Diario de Sesiones 40, de fecha 29/6/2016
Punto 30

9L/C-0497 Comparecencia del Gobierno -consejera de Educación y Universidades-, instada por el Grupo Parlamentario Nacionalista Canario (CC-PNC), sobre política universitaria.

La señora PRESIDENTA: Continuamos. Comparecencia, en este caso de la consejera de Educación y Universidades, instada por el Grupo Nacionalista Canario, sobre política universitaria.

Para comenzar la iniciativa, la señora Socorro.

Disculpe, señora Beato. Siempre estoy bailando entre el nombre y el apellido. Discúlpeme, señora Beato, le pido disculpas.

La señora BEATO CASTELLANO: Gracias, presidenta. Señorías, consejera de Educación y Universidades.

La superación de la crisis y la mejora de las condiciones sociales requieren la construcción de mecanismos que aseguren unos mejores niveles de calidad y productividad. En la consecución de este objetivo, la educación superior y nuestras universidades públicas juegan un papel fundamental debido a las posibilidades que brindan para la capacitación de los jóvenes y la utilización de la investigación y la innovación como instrumento para incrementar la competitividad especialmente de nuestras pequeñas y medianas empresas. Las dos universidades públicas canarias pueden ser el motor para el cambio que la economía canaria necesita para la modernización de la sociedad y de los sectores productivos, actuando como correa de transmisión del conocimiento para un mejor desarrollo económico, social y cultural del archipiélago.

Las universidades son una herramienta imprescindible para lograr un futuro de prosperidad y de progreso, porque la universidad, además de docencia y educación, es también investigación, innovación, es conocimiento y pensamiento, para avanzar hacia un futuro que cambie nuestro modelo de economía y de sociedad.

Para ello se necesitan medios, se necesitan recursos, se necesitan políticas que impulsen su desarrollo y que refuercen su posición en materia de calidad y en el camino hacia la excelencia. La crisis económica y la falta de financiación estatal han impactado fuertemente en nuestras administraciones, con consecuencias en todos los ámbitos. La escasez de recursos ha afectado a la calidad en la prestación de los servicios públicos y las universidades, por supuesto, no han quedado al margen: vieron recortada su financiación como consecuencia de la crisis.

Le hemos pedido esta comparecencia para conocer el análisis que hace el Gobierno acerca de cómo estas dificultades han afectado y están afectando a los estudios superiores y qué medidas tiene previstas para superar los problemas derivados de esta falta de financiación.

Es sabido que las universidades han reclamado cambios en el sistema de financiación. El presidente del Gobierno se comprometió con los rectores a encontrar un marco estable de financiación que permita el desarrollo equilibrado de las universidades. Queremos que nos informe acerca de cómo van esos trabajos. Es un asunto que nos preocupa porque el futuro de la sociedad canaria depende, en buena medida, de la solidez de sus universidades y de que sus ciudadanos tengan la mejor formación y estén lo más preparados posible.

Pero además de ser el motor para el impulso a la economía nuestras universidades son un elemento básico de cohesión social. En tiempos de crisis los más perjudicados siempre son los más débiles, los que menos tienen, y los colectivos con mayores dificultades, no solo por motivos económicos sino también por razones geográficas. En un territorio fragmentado como Canarias la brecha geográfica es un elemento más que se suma y que actúa de freno a la formación de nuestros jóvenes. Por eso las políticas de equidad son importantes en todos los territorios pero especialmente en Canarias.

Nos interesa conocer las políticas que el Gobierno está desarrollando en materia de becas y ayudas y qué decisiones ha tomado para atemperar el impacto en la economía de los alumnos y de su familia a la hora de afrontar el coste de la matrícula universitaria.

Queremos preguntarle qué acciones ha emprendido el Gobierno de Canarias en relación con la proposición no de ley aprobada en este Parlamento hace unos meses sobre medidas encaminadas a la mejora del sistema de becas.

Son muchas las cuestiones que nos interesan. Es una materia densa la que afecta a la política universitaria. Algunas no dependen directamente de su departamento, dependen de la Consejería de Economía, como todas las políticas del fomento a la investigación y a la innovación, que corresponden a la Agencia Canaria de Investigación y Sociedad de la Información. Esperamos poder abordar en su comparecencia asuntos que sí dependen de su departamento, como la financiación de las universidades, la gestión de las becas en sus distintas modalidades o las medidas respecto a las matrículas. En definitiva, todas las políticas que está desplegando su departamento para favorecer que se extienda la educación superior en Canarias y para mejorar la calidad de nuestras universidades

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señora Beato.

Por el Gobierno, señora consejera.

La señora CONSEJERA DE EDUCACIÓN Y UNIVERSIDADES (Monzón Cabrera): Gracias, señora presidenta. Buenas tardes, señorías.

Señorías, el primer objetivo que nos hemos fijado para la educación universitaria es el mismo que el del resto de las enseñanzas: la equidad del sistema en su conjunto. Y esto en el ámbito de la educación superior pasa, en primer lugar, por que sea asequible para toda aquella persona en Canarias que desee ir a la universidad, sin que sus elevados costes sean una barrera insalvable. Pero al mismo tiempo que propiciamos ese acceso debemos procurar también el avance de nuestros centros públicos en el camino hacia la excelencia. Un camino que debe tener además su reflejo último en la sociedad por dos vías: contar con profesionales adecuadamente preparados en todos los sectores y realizar una adecuada transferencia de los conocimientos y desarrollos científicos implementados al resto de la sociedad. En suma, nuestro objetivo para la presente legislatura es tan ambicioso como conseguir mejorar las posibilidades de acceso de todas las personas de Canarias a la educación superior, al tiempo que hacemos esta más eficiente y logramos que sus conocimientos se transfieran de forma más rápida y de forma habitual a las empresas de cada sector.

Partiendo de la premisa inicial, la equidad, debemos explicar que en ese ámbito trabajamos desde dos perspectivas diferentes. Por un lado, la congelación de las tasas de matrícula en nuestras universidades públicas y, por otro, el incremento de los que se benefician de algún tipo de beca de estudios.

Con respecto a las matrículas, la semana pasada el Consejo Universitario de Canarias aprobó el proyecto de decreto por el que se fijan los precios públicos a satisfacer por la prestación de servicios académicos y administrativos universitarios de las universidades públicas de la Comunidad Autónoma de Canarias para el curso 2016/2017. En él, y a propuesta del Gobierno, se congelan las tasas de matrícula, de forma que quedan igual que en el curso 2015/2016, pero además se establece como novedad el abono de la matrícula fraccionada en seis plazos, dos más que los que estipula la norma actual. De esta forma el estudiantado tendrá más fácil asumir el coste que supone afrontar una carrera universitaria.

Y para el colectivo que no puede siquiera afrontar los costes de los estudios superiores hemos emprendido ya una serie de mejoras en el sistema de becas, que esperamos ir perfeccionando a medida que avancemos en la legislatura.

La primera medida fue mantener en algo más de 10,6 millones de euros la partida para becas, que se ha demostrado suficiente para atender a las 5319 -en este caso- peticiones que hemos recibido que cumplen con los requisitos establecidos.

Ahora trabajamos en ampliar la cobertura de las becas, de modo que podamos aumentar el número de personas beneficiarias de la gratuidad de tasas académicas, mientras existan fondos para hacerlo. En primer lugar, se están estudiando los expedientes de quienes se quedaron fuera por motivos patrimoniales, es decir, quienes por su nivel de ingresos sí cumplen los requisitos pero poseen alguna propiedad con cierto valor que les hace exceder los umbrales establecidos para obtenerla. Además se estudia la flexibilización de los umbrales económicos para elevarlos, de modo que se puedan distribuir entre 500 000 y 800 000 euros más, de forma que algo más de 500 estudiantes, según un primer cálculo, puedan añadirse a los becados que estudian de forma gratuita.

Pero esta extensión del alcance de las becas no es la única línea de trabajo en este sentido. En este primer año de legislatura hemos variado ya el procedimiento de adjudicación. Si habitualmente se comienza otorgando las becas de primeros cursos de máster o grado, por no depender de las notas de ejercicios anteriores y ser las más sencillas de resolver, nosotros hemos introducido un segundo factor a tener en cuenta, como es el de paliar la doble insularidad. Por eso desde este año se priorizan también las solicitudes que piden beca por motivos de cambio de residencia y que a la postre son en su mayoría las que solicita el estudiantado que viaja desde las islas no capitalinas para estudiar.

Al respecto también hemos de decir que existen diferencias relevantes en muchos otros aspectos del sistema de becas con vistas a paliar la desventaja económica que supone la doble insularidad. Por ejemplo, la ya mencionada beca de residencia es una cantidad fija de 1500 euros que se concede por residir fuera de la vivienda habitual, bien en otra isla o en la Península. La diferencia está en el umbral de renta que se exige al estudiante según sea de isla capitalina o no capitalina. Así, en las primeras, el umbral de renta exigido para una familia tipo de cuatro miembros es de 36 420 euros, mientras que para las familias de islas no capitalinas o de estudiantes que deban desplazarse hasta la Península la renta máxima permitida se eleva hasta los 38 831 euros, una diferencia de 2410 euros.

Estas diferencias también se aplican a las becas de transporte. Los estudiantes de islas no capitalinas que estudian en universidades canarias tienen concedido un total de 623 euros y los que estudian en universidades de la Península un importe de 937 euros. Unas cantidades que para los estudiantes de las islas capitalinas se reducen hasta los 442 euros y 888 euros, respectivamente.

Además, a partir del próximo curso 2016/2017, los alumnos y alumnas universitarios de FP superior de las islas no capitalinas que estudien en las capitalinas dispondrán de cuatro trayectos aéreos gratuitos durante el curso escolar, lo que permitirá reducir aún más la diferencia de la doble insularidad.

Y no quiero cerrar este capítulo de becas sin mencionar que también para el curso 2016/2017 se podrán solicitar las ayudas por primera vez de forma telemática, mediante una clave asignada y sin necesitar un certificado digital.

Además trabajamos para reducir al mínimo los plazos de resolución y que las personas que las solicitan sepan a la mayor brevedad si van a poder contar con la ayuda o no. En este sentido también nos hemos dirigido al Estado para demandar el cumplimiento de los acuerdos alcanzados en esta Cámara. El pasado 13 de mayo, durante la reunión de la Comisión Sectorial de Educación en el ministerio, tuve ocasión de reivindicar cambios en el proyecto de Real Decreto por el que se establecen los umbrales de renta y patrimonio familiar y las cuantías de las becas y ayudas al estudio para el curso 2016/17 y se modifica parcialmente el Real Decreto 1721, por el que se establece el régimen de becas y ayudas al estudio personalizadas. Durante el debate. dejamos claro al ministerio el contenido de la proposición no de ley aprobada por este Parlamento esa misma semana, en la que sus señorías demandaban al Estado que disponga cuantos mecanismos sean necesarios para agilizar los trámites de concesión de las becas con carácter general. En especial incidí en los retrasos derivados de la aplicación de la parte variable de las becas y los cambios normativos a acometer para solucionarlos.

Pero, tal y como avancé, no toda nuestra política se basa en el fomento de la equidad del sistema, también nos hemos propuesto mejorar la educación superior en su conjunto y, respetando la gran autonomía de la que goza, consensuar con las dos universidades públicas del archipiélago un sistema de financiación estable fundamentado en criterios objetivos y en incentivos para la consecución de metas establecidas por consenso. Porque no olvidemos que la primera medida de fomento de la equidad y del impulso de la educación superior es la financiación que hace la comunidad autónoma, de más del 80 % de los costes de la Universidad de La Laguna y de la de Las Palmas de Gran Canaria, lo que para el año completo supuso casi 112 millones de euros de inversión para la primera y cerca de 98 millones para la segunda, y que es en estos momentos el porcentaje más alto del Estado. Sin embargo, la falta de indicadores claros y de compromisos plurianuales de inversión sitúa a los centros públicos en una cierta incertidumbre que dificulta la planificación de su actividad y en ocasiones la apuesta por líneas de trabajo que requieren ciertas garantías de recursos año tras año. De ahí que una de nuestras primeras tareas fuese el sentarnos a negociar con los equipos directivos de ambas universidades para consensuar un nuevo modelo que proporcione estabilidad a medio y largo plazo, a través de un instrumento que sea claro y objetivo, tanto en la asignación de los recursos públicos como en la aplicación de los mismos, que esté guiado por los principios de suficiencia, eficacia, equidad, transparencia y responsabilidad social y que se oriente claramente hacia el cumplimiento de unos objetivos bien definidos en función de los retos que las universidades públicas canarias tienen ante sí para convertirse en auténticos motores de transformación económica y social al servicio del progreso de Canarias.

Pretendemos, además, que la claridad y la flexibilidad sean dos parámetros relevantes en el nuevo modelo, en el que estamos trabajando, partiendo de un diagnóstico de la situación actual realizado por las propias universidades públicas y de las perspectivas de futuro que tengan. Por eso hemos estructurado el trabajo conjunto en tres fases: una primera fase que consiste en determinar los rasgos más destacados de la situación actual de las universidades canarias a modo de diagnóstico, su trayectoria...

La señora PRESIDENTA: Consejera, se acabó el tiempo. Un minuto más.

La señora CONSEJERA DE EDUCACIÓN Y UNIVERSIDADES (Monzón Cabrera): ...su trayectoria reciente y perspectivas relevantes, que ya está casi ultimada; una segunda fase en la que trataremos de describir los criterios y objetivos del modelo de financiación; y la tercera fase, que consistirá en diseñar la estructura del modelo de financiación propuesto, los fondos que lo integran, las subvenciones que componen cada uno de los fondos, las variables en las que se basa la asignación de recursos entre universidades en cada subvención y las reglas de evolución temporal previstas.

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Gracias, consejera.

Grupo Mixto, señora Mendoza.

La señora MENDOZA RODRÍGUEZ: Gracias, presidenta.

Agrupación Socialista Gomera comparte con los actuales responsables de las direcciones universitarias que hay que renovar las infraestructuras universitarias, impulsar la investigación y la innovación, así como realzar la importancia que tienen las universidades en el desarrollo social y económico.

Es necesario que los jóvenes acaben sus estudios con una formación integral de calidad y diferenciada. Una formación que les abra las puertas de un futuro prometedor dentro del complejo mundo laboral, que esté arropada por una política de becas y/o ayudas acorde con el coste de las matrículas, gastos de residencia y desplazamientos. Becas que cumplan con su cometido, es decir, tener en cuenta que el curso comienza en septiembre, pues los gastos se comienzan a generar desde el primer día de clase.

Señora consejera, según la cuarta edición de un ranking sobre el sistema universitario español que publican el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas y el BBVA, el sistema universitario público de Canarias figura en tercer lugar por la cola en España en rendimiento docente y actividad investigadora, con tasas de 23 puntos por debajo de la media. Además la tasa de rendimiento de las universidades canarias es la más baja del país, pues la tasa de rendimiento se sitúa en Canarias en el 70,5 %, siendo la media del Estado el 76,3 %. Según datos del Ministerio de Educación, la tasa de éxito es de 84,1 % en las islas frente al 86,7 % del conjunto nacional, mientras que la tasa de evaluación en el archipiélago es del 83,92 %, también la más baja de España, frente al 88 % nacional.

Otro dato significativo es que el nivel de escolarización universitaria se sitúa en el 29,4 % en el conjunto de España, mientras que en Canarias solo llega al 18,5 %.

Bueno, podríamos seguir con los números, pues el Ministerio de Educación confirma que el 20 % de los estudiantes universitarios matriculados en centros de Canarias dejó sus estudios durante el primer curso académico. En solo un año las universidades canarias perdieron un total de 1300 alumnos, situación que se achaca al incremento de las tasas de matriculación y a la disminución de las becas. La Universidad de La Laguna dejó de recibir un total de 26 millones de euros, mientras que la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria sufrió un recorte de 16 millones, medida aplicada por la consejería regional por imposición del Gobierno de Estado.

Señora consejera, nos gustaría saber qué tiene pensado para revertir todas estas pésimas cifras y porcentajes.

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Gracias, señora Mendoza.

Continuamos. Por parte del Grupo de Nueva Canarias, el señor Campos.

El señor CAMPOS JIMÉNEZ (Desde su escaño): Señora presidenta. Señora consejera.

Yo creo que una de las referencias más importantes para medir el desarrollo de cualquier pueblo sin duda es el número de sus universidades y, de manera más importante aún, el nivel de las mismas. Es más, yo creo que quizás uno de los elementos o una de las instituciones que hacen que las personas que viven en un territorio se sientan más orgullosos precisamente son las universidades, el número de ellas y el nivel de las mismas.

Yo creo que en el caso del número de las universidades públicas en Canarias en este momento no tenemos nada que decir, pero sí tenemos que cuestionar probablemente el nivel en el que actualmente se están manejando. Y no lo digo por los distintos rankings a los que estamos accediendo con bastante frecuencia y que desgraciadamente suelen situarnos a la cola en ocasiones; lo hablo de datos objetivos, cuando hablas con el profesorado, con el propio alumnado, incluso, pues, con otros agentes en el ámbito educativo. La escasez o la falta de proyectos en materia innovadora, en materia de investigación, la falta de sinergias con el mundo empresarial e incluso la falta de imbricación con el mundo social de las universidades yo creo que son algunos de los aspectos que hay que trabajar. Ese plan en el que ustedes están trabajando nos parece que muchos de estos aspectos viene a corregirlos. En los últimos tiempos además se han dado pasos importantes, como han podido ser los avances que se dieron en el nuevo REF que se ha establecido y que se ha negociado recientemente.

Pero está claro que, siendo esto una responsabilidad también de las universidades, este Gobierno, por supuesto el de Madrid, pero este Gobierno y el anterior han tenido una responsabilidad fundamental. La financiación para conseguir todos estos aspectos de que hemos estado hablando con anterioridad es absolutamente determinante y desgraciadamente hemos asistido en los últimos años a un deterioro de la misma; un marco financiero que dé estabilidad a las dos universidades públicas canarias para avanzar en sus líneas estratégicas. Y, por tanto, es fundamental, al margen de ese millón y medio en el que hemos crecido en financiación universitaria en el último presupuesto, ir mucho más lejos. Avanzar en una mejor financiación por parte del Gobierno hacia nuestras universidades, además de avanzar en los objetivos que planteábamos con anterioridad, implicaría no retroceder en la contratación de personal docente, apostar por la mejora de la formación constante de este personal y, por supuesto, no supondría tener que colocar a las universidades en la tesitura futura, si siguiéramos en esta línea, de incrementar sus matrículas.

Agradecer y felicitar por haber mantenido o congelado las matrículas en este año, por la apuesta en materia de becas, pero todavía nos queda muchísima tarea pendiente en materia universitaria para que estén al nivel que los canarios y canarias, que esta tierra, que nuestro modelo económico y social, necesitan de las mismas.

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Gracias, señor Campos.

Continuamos. Grupo Podemos, señor Déniz.

El señor DÉNIZ RAMÍREZ: Señora presidenta, señorías, señora consejera.

Hablar de financiación en un contexto de implementación terrible de las políticas neoliberales es bastante triste, ¿no?, por decirlo de alguna manera. Ha habido una tendencia desde hace bastante tiempo, no desde la crisis sino desde hace mucho tiempo, la tendencia a que los usuarios se paguen los estudios universitarios. Esa es una tendencia que no hemos abandonado. Con la crisis lo que se ha hecho es incrementar totalmente esta presión hacia que sea el usuario el que pague el coste totalmente de la universidad.

Durante la crisis, las universidades han sido, literalmente, señorías, masacradas en cuanto a los presupuestos, totalmente masacradas. Porque hay una animadversión del pensamiento neoliberal, representado aquí por el Partido Popular, hacia que todo lo público es necesariamente y por principio malo, cosa de la que nosotros estamos totalmente en contra. Lo que se utiliza para justificar recortes son los rankings, de las universidades peores, las universidades mayores... Por cierto, ranking que nosotros hemos criticado aquí, porque además es lo que el pueblo después asume: "somos los peores, siempre somos los peores". Una evaluación que siempre consiste en estar estableciendo rankings y por ese camino no vamos a ningún lado, porque luego se justifican determinados presupuestos en función de los rankings, y los rankings ya les diré en qué consisten.

Lo de la endogamia, la supuesta mala gestión, en fin, todos los males que tiene la universidad pública. ¿Por qué, en cambio, señorías, ustedes apoyan las universidades privadas? Desde el 2000, desde el año 2000 en adelante, por cada año hay una nueva universidad privada en el Estado español, y esa es una política del Partido Popular. Es decir, que no toda la universidad entonces es mala, solamente las públicas.

Incluso el neoliberalismo usa, por ejemplo, argumentos tan peregrinos como que la gente está sobrecualificada, que no tiene cabida en un modelo productivo, pero nunca se cuestiona el modelo productivo. Claro, un modelo productivo de turismo y construcción, ¿qué cualificación necesita? Entonces ¿el problema es que la gente está demasiado formada?, no, el problema, señorías, es el modelo productivo, que es incapaz de absorber la mano de obra cualificada. Insistimos aquí en este problema. No es que la gente esté demasiado preparada, es que el modelo productivo no cambia ni a la de tres, ni con una crisis como la que hemos tenido.

Luego tenemos una financiación, señorías, ridícula. Por ejemplo, en la Universidad de La Laguna tenemos una pérdida acumulada de 138 millones. Empezamos en el 2009 con un presupuesto de 162 millones y actualmente tenemos 137 millones, pero es que se ha ido acumulando una pérdida... de 138 millones tenemos acumulada. Es decir, que hemos estado un año sin presupuesto en la Universidad de La Laguna, por ejemplo, un año sin presupuesto. De ahí que estemos constantemente ahorrando. Por ejemplo en seguridad, por ejemplo la Universidad de La Laguna está cerrada durante muchísimo tiempo al año porque no podemos mantener los contratos de seguridad. Ya está bien de estar pasando penurias, porque no hay una ley de financiación, como decía el señor diputado de Nueva Canarias, que dé estabilidad a la universidad. Necesitamos urgentemente una ley de financiación que dé estabilidad al funcionamiento regular.

Luego están las condiciones de permanencia. No me da tiempo, pero en Canarias tenemos las condiciones de permanencia más duras de todo el Estado español.

La señora PRESIDENTA: Gracias, señor Déniz.

Continuamos. El Grupo Popular, señor Jorge.

El señor JORGE BLANCO: Gracias, señora presidenta. Señorías, señora consejera.

Una vez más la política universitaria de Canarias vuelve a ser tema de debate en este Parlamento. Se hace a petición del grupo parlamentario que precisamente sustenta a este Gobierno y ha sustentado a gobiernos anteriores. La pregunta es cuál es la verdadera utilidad de esta comparecencia. ¿Quizás lo que se pretende no es más que dar a conocer las virtudes de este Gobierno en apenas un año de legislatura? ¿O de lo que se trata es de poner en evidencia el desastre en materia universitaria del Gobierno anterior?

Cualquiera que sea el motivo, señora consejera, el hecho es que estamos aquí, y estamos para hablar de un asunto vital, capital, de vital importancia para los canarios y para el desarrollo futuro de nuestra comunidad autónoma. Lo importante y lo verdaderamente trascendente sería que tras esta comparecencia, señora consejera, todas las fuerzas políticas presentes en esta Cámara dejáramos a un lado las diferencias políticas de unos y de otros y seamos capaces de aunar esfuerzos para trabajar de la mano en la potenciación definitiva de nuestras dos universidades canarias. Eso de verdad que sí sería significativo y verdaderamente útil.

Durante muchos años hemos vivido de gestos pero de pocas realidades. De muy buenas intenciones pero, de alguna manera, parece que a este barco, el barco universitario, le costara zarpar definitivamente.

Le proponemos una cosa desde el grupo parlamentario: representantes de todos los grupos, representantes del Gobierno, de ambas universidades, de profesores, de alumnos, del sector empresarial y del sector de los sindicatos más representativos, hagamos entre todos un foro de debate para analizar las carencias reales con las que cuenta nuestra universidad, analicemos las dificultades de implementación de nuestras políticas en materia educativa y propongamos un modelo, no para los próximos cinco años, ni siquiera para los próximos diez, me refiero para los próximos veinte o treinta años.

Se trataría de un foro multidisciplinar, señora consejera, que permita sacar una foto fija de la situación real en materia universitaria de Canarias y hacer una proyección de lo que queremos que sea en el futuro, a partir de ahí, el modelo universitario, y ponernos a trabajar para conseguir esos medios y esos recursos.

En definitiva, señora consejera -voy terminando-, les invitamos desde el Grupo Popular a valorar esa conveniencia, la conveniencia de fijar una política en materia universitaria capaz de perdurar en el tiempo, que permita impulsar la competitividad y el nivel de excelencia educativa en nuestras dos universidades canarias, que permita adaptar los currículum y la oferta formativa a la realidad del entorno, que sea un verdadero motor para nuestra sociedad y para la economía del archipiélago. Si somos capaces de ello, desde luego las generaciones futuras estarán agradecidas.

Gracias.

La señora PRESIDENTA: Gracias, señor Jorge.

Por el Grupo Socialista, señora González.

La señora GONZÁLEZ GONZÁLEZ (doña Ana): Gracias, señora presidenta. Señorías.

Todos sabemos que el nivel económico y la incidencia de la precariedad determinan las posibilidades de estudiar y cómo hacerlo. En Canarias el 54 % de los alumnos y alumnas que cursan estudios en las universidades reciben algún tipo de beca, mientras que la media en el resto del Estado es del 26 %. Esta es la evidencia de las dificultades de muchos alumnos y alumnas para acceder a la enseñanza superior.

Desde el Grupo Socialista nos congratulamos de la medida que incorporará la Consejería de Educación y Universidades el próximo curso, cuyo objetivo no es otro que ayudar a las familias a afrontar el coste de los estudios de sus hijos mediante la posibilidad de abonar en seis pagos la matrícula universitaria, así como que se mantendrán congeladas las tasas universitarias. Por lo tanto, sí a la matrícula fraccionada seis veces, sí a la congelación de las tasas, pero, señora consejera, no a la gestión de las becas universitarias. No compartimos su gestión; no puede ser que durante este mes de junio se publiquen los listados de los alumnos con derecho a beca, las reclamaciones y posteriormente el abono de la cuantía.

Señora consejera, el pasado curso 2014/2015 -y escuche bien, señor Jorge- el pago de las becas se efectuó durante el primer trimestre del año, sin esperar a la resolución de la convocatoria estatal, y eso lo hizo el Gobierno de la pasada legislatura. Por lo tanto, hay que hacer todo el esfuerzo posible para mejorar estos retrasos. Los alumnos y las alumnas y sus familias son los perjudicados.

Hablemos de financiación. Es importante un marco estable de financiación para las universidades canarias, algo más que un acuerdo verbal que ofrezca una cierta garantía de futuro y que permita conocer a las dos universidades el dinero con el que cuentan en los próximos años. Eso sí, primero tiene que haber un acuerdo entre el Gobierno y las universidades. Y por eso mi pregunta, señora consejera: ¿ya está cerrado ese modelo de financiación que su director general de Universidades anunció para antes del mes de junio y que debería ser una realidad para el 2017?

Infraestructuras. Todos sabemos que las universidades se hacen mayores, así lo refleja el estado de algunas de las infraestructuras más antiguas, que presentan un importante deterioro. Obras que algunas son urgentes y muy ligadas a la seguridad de las personas y de los propios edificios. Y en este sentido, señora consejera, ¿ya se ha aprobado la propuesta o ya está en marcha el plan de obras?

Para ir terminando, el plan para recuperar talento a nivel autonómico. Se ha propuesto por las dos universidades canarias con el fin de fichar a mentes brillantes para que aporten su inteligencia en determinadas áreas. ¿Ya está en marcha o para cuándo saldrá dicho programa? ¿Con cuántas plazas contará?

Una última consideración, señora consejera, y con el fin de que la crisis termine en las dos universidades públicas de las islas, y pensando ya en los presupuestos del 2017, que la Consejería de Educación haga un esfuerzo para que se aumente la partida presupuestaria destinada a las universidades, puesto que el incremento de las partidas del 2016 solo ha servido para actualizar los salarios del personal.

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Gracias, señora González.

Por el proponente, la señora Beato.

La señora BEATO CASTELLANO: Gracias, presidenta.

Señor Jorge, agradecemos su voluntad pero desde luego hay que reconocer que el Partido Popular no ha contribuido en absoluto a dar estabilidad a nuestras universidades ni a mejorar nuestro sistema público educativo. En el 2012, un real decreto de medidas de racionalización del gasto público supuso un incremento desmesurado de los precios de las matriculas universitarias, llevándolas al mayor nivel de toda su historia. A ello se unió una injusta política de becas, porque el Estado disminuyó de manera drástica las partidas destinadas a las becas del ministerio. Esto dificultó que muchos estudiantes tuvieran problemas para el acceso a los estudios universitarios y provocó un inaceptable incremento de las desigualdades. Canarias tuvo que aplicar este decreto porque era legislación básica, pero resulta claro el compromiso del departamento de educación con la congelación de las tasas universitarias, porque seguimos siendo de las comunidades más bajas de toda España. Unas tasas que se mantienen congeladas por cuarto año consecutivo.

Nos parece positivo que escuchara y dialogara con las asociaciones de estudiantes sobre la conveniencia de flexibilizar el pago de las matrículas, incorporando para el próximo curso un sistema más flexible de financiación que ayude a las familias a afrontar el coste de los estudios de sus hijos. Podrán abonarlas en seis pagos -recordemos que ahora el máximo está en cuatro pagos-, lo que hará más asumible el abono en el futuro.

Canarias destaca por ser la segunda comunidad que más recursos dedica a becas por estudiante. Solo tenemos por delante al País Vasco. Y, señorías, hay muchas comunidades autónomas que al contrario de Canarias no destinan ni un solo euro a becas para complementar las del ministerio.

Consejera, sin duda hay que continuar los esfuerzos para que los talentos no se queden por el camino y el Gobierno está haciendo un esfuerzo presupuestario para ello, que es evidente, que supera este año los 10 millones de euros, repartidos en las modalidades de residencia, transporte, compensatorias y tasas de matrícula, a las que añadimos los cuatro trayectos aéreos gratuitos a los que se comprometió el presidente en el debate de la nacionalidad. Hay que seguir trabajando para mejorar la gestión de las becas y reducir los plazos de resolución, y seguir insistiendo para que el ministerio agilice también sus trámites, porque los retrasos del ministerio actúan con un efecto dominó y retrasan las gestiones de Canarias.

La falta de financiación estatal ha impactado en nuestras universidades públicas. Mire, aquí también el Partido Popular...; hay que recordar que desde el año 2012 las transferencias del ministerio cayeron un 63 %. El Gobierno de Canarias ha mantenido con dignidad los gastos de funcionamiento de ambas universidades y ahora es el momento de revisar el modelo de financiación para darle una mayor estabilidad y flexibilidad.

Los contratos programa han cumplido su papel pero la crisis y la falta de financiación han mermado su operatividad. Hay que analizar cómo mejorar el sistema y encontrar un nuevo modelo que se adapte a las nuevas necesidades.

Nos decía que el Gobierno está dando pasos para cumplir el compromiso del presidente con los rectores, y es verdad. Hace unas semanas se publicaba en el Boletín Oficial de Canarias el convenio de colaboración entre la consejería, la Universidad de Las Palmas y la Fundación General de la Universidad de La Laguna para la elaboración de un estudio sobre el modelo de financiación para las universidades públicas canarias, con un periodo de planificación a largo plazo, que respete los principios básicos de eficiencia, suficiencia, equidad, transparencia y responsabilidad social.

Resulta positivo que las universidades sean copartícipes activas en el proceso de búsqueda de ese modelo para llegar a una solución consensuada que sea asumida por todos como un compromiso compartido, para establecer un horizonte temporal amplio de suficiencia y estabilidad financiera que permita tanto al Gobierno como a las universidades el desarrollo ordenado de sus políticas a largo plazo; definiendo unos criterios de asignación de recursos basados en la obtención de resultados contrastables en todos los ámbitos de la actividad universitaria, desde la docencia, la investigación, el desarrollo y la innovación; y la adecuación de los servicios universitarios a las demandas sociales, mediante la reorientación de la oferta docente, la potenciación de la formación continua y la transferencia tecnológica y la mejora de la calidad.

La estabilidad financiera permitirá a los rectores planificar a largo plazo las inversiones de las universidades como entes autónomos. Estamos seguros de que el Gobierno encontrará la fórmula para la financiación de las infraestructuras que tanto esfuerzo costó levantar y que ahora necesitan mantenimiento o reparación.

Y establecer mecanismos para estimular los procesos de transferencia de conocimientos, mejorando la canalización de todo el conocimiento que se genera hacia el desarrollo social y económico del archipiélago. Y además garantizar el nivel de financiación en un estándar de calidad investigadora, potenciando su participación para el desarrollo estratégico de Canarias conforme a la Estrategia Europa 2020 para un crecimiento inteligente, sostenible e integrador y de acuerdo a la RIS3 de Canarias, en coordinación con la Agencia de Investigación e Innovación. Incentivar también el Campus Atlántico Tricontinental de las universidades canarias como una apuesta geoestratégica tricontinental para convertirse en el centro atlántico referente, catalizador del talento y de proyectos docentes de investigación, innovación y transferencia para el eje Europa, África y Latinoamérica.

El rendimiento de las universidades también tiene que ser objeto de análisis para encontrar soluciones que favorezcan reducir las tasas de abandono, los cambios de título y la duración real de las carreras. Esto está relacionado con una oferta atractiva de títulos y una apuesta por esa formación continua. El modelo debe ofrecer un conjunto de objetivos de calidad y eficiencia exigibles que sean medibles. Por eso la importancia de la Agencia Canaria de Calidad Universitaria y Evaluación Educativa. Por eso es muy oportuna la reestructuración que está haciendo en la agencia para potenciarla como herramienta para la garantía de la calidad del sistema universitario, en el marco de los criterios y directrices establecidos para la calidad en el Espacio Europeo de Educación Superior.

Desde el Grupo Nacionalista Canario esperamos con interés los resultados del diagnóstico sobre la situación actual de las universidades y de cómo se plasmen en criterios y objetivos medibles para el posterior diseño de la estructura del nuevo modelo de financiación. Nosotros no nos conformamos exclusivamente con leer los rankings, con que nuestras universidades sean excelentes exclusivamente por aparecer o no en los rankings. A lo que aspiramos es a contar con unas estructuras flexibles entre la universidad y la sociedad en la que se asienta que fomenten la iniciativa y la creatividad. Las universidades canarias cuentan con las condiciones para basar parte de su estrategia no solo en la impartición de conocimientos sino en su capacidad para ser útiles a la sociedad en la que están integradas y convertir esa formación y ese conocimiento en una verdadera oportunidad para el desarrollo de Canarias y para nuestro entorno geográfico más cercano.

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señora Beato.

Para cerrar esta comparecencia, señora consejera.

La señora CONSEJERA DE EDUCACIÓN Y UNIVERSIDADES (Monzón Cabrera): Gracias, señora presidenta. Procuraré no agotarlos todos, pero, bueno, no lo sé.

Por empezar, intentando dar respuesta en la medida de lo posible a las intervenciones, tengo que empezar por el portavoz del Partido Popular, que, bueno, pues, la verdad es que nos alegra que últimamente, en materia educativa, todas las intervenciones del Partido Popular vayan en la línea del pacto, del consenso, del debate, porque realmente eso significa que si tienen oportunidad de gobernar cambiarán en el Estado la forma de llevar las cosas, por lo menos en educación, porque no ha sido precisamente la tónica general y la práctica del Partido Popular en esta pasada legislatura, y a la propia Lomce me remito y a las consecuencia de la propia Lomce me remito. Así es que yo acepto esa invitación y además le invito a que haga todo lo posible por que, si gobiernan en el Estado, esa sea la tónica general del Partido Popular.

A la portavoz del Partido Socialista tengo que decirle que, bueno, en aquellas cosas en las que coincidimos, pues, se agradece y en las que no coincide, como en el pago de las becas, debe haber algún error, porque este año no se han pagado las becas más tarde que el año anterior. Entonces yo le ruego que revise la información y revise los datos porque estamos en los mismos tiempos. No se pagaron todas las becas en el primer trimestre como usted apuntó, pero estoy segura de que ese error lo podrá comprobar usted misma.

Señor Campos, habla de investigación e innovación. Compartimos, este Gobierno ha considerado mucho más eficiente para el desarrollo de la universidad y el traspaso de su conocimiento al sector productivo, al que usted se refería también, que las políticas relacionadas con la investigación y la innovación se gestionen a través de la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información -la Aciisi-. Es esta agencia la responsable de detectar las oportunidades de desarrollo de nuestra economía en los sectores tecnológicamente más avanzados y tiene como misión aunar esta detección de oportunidades con el trabajo que realizan las instituciones académicas. De hecho, uno de los objetivos específicos de la Estrategia de Especialización Inteligente, conocida como la RIS3, es el desarrollo del capital humano y la atracción de talento de excelencia para ayudar a vertebrar el sistema de I+D+i en Canarias.

Para alcanzar estos fines, la agencia propuso 300 000 euros en el 2016 para la contratación laboral de investigadores nacionales y extranjeros con una trayectoria destacada en centros de I+D y con la finalidad de su incorporación a los grupos e institutos de investigación de las dos universidades públicas canarias, con la mitad del presupuesto destinado a cada una de ellas. Además, para 2016 cuenta con 1 867 000 euros destinados a una nueva convocatoria de subvenciones para la realización de proyectos de I+D+i para grupos de investigación y para empresas, lo que repercutirá en la mejora general de Canarias en este aspecto.

Por otra parte, la agencia acumula un total de 19,2 millones de euros para la investigación, el desarrollo tecnológico y la financiación de infraestructuras científico-tecnológicas, de los que los más específicos para el área de la que hablamos son dos millones y medio para promover la formación de investigadores y obtener habilidades relacionadas con la ciencia, es decir, para contratos predoctorales y ayudas para estancia y gastos de viaje; 500 000 euros para fortalecer la investigación de excelencia de las universidades canarias mediante la consolidación del Campus Atlántico Tricontinental. Se trata, señorías, de una apuesta para convertirse en el referente de talento y de proyectos docentes de investigación, de innovación y transferencia para el eje Europa, África y Latinoamérica.

La señora Mendoza y el señor Déniz hacían referencia a los rankings. Efectivamente, hacer caso o atender a los rankings tiene una doble consecuencia. Cuando hablamos de rankings o clasificaciones, lo primero que hemos de hacer es fijarnos en los indicadores escogidos para definir cada uno de los parámetros que se emplean en las comparaciones. Con esto no queremos quitar validez a uno o a otro pero sí llamar la atención sobre la importancia de saber a qué nos referimos cuando analizamos este tipo de trabajos y que nos llevan en muchos casos, como decía el señor Déniz, a tomar decisiones o a plantear cuestiones en base a ello.

Con respecto al ranking del BBVA, podemos inferir que tenemos unas universidades normales para los indicadores sociales y económicos de Canarias. Podríamos tener unas universidades excelentes y no es así. Queda un camino por recorrer que intentaremos ir mejorando con el nuevo modelo de financiación que estamos discutiendo. Pero los datos de este ranking nos sitúan con las universidades de las comunidades autónomas que tienen las mismas dificultades que nosotros. Las dos universidades canarias se sitúan en el octavo de los once bloques que tiene el ranking, igualadas con universidades como la de Burgos, Castilla-La Mancha, Extremadura, Jaén, La Rioja o León y solo una décima de punto por debajo de otras universidades también históricas, como la de Huelva, Málaga, Oviedo, Valladolid, Rey Juan Carlos o la Universidad de La Coruña. El ranking y los indicadores utilizados para su elaboración nos muestran que las ocho primeras son universidades como las de Barcelona y Madrid fundamentalmente más la Universidad de Navarra y la Politécnica de Valencia. Es innegable que es en Madrid y en Barcelona donde se encuentra la mayoría de los recursos públicos para la investigación y las sedes de las grandes empresas que desarrollan I+D+i, por lo que tienen un acceso más directo a las sinergias y a los fondos que se generan. No es tampoco casualidad que la siguiente universidad en este ranking es la de Cantabria, la comunidad mejor financiada, y que las nuestras estén en la parte de las comunidades peor financiadas, puesto que partimos de una situación de clara desventaja al recibir la comunidad autónoma 700 millones de euros menos de financiación estatal de lo que le correspondería cada año.

Pero además observemos algunos indicadores, como el ranking de docencia. Tal y como afirmé antes, muchas de esas clasificaciones dependen de los parámetros que se elijan. En el caso del U-Ranking, entre los indicadores de docencia hay elementos que no son puramente docentes, como la capacidad de atracción de estudiantes nacionales o el porcentaje de estudiantes extranjeros. Estos son dos de los cuatro grupos indicadores de docencia para este ranking y parece razonable entender que nuestra posición de insularidad y lejanía no hace especialmente atractivas o económicamente accesibles nuestras universidades a estudiantes de la Península o de fuera, que tienen mucha más facilidad para ir a estudiar a cualquiera de las universidades de Madrid o Barcelona, más cercanas y con traslados más económicos.

El otro indicador, además de los vinculados a las tasas de éxito, a la capacitación de atracción y a la internacionalización, es el relacionado con el número y porcentaje de profesores doctores, lo cual, si bien es muy importante en la universidad, no es directamente un indicador de calidad docente, ya que el hecho de finalizar la tesis doctoral no otorga una especial cualidad pedagógica. Y la prueba de que estos indicadores marcan diferencias es que la Universidad de La Laguna, por ejemplo, ocupa el puesto número 16 de 80 universidades españolas en el prestigioso ranking de Shanghái, mientras que en el U-Ranking se relega su posición hasta el 46.

Por cierto, que otro ranking, como es el de Everis, sitúa a la universidad tinerfeña como la segunda en empleabilidad de sus titulados y tituladas en humanidades, solo por detrás de Santiago de Compostela.

Con esto, señorías, no queremos decir que haya que hacer caso omiso de este tipo de estudios ni que no debamos aspirar a la excelencia, a mejorar nuestro éxito educativo o a escalar posiciones también en este ranking. Lo que decimos es que hay que alejarnos del titular de que las universidades están en el puesto equis de tantas y profundizar en el contenido real de estos estudios. Por ejemplo, hay que reconocer como un problema a trabajar el que las tasas de éxito de nuestras universidades estén por debajo de la media estatal. Y es sobre cuestiones como estas sobre las que las universidades trabajan ya para encontrar soluciones y el Gobierno quiere incluir en el modelo de financiación. Un modelo para el que, como he dicho, hemos elaborado un completo sistema de indicadores sobre el que podamos definir el mejor sistema de distribución de fondos posible.

Muchas gracias y buenas tardes.

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, consejera.

Señorías, hemos concluido la comparecencia de la consejera de Educación. Hemos cumplido el programa que nos habíamos propuesto para hoy. Mañana reanudamos a las nueve de la mañana.

Muchas gracias.

(Se suspende la sesión a las veintiuna horas y dos minutos).