, una estrategia, una política, un plan de salud que oriente los servicios conforme a las necesidades de salud de la población, a la edad de nuestra gente, al proceso de envejecimiento, a la cronicidad de determinados problemas, que incorpore a las nuevas tecnologías en la respuesta sanitaria, porque no es lo mismo atacar determinados problemas de salud, cronificados hoy, con el desarrollo tecnológico que hace diez años. Por lo tanto, estrategia, política, plan, camino, sin eso, palos de ciego.

Segunda cuestión, una organización eficiente y profesional, despolitizada en el bueno sentido del término. Que los recursos que se ponen al servicio del ciudadano lo sean porque son eficientes, porque dan respuesta, porque los estudios coste-beneficio lo demuestran, donde la industria a veces coloca cosas ineficientes en el sistema.

Y la tercera cuestión, fundamental, recursos económicos suficientes para desarrollar lo anterior.

Y todo eso lo tiene que hacer, ¿saben quién? El Gobierno de turno. Un buen Gobierno, un buen Gobierno que, con un buen plan, con una organización eficiente, con los recursos económicos pertinentes, recupere lo que hemos perdido. Porque es que hace una década éramos los mejores, siempre se puede uno perfeccionar, pero teníamos un sistema sanitario, insisto, público, gratuito, universal, con la mejor y más gratuita cartera de servicios del mundo a unos precios absolutamente competitivos, es decir, eficiente.

De manera que, señor consejero, nosotros estaremos cooperando siempre con un Gobierno que ponga sobre la mesa la necesidad de la recuperación de un sistema sanitario público y universal, y el camino está trazado: plan de salud, organización eficiente y medios económicos. Y hablaremos de esto con detalle en la Comisión de Sanidad, en el Pleno y, si hay una mesa de debate para esto, estaremos, pero yo lo que creo es que el Gobierno se tiene que poner a ello.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Román.

Por el Grupo Podemos, señor Márquez.

El señor MÁRQUEZ FANDIÑO: Buenos días a todos.

Nosotros apoyaremos un pacto por la sanidad siempre y cuando este pacto conlleve la suspensión de los conciertos con la privada. Nosotros entendemos que si vamos a hacer un pacto por la sanidad pública, por la sanidad universal, no hacerlo, no cancelar, no revisar estos contratos con la sanidad privada, también en nuestros servicios dentro de los hospitales, sería papel mojado. No nos vale un pacto por la sanidad, no nos vale con hacernos un selfi los que estamos aquí, en absoluto. Tenemos que ir mucho más allá, tenemos que dotar ese pacto de la financiación y de los recursos necesarios.

Para nosotros, un pacto para la sanidad debe llevar, por ejemplo, una prohibición explícita del copago sanitario y farmacéutico, al mismo tiempo que debe contemplar la creación de un marco regulatorio para los precios de los medicamentos, que sea transparente y con máxima garantía de independencia. Establecer estrategias de enlace entre la atención primaria y la especializada; integrar la salud laboral en los programas y servicios de salud pública. Integrar la salud laboral, como he dicho, y ampliar y mejorar los programas de cuidados paliativos y muerte digna en todas las islas.

Un pacto que apueste por mejorar la gestión de los recursos durante todo el año, como la apertura de los quirófanos y el resto de instalaciones en jornada de tarde y que propicie la reducción, por tanto, de las listas de espera.

La sanidad universal, el acceso también de los inmigrantes irregulares, el Gobierno lo anunció el 6 de agosto y todavía estamos esperando. En Valencia tardaron 21 días. Creo que vamos con un poco de retraso, y eso no es un problema de financiación, sino más bien de eficiencia y de voluntad política. La recuperación de las plantillas de la sanidad pública, situando las ratios de personal en la media de la Unión Europea. El Ministerio de Hacienda estima que, entre enero del 2012 y julio del 2013, en Canarias se perdieron 4000 puestos de trabajo en el sector sanitario, en el Servicio Canario de Salud pública.

Debemos instar al Estado a la derogación de la ley de mutuas laborales. Esto es fundamental, porque estamos dejando los derechos de los trabajadores en manos de las empresas privadas. En una democracia como la nuestra, esto no puede suceder.

