Diario de Sesiones 160, de fecha 26/3/2019
Punto 57

9L/PL-0010 DICTAMEN DE COMISIÓN. DE LA COMISIÓN DE EMPLEO, POLÍTICAS SOCIALES Y VIVIENDA, SOBRE EL PROYECTO DE LEY DE SERVICIOS SOCIALES DE CANARIAS.

La señora PRESIDENTA: Y pasamos al siguiente punto del orden del día.

Señorías, como habíamos acordado, corresponde ahora la ley... que la encuentre, de asuntos sociales, ya lo sé, pero la estoy buscando aquí, en el guion, que es lo que no encuentro. En cualquier caso, mientras aparece, quiero saludar a todos los colectivos de la Plataforma del Tercer Sector, especialmente a su presidente, al señor Gerardo Mesa, al Colegio Profesional de Trabajadores Sociales de Santa Cruz de Tenerife y de Las Palmas y también a las personas integrantes de la Comisión de Empleo, Sanidad, Bienestar Social de la Fecam y también al viceconsejero de Asuntos Sociales, que también lo veo y saludo. Muchas gracias, estimado vicepresidente.

Correspondería ahora ver el proyecto de ley 10, el dictamen de comisión, sobre el proyecto de Ley de Servicios Sociales de Canarias. Comienza... Un momento, por favor. (Pausa).

Señorías, enmiendas vivas quedan del Grupo Popular y del Grupo Podemos, por este orden. En primer lugar, para la defensa de estas enmiendas... ¿Las van a defender o pasamos a votarlas? ¿Pasamos a votarlas directamente? Muy bien, señorías. Pues entonces, si no hay intervención, pasamos a votar. Llamo a votación, señorías. (Suena el timbre de llamada a la votación. Pausa). (Rumores en la sala).

Señorías, disculpen. Vamos a ver, hay dos grupos enmendantes, el Grupo Popular, y yo llamé a votación, o sea, que no corresponde ya... -siéntese, señora Del Río, yo llamé a votación antes de tiempo-. El Grupo Popular tiene enmiendas, entiendo que no quiere hacer intervención porque me ha dicho que no. Grupo Podemos, ¿quiere hacer intervención para la defensa de las enmiendas? ¿Sí?, pues tiene... (Comentarios desde los escaños).

Dígame, señora Luzardo. Yo le estoy diciendo a usted, señora Luzardo, si quiere defender la enmienda que tiene. Usted me ha dicho que no. Si cambia de opinión, yo le doy la palabra, pero yo le he dicho a usted si quiere defender la enmienda y me ha dicho que no.

El señor JORGE BLANCO (Desde su escaño): Señora presidenta, para aclarar el debate.

¿La pretensión de la Presidencia es dar la palabra para la enmienda y después dar un turno de intervención a los grupos?

La señora PRESIDENTA: No, vamos a ver, nosotros hemos hecho como en todas las iniciativas legislativas, intervienen en primer lugar, por un tiempo de diez minutos, los grupos que tienen enmiendas. Yo le he preguntado, el primer grupo que tiene enmiendas es el Grupo Popular, y me dijo que no. Si hay un malentendido pues quiere intervenir, tiene la palabra el Grupo Popular por tiempo de diez minutos. ¿Correcto?

La señora LUZARDO ROMANO: Muchas gracias y buenas tardes. Gracias, señora presidenta. Señora consejera, consejero, señorías.

También permítame, en primer lugar, saludar a todos los invitados que han querido acompañarnos en un día histórico como este, en el que por fin Canarias contará con una nueva ley de servicios sociales que sustituya a la actual norma que, tras treinta y dos años de vigencia, se había quedado manifiestamente obsoleta. Y he dicho "por fin" porque, después de varios gobiernos, de múltiples anuncios y de varios borradores, parecía que nunca iba a llegar a un pleno este proyecto de ley. No llegó cuando lo anunció la exconsejera Rojas en el año 2012, tampoco llegó en el 2015 como prometió el señor Clavijo en su discurso de investidura y hemos tenido que esperar a 2018 y trabajar contrarreloj para poder aprobarla en el tiempo de descuento de esta legislatura, en el último pleno.

Y es que cuando llegó la decepción no pudo ser mayor. Teníamos un texto malo de solemnidad, que gracias a la responsabilidad de todos los grupos parlamentarios y a un arduo, intenso y apasionado trabajo en la ponencia le hemos dado la vuelta como un calcetín. Es increíble que se hayan necesitado dos legislaturas para elaborar un texto tan pésimo, tan confuso y sin la ficha financiera correspondiente para ponerlo en marcha.

Señorías, si algo estaba claro es que ni para este Gobierno ni para el anterior era una prioridad elaborar una nueva ley de asuntos sociales acorde a los nuevos tiempos y que diera respuesta a las nuevas necesidades de la sociedad y la prueba es que ha estado a punto de no salir en esta legislatura. Cuando se legisla deprisa y corriendo y con bastante desgana, lo normal es que el resultado no sea nada satisfactorio. Cuando no se reconoce la realidad social de Canarias, cuando se legisla de espaldas a los ciudadanos y cuando no se quieren reconocer los síntomas, es difícil acertar con el diagnóstico. Por eso lo normal es que el resultado no sea nada satisfactorio y lo normal es que no se dé una respuesta adecuada ni se resuelvan los verdaderos problemas sociales que afectan a los ciudadanos, y eso, señorías, tendremos que reconocer, si somos sinceros, es lo que pasó con el texto que el Gobierno de Canarias envió al Parlamento.

Recibimos un proyecto de ley que no servía para hacer frente al desolador panorama de nuestros servicios sociales. Unos servicios sociales irrelevantes, a la cola del país, con las mayores listas de espera para el reconocimiento de la dependencia y la discapacidad, con una de las menores inversiones por habitante y año del país y un nivel muy bajo de cobertura efectiva de prestaciones y servicios. Un proyecto de ley que daba la espalda a la realidad social de las islas, no daba respuesta tampoco adecuada a los verdaderos problemas de los canarios; un proyecto de ley farragoso, que no eliminaba la maraña burocrática ni dejaba claro qué servicios se iban a prestar, quién los iba a prestar, cuántos costaría prestarlos y, sobre todo, cómo los iban a financiar.

Nuestro reto: definir unos servicios sociales que den respuesta a casi la mitad de la población, garantizar los derechos de las personas más necesitadas y cambiar la imagen de unos servicios sociales para convertirlos en generadores de riqueza en lugar de consumidores de recursos. Para ello tuvimos que enmendar el 80 %, 90 enmiendas presentó mi grupo, porque era un brindis al sol esta ley, sin la ficha financiera, sin el catálogo de servicios y prestaciones y cuya plena efectividad se demoraría ante la maraña burocrática que se planteaba.

Durante la tramitación, nosotros pusimos una serie de condiciones: un compromiso claro y definido de financiación, un catálogo de servicios y prestaciones, la clarificación del marco competencial, una nueva prestación canaria de inserción sin límites temporales y de revisión periódica para favorecer la auténtica integración de sus beneficiarios, el pleno desarrollo de la atención temprana y un marco de garantía para la concertación social con las organizaciones no gubernamentales. En definitiva, pretendíamos hacer viable esta ley desde el mismo momento de su aprobación, incluyendo en la norma todos los servicios y prestaciones, simplificando el desarrollo reglamentario y reduciendo los plazos para su elaboración. Y por lo que respecta al Partido Popular creo que lo hemos conseguido. Hemos logrado, con nuestras aportaciones y las del resto de los grupos parlamentarios, una ley de las más relevantes y de mayor trascendencia de las dos últimas legislaturas. Por fin, Canarias puede contar con una ley de última generación, podemos contar con una de las leyes sociales más avanzadas del país por su universalidad y reconocimiento de derechos, y esto, señorías, es un trabajo de todos. Por eso, esta no es la ley del Gobierno, no es la ley del señor Clavijo, es la ley del Parlamento de Canarias. (Aplausos).

Después de un arduo, intenso y apasionado debate en los trabajos de la ponencia hoy tenemos una novedosa ley de servicios sociales. Todos los grupos de esta Cámara hemos hecho un gran esfuerzo para llegar al consenso. Hemos hecho un ejercicio de responsabilidad y generosidad renunciando a algunos de nuestros planteamientos iniciales en beneficio del interés superior, del interés general de todos los canarios, porque es una norma prevista para no dejar a nadie sin recursos, para salvar a las personas o a las familias, porque en algún momento de nuestra vida podemos necesitar cubrir nuestras necesidades más básicas.

Estos servicios sociales que se consagran son un derecho subjetivo y universal, forman parte de lo que se denomina el "cuarto pilar del Estado del bienestar". Tienen como finalidad la prevención, la atención o la cobertura de las necesidades básicas para que las personas puedan desarrollar una vida digna. Hoy podemos hablar de un antes y un después en los servicios sociales de Canarias, que se iniciará a partir de la publicación en el Boletín Oficial de Canarias y en el BOE