Tenemos que unificar y profesionalizar los cargos de directivos y jefaturas. Que la elección sea por méritos y no por afinidad política. Cuando hablamos de sanidad, cuando hablamos de un derecho constitucional, de un derecho humano, no podemos dejar esa gestión en manos de los amiguetes, tenemos que poner a las personas más preparadas, y dentro de nuestro Servicio Canario de Salud tenemos a los mejores. ¿Por qué no están en cargos directivos?

Ayer nos decía el señor Ruano que nosotros decimos, pero hacemos poco, ¿verdad? Pues mire, en caso de transparencia aquí tiene un gran ejemplo, ¿por qué no hacemos una auditoría externa, una auditoría independiente, al Servicio Canario de Salud? Eso es hacer. Porque es muy fácil decir que tenemos un Comisionado de Transparencia y después negarse a hacer una auditoría.

Gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Márquez.

Por el Grupo Socialista, señor Marcos Hernández.

El señor HERNÁNDEZ GUILLÉN: Gracias, presidente. Señorías, muy buenos días a todos.

Señor consejero, yo creo que partir de la base del realismo que ha lanzado en su exposición me parece, desde luego, muy acertado. Conocer la realidad yo creo que es el mejor punto de partida para dar respuestas acertadas. Y, en el entorno general de las intervenciones, he podido visualizar cierto... bueno, digamos consenso con respecto a una materia tan sensible como esta. Yo me siento honrado con que eso se mantenga. Yo creo que es cierto que debemos de hacer ejercicio de responsabilidad política entre todos en una materia tan sensible como la que aquí nos atañe. Yo creo que ese componente de realismo, señor consejero, es importante. Por eso también debo insistir en que si el modelo de financiación no ha sido el más adecuado, porque de verdad que ha hecho mella, pues también habrá que decirlo, para partir tener claro cuál es el punto de partida para saber también dónde tenemos que llegar. Yo creo que justificar o solicitar una financiación más justa en materia sanitaria no es mucho pedir. Yo espero que por parte de todos los que estamos en esta Cámara hagamos también ese esfuerzo de ejercicio de responsabilidad.

Copié una frase, y la voy a leer literalmente, que dice: "Es necesario, más que nunca, un pacto por la sanidad que ponga de relieve que en Canarias las necesidades de los ciudadanos y el bienestar social están por encima de los diferentes posicionamientos políticos". Esta frase la acaba de decir el señor consejero, la ha pronunciado en su intervención y creo que viene a poner en valor una visión de la política y de lo público que le honra, desde luego que le honra.

Hemos hablado de pacto por la sanidad. Claro, es menester que entre todos hagamos ese esfuerzo de alcanzar ese principio de acuerdo que debe primar por encima de otro tipo de interés. Decía el consejero que se había firmado uno, el 29 de mayo de 2006, y que si alguno lo había leído. Yo sí me lo he leído, lo tengo aquí, y es verdad, tiene nueve puntos, que igual es un buen punto de referencia, de salida. Habla de algunas de las cuestiones que hemos hablado aquí, de listas de espera, mejor financiación..., habla de la educación, de la coordinación intersectorial, habla de la coordinación con el Sistema Nacional de Salud. En definitiva, luego también habla de 126 puntos, que por supuesto no voy a leer aquí porque no es menester tampoco cansar mucho.

Lo cierto es que yo creo que el verdadero pacto por la sanidad pasa por tener una visión amplia de los problemas y las necesidades. Si en cambio impera el cortoplacismo interesado políticamente, puedo aventurar que permaneceremos enfrascados en el debate estéril que no conduce a nada. El verdadero pacto, y lo han dicho algunas otras fuerzas políticas, pasa por el concurso del conjunto de los miles de profesionales que hacen una labor encomiable, en muchos casos poco reconocida. Pero pongamos nuestro valor en nuestro Servicio Canario de Salud sabiendo que la voluntad de este Gobierno es empeñar los mayores esfuerzos para mejorar y alcanzar los mayores logros en nuestro sistema sanitario y, como termina el tiempo, ha hablado el señor consejero de la tercera fase del Plan de Salud, tenemos una...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Hernández.

Por el Grupo Nacionalista Canario, doña Elena Luis.

La señora LUIS DOMÍNGUEZ: Muchas gracias, señor vicepresidente. Buenos días, señorías, señor consejero.

A nadie se le escapa que la sanidad constituye uno de los pilares del Estado del bienestar social al ser un servicio que incide directamente y de manera decisiva sobre la vida de nuestra gente.

Señor Morera, como usted bien ha dicho, la apuesta por consolidar y sostener un sistema sanitario universal y gratuito con las debidas garantías de modernidad, solvencia técnica, eficiencia y eficacia, pero que, sobre todo, dé respuesta a las verdaderas necesidades y expectativas que tienen nuestros ciudadanos y ciudadanas, se convierte en una verdadera prioridad en esta legislatura, y así lo recoge el acuerdo de gobernabilidad suscrito entre nuestro partido, Coalición Canaria-Partido Nacionalista Canario, y el PSOE, Partido Socialista Canario. Para ello es imprescindible -no puede ser de otra manera- el consenso hacia un pacto social y político por la sanidad en Canarias. Creemos que es una demanda de nuestra ciudadanía que todos los agentes políticos y sociales nos pongamos a trabajar para lograrlo, con el objetivo irrenunciable de avanzar hacia una política sanitaria moderna, abierta a la participación y orientada a implicar a los profesionales en la gestión del sistema, en el logro de una asistencia cada vez más centrada en el paciente, actuando sobre los determinantes de la salud y su prevención, la reorientación del sistema a los crónicos -tan demandada-, la integración de todos esos servicios que están pendientes de integrar, el impulso de la gestión de la información y el conocimiento, y potenciar la necesaria coordinación interinstitucional e intersectorial.

Sin duda, la lucha por conseguir una financiación justa para nuestra sanidad se convierte en un objetivo ineludible, como lo es también el compromiso firme de aumentar progresivamente los recursos procedentes de los presupuestos autonómicos.

Desde el Grupo Nacionalista Canario estamos convencidos que ese es el camino a seguir y ese es el compromiso que hemos adquirido con la sociedad canaria, incluyéndolo en nuestro programa electoral, posteriormente, como ya he dicho, en ese acuerdo para la gobernabilidad de Canarias con nuestros socios de Gobierno y, finalmente, en el compromiso firme que adquirió ante esta Cámara y ante todos los ciudadanos y ciudadanas de esta tierra el señor presidente del Gobierno de Canarias en su discurso de investidura.

Por tanto, señor consejero, señorías, desde el Grupo Nacionalista Canario nos ponemos a disposición, como no puede ser de otra manera, para lograrlo cuanto antes, en el menor tiempo posible, como así se ha comprometido el señor consejero, ese necesario acuerdo de toda la sociedad canaria con relación a nuestro sistema sanitario. Y, desde luego, desde nuestro grupo estaremos vigilantes de que ese compromiso, efectivamente...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, doña Elena.

Por el grupo solicitante de la comparecencia, señor Guillermo Díaz.

El señor DÍAZ GUERRA: Gracias.

Señor consejero, le adelanto que no voy a agotar los diez minutos de mi turno, sencillamente porque no venimos a esta sala a hacer política con la sanidad. Venimos a ayudarle a usted a hacer políticas sanitarias; queremos, desde el Partido Popular, ayudar a que la política sanitaria mejore la calidad de vida de los canarios, y créame que creo que usted ha empezado con buen pie. Ha empezado con buen pie porque ha hecho aquí una oferta de pacto sanitario y prácticamente todos los grupos están dispuestos a escuchar; algunos lo condicionan sin ni siquiera saber lo que usted quería decir. Nuestra única condición respecto a ese pacto sanitario es que la política sanitaria que va a ejercer este Gobierno va a situar al paciente en el centro de sus objetivos, y que va a escuchar y facilitar a los profesionales su labor.

Ha sido usted valiente, consejero, ha sido usted valiente al decir y reconocer que la sanidad no se arregla solo con dinero, que es más importante hacer una buena gestión, y estoy totalmente de acuerdo. Por supuesto que el dinero y la financiación sanitaria son importantes, por supuesto; pero la sanidad es uno de esos fenómenos que es insaciable económicamente: por mucho dinero que aportemos al sistema, siempre habrá una nueva técnica diagnóstica, siempre habrá un nuevo tratamiento, siempre habrá una nueva necesidad de recursos de personal... Por lo tanto, no solo es financiación, que trabajaremos por que se mejore, por supuesto, lo importante es mejorar la gestión, y para mejorar la gestión hay que escuchar a los profesionales. Lo decía hoy el presidente del Gobierno en su campaña electoral, que iba a escuchar a los profesionales sanitarios. Ya era hora de que alguien escuchara a los profesionales para que supiera lo que había que hacer.

Queremos en esta Cámara escuchar sus propuestas, que usted escuche las nuestras. Queremos hablar de qué va a ser de ese plan de lucha contra las listas de espera tan importante, queremos saber qué va hacer para descongestionar las urgencias. Anunciaban en campaña electoral que iban hacer una línea de urgencias para personas mayores, que se iba abrir una red periférica del servicio de urgencias... No lo sé, vamos a ver qué van hacer, vamos a debatirlo, vamos a ver qué se necesita y, si es la mejor opción, desde luego, contará con nuestro apoyo.

Queremos hablar aquí de un plan de cirugía mayor ambulatoria, queremos hablar de hospitalización domiciliaria, de telemedicina, de investigación biomédica. Queremos hablar de los profesionales, de la carrera sanitaria, de la evaluación continua, queremos hablar de la eficiencia, de la profesionalización, queremos hablar de las retribuciones, de las oposiciones, del personal que va a trabajar en la administración sanitaria. Queremos ver que se abren las farmacias, que no vuelva haber una nueva prórroga, queremos saber cómo se va a reducir el gasto farmacéutico. Queremos, como usted decía, debatir sobre salud pública, qué planificación tiene en materia de epidemiología, qué se va hacer cuando los planes de vigilancia epidemiológica evidencien que hay problemas, cómo va usted a coordinar el gasto del consumo de recursos entre los diferentes hospitales. Queremos hablar de todo eso y, desde luego, si sus ideas nos convencen, las vamos a apoyar.

Hay un inmenso espectro y un inmenso abanico de trabajo por delante. Nosotros le vamos a dar un voto de confianza, usted tendía la mano, nosotros se la aceptamos. Tender la mano no es un cheque en blanco, vamos a escuchar, vamos a estar muy vigilantes. Hay un compromiso de incremento presupuestario en los presupuestos de esta comunidad autónoma de un 4 % anual. Vamos a estar vigilantes, que ese compromiso efectivamente se cumpla. Vamos a estar también muy pendientes del cumplimiento de promesas electorales. Hablaban de una reorganización de la estructura sanitaria, que se iba a incrementar la cantidad de medios diagnósticos, que tendríamos ese plan para urgencias. Todos coincidimos en que el acceso se ha deteriorado, todos coincidimos en que el problema es el acceso a los servicios. El acceso a los servicios es precisamente lo que va a condicionar la percepción de los usuarios del sistema, vamos a ver cómo van hacer ustedes para que efectivamente el ciudadano no solo perciba una buena calidad en la prestación, sino que le faciliten el poder acceder a esa prestación.

La sanidad no entiende de colores políticos, fíjese usted y alguien... bueno, todos somos presas de lo que decimos, como hace unos meses decía su líder político que, con el PSOE en el Gobierno, no iban haber manifestaciones en la calle, no iban a haber quejas sanitarias. Pues ayer ya tuvimos la primera, en La Cuesta la gente pedía un centro de salud. Eso significa que la cosa va a tardar en mejorar, pero fíjese que confiamos todos en que sea así.

Nosotros, ya le decía, que tenemos el problema no de ponernos enfermos, sino de que se nos atienda cuando lo estamos. Tenemos identificados una serie de problemas que no vamos a enumerar porque, desde luego, veo mucho positivismo en su exposición y además en la Cámara, que por fin vamos a tratar de ponernos de acuerdo e identificar verdaderamente los problemas y trabajar por ellos.

Hablamos de las enfermedades crónicas, consumen un 80 % de los recursos, ¿van hacer ustedes algo respecto a los crónicos? ¿Van a unificar las prestaciones de servicio? ¿Van a colaborar directamente con la Consejería de Servicios Sociales o van a seguir trabajando de espaldas? ¿Vamos a tener por fin un plan de salud? Usted casi adelanta ya una fecha para tener un plan de salud en esta Cámara. Estamos deseando conocer ese plan -más vale tarde que nunca-, debatir y, desde luego, aportar sobre el mismo. Esa lista de espera quirúrgica necesita prontamente una solución, ¿cómo lo va hacer usted? ¿Va hacer derivaciones? ¿Va a incrementar el horario de trabajo? ¿Va a incrementar las jornadas de trabajo de los profesionales? ¿Qué va hacer con el colapso de urgencias? Cuando alguien acude a urgencias y habla con los especialistas o hablan con la persona que le atiende en la puerta no hablan de insuficiencia de recursos, nadie me ha dicho en urgencias como usuario que es que hay un problema de financiación estatal, la gente dice que hay un problema de gestión, que hay un problema de organización. De gestión de los de arriba, y ahora son ustedes los que están arriba. Por lo tanto, espero que sepan lo que tienen que hacer y, si no, cuenten con nosotros que vamos a aportarles muchísimas ideas.

Hay una ponencia hoy preparada respecto a las infraestructuras, ¿qué va a pasar con el Hospital del Norte, hospital del sur, centros de salud que están parados? ¿Qué pasa con el acelerador del Hospital Negrín? Supongo que nos lo contará, tendrá un plan para todo eso y estamos deseando escuchar qué va hacer con las inversiones y qué va a pasar con todas esas obras que están paradas, detenidas o en proyecto en Canarias.

Finalizo por donde acabo: mano tendida a presupuestos en incremento. Esperamos que todo lo que traiga aquí sea positivo, que podamos llegar a un consenso, cuente con el Partido Popular, cuente con nuestro apoyo, pero no es un cheque en blanco. Haga propuestas serias y fáciles de alcanzar.

Gracias, consejero.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor Díaz.

Señor consejero, por tiempo de diez minutos.

El señor CONSEJERO DE SANIDAD (Morera Molina): Gracias, señor presidente.

Agradezco, en primer lugar, el tono que han tenido en todas sus intervenciones, el suyo en particular por ser el proponente, señor Díaz Guerra. Creo que se dan las circunstancias en esta legislatura para poder llegar a acuerdos en materia sanitaria, desde luego, por nuestra parte no va a quedar y haremos todo el esfuerzo posible para que así sea. No soy un iluso y sé que habrá momentos en que podremos llegar a acuerdos, pero intentemos mirar la parte de avenencias y probablemente caminaremos adelante.

Por intentarle responder a algunas cuestiones que me ha planteado, señor Curbelo, desde luego tiene usted razón. Yo creo que no hay, al margen de la red básica de hospitales, el que mayor justificación tiene del resto de la obras es el hospital del sur de Tenerife, por su población, por su circunstancias de lejanía, etcétera, es el más justificado que está, no cabe duda. Obviamente, estoy de acuerdo con usted en el tema de la priorización de la salud, es una cuestión personal de cada uno pero, bueno, yo creo que, mayoritariamente, pensamos que la salud es de las cosas más importantes en esta vida.

Señor Rodríguez, el plan de salud. He dicho que vamos a retomar el documento que teníamos sobre la mesa del plan de salud, por evitar todos los trámites que ya se han hecho y que no deberíamos volver a hacer, y debatirlo en las comisiones y que los partidos tengan opinión y pueda mejorarse si es oportuno.

Señor Márquez, hasta la legislatura pasada no hubo nadie que fuera más crítico con los conciertos sanitarios en esta Cámara que yo, me alegra que venga ahora crítico con esta cuestión también como lo es usted. Pero tengo que decirle que los conciertos son ahora mismo necesarios, que en las clínicas privadas concertadas trabaja mucha gente que se quedaría sin trabajo si cerráramos esos conciertos. Esta cuestión hay que tenerla en cuenta. Y que estoy de acuerdo con usted, porque además lo tenemos en nuestro programa de trabajo, en que hay que revisar -porque además nos lo exige la Intervención General de la comunidad-. ¿Hay que revisar los conciertos? Hay que revisarlos, es verdad, pero no nos planteemos, porque es imposible, anular la concertación, la Ley General de Sanidad la permite y la recoge, es imposible anularla, pero estoy de acuerdo con usted en que hay que revisarla y hay que ver exactamente en qué condiciones, pero no nos planteamos, porque no puede ser, anular completamente la concertación de medios.

Bueno, antes les hablaba del pacto por la sanidad que se alcanzó en el año 2006 y que no tuvo demasiada repercusión en la organización ni resultados sobre el sistema sanitario canario, pese, insisto, al esfuerzo de diálogo y negociación que se realizó en aquel entonces. Ahora, casi una década después, la realidad es otra y poco tiene que ver con aquella, ya que, aunque muchos de los problemas diagnosticados en aquel momento no solo permanecen sino que incluso están reagudizados, lo cierto, por ejemplo, el tema de la financiación ahora es francamente peor y obviamente tenemos mucho menos margen de maniobra en este momento y urge tomar decisiones y avanzar con acuerdos. Y urge actuar porque no hay un solo partido político en esta Cámara que no haya establecido, y lo he entendido en las intervenciones que han tenido ustedes ahora, como una prioridad la mejora urgente e inaplazable de la sanidad pública canaria. Por eso ahora lo que corresponde es saber hasta qué punto estamos dispuestos unos y otros a olvidar las diferencias -importante esto- y buscar nuestra avenencias y crear acuerdos que nos permitan avezar.

Durante los últimos años, y sobre todo con motivo de las últimas elecciones autonómicas, tuve la oportunidad de escuchar, todos lo escuchamos, en innumerables ocasiones y por parte de la totalidad de las formaciones políticas, incluso las que ahora mismo no están representadas en la Cámara, que había que sacar de la sanidad pública el debate ideológico y político para centrarlo en la toma de decisiones eminentemente técnicas, y alguno de ustedes lo ha vuelto a repetir en sus intervenciones. Y, honestamente, les digo que me gustaría que fuera así, pero se llega a puntos o, mejor, a líneas en las que la ideología sí que importa; porque no es lo mismo una asistencia sanitaria solo para asegurados que una asistencia sanitaria para todos, y no es lo mismo una privatización de la gestión sanitaria que una sanidad bajo el control público. Por eso les digo que tecnificación de la gestión sanitaria sí, pero bajo unas premisas mínimas que habría que acordar. Eso es a grandes rasgos lo que he venido defendiendo en esta comparecencia.

Incluso, en las comparecencias que ha tenido aquí el Diputado del Común, ha venido solicitando históricamente que así fuera, que despolitizáramos o que tecnificáramos la gestión sanitaria para evitar que se politicen cosas como las listas de espera y que se dejen de utilizar como armas políticas y electorales, según convenga.

Yo les pido que seamos capaces de dialogar y negociar para llegar al mayor entendimiento, pero también les aclaro que no me voy a quedar quieto esperando a que lleguen a acuerdos, entre otras cosas, porque la situación no permite esperar más y sería una irresponsabilidad por nuestra parte. También les digo que yo no he venido a esta tarea de gobierno a vender humo ni con una varita mágica, prefiero marcarles tareas cuyos resultados puede que no se vean en el corto plazo pero que redunden en la salud de los canarios en el largo plazo. Por eso no quiero ser ambicioso con pactos colosales finalmente irrealizables.

Vuelvo a hablar del plan de urgencias que ha salido en las intervenciones que ustedes han tenido, insistiendo en que es una prioridad de esta consejería, pero también la totalidad de los miembros del Gobierno. Desgraciadamente, parece que hablar de planes en esta Cámara es como referirse a un futuro incierto en el que ya se verá qué es lo que sucede y si lo planificado sirve para algo o no. Yo ya les digo que conmigo no va eso, habrá un plan de urgencias el próximo mes de junio y de esta manera cumpliremos no solo una de las principales demandas de la ciudadanía, sino también de los trabajadores y de los representantes sindicales; porque insisto en que será una planificación hecha por quienes más saben de la cuestión -cuestión que nos ha pedido reiteradamente el señor Díaz Guerra- y teniendo siempre como protagonistas a los pacientes.

Estaremos en posición de dar una respuesta a un problema que no es nuevo, pero que hasta no se ha podido o no se ha sabido abordar con eficacia y que está dificultando notablemente el acceso de los pacientes a los servicios sanitarios.

El regreso a un sistema sanitario universal y público también es una cuestión básica para este Gobierno. Y ya les avanzo que en las próximas semanas, es verdad que nos hemos demorado más de lo que quisiéramos, pero en las próximas semanas estaremos en condiciones de dar amparo legal a esas personas en situación irregular que conviven con nosotros en estas islas para que sean ciudadanos de pleno derecho en lo que a atención sanitaria al respecto. Es una cuestión humanitaria, incluso creo que moral, si llega a ese extremo. Que desde los primeros días en que hemos estado en la consejería hemos querido abordarlo, y desde luego, ya les digo, que no lo estamos haciendo solos, cuento con el respaldo de todo el Gobierno y así se refrendó en un acuerdo del Gobierno el día 6 de agosto.

Respecto a la falta de financiación suficiente es algo que difícilmente se puede suplir solo con actitud; pero lo cierto es que en estos primeros meses como consejero he percibido una magnífica disposición por parte de los profesionales, de los trabajadores, de los gestores para buscar soluciones innovadoras y creativas para abordar los problemas del día a día mientras vamos planificando y sentando las bases del medio y largo plazo. Tenemos identificada buena parte de los problemas y ahora nos toca priorizar, decidir por dónde empezamos y cómo. Son muchas cuestiones, señor Díaz Guerra, las que usted me planteaba. Estoy de acuerdo en que iremos abordándolas poco a poco e iremos trabajando sobre ellas, pero es verdad que son muchas las cuestiones, los problemas, que hay que solucionar. Yo y mi equipo, con el respaldo del Gobierno, estamos en ello, y la idea es que, cuantas más manos se sumen, mejor y más rápido iremos avanzando.

He encontrado, como les decía, muy buena disposición en los trabajadores sanitarios y en las fuerzas sindicales, y eso me llena de satisfacción porque son colectivos que necesitan ser oídos y tienen mucho que decir y que opinar. Su colaboración es indispensable y será un eje que pretendo que esté presente en todas las decisiones y actuaciones que tome esta consejería.

Ahora a lo que aspiro es a que esto sea también una realidad en este Parlamento. Estoy abierto a todas las aportaciones que quieran hacer, propónganme medidas razonables, factibles y aplicables y las escucharemos. Lo hago porque estoy convencido de que el único fin que nos mueve a todos, a todos los que estamos aquí, es conseguir que la sanidad pública canaria cuente con los mayores índices de calidad posible en los parámetros que se miden.

En resumen, señoría, estoy dispuesto a dialogar, a escuchar alternativas y aceptarlas si son razonables y factibles. Estoy dispuesto a llegar a acuerdos, por supuesto, pero no estoy dispuesto a perder el tiempo, ni a formar comisiones y comités que eternicen los asuntos, ni a documentos colosales firmados por grandes eminencias que terminan en vitrinas. A eso no estoy dispuesto.

Si está en el ánimo de todos los grupos generar un acuerdo, les sugiero que sea un acuerdo de mínimos, de puntos básicos y comunes. Les sugiero que revisen, como ha hecho el señor Hernández, el documento firmado hace nueve años y busquen en él, por una parte, la razón de su intrascendencia -porque finalmente y desgraciadamente resultó intrascendente- y, por otro, las avenencias que pudieran ser el germen de un nuevo pacto.

Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (De la Hoz Fernández): Gracias, señor consejero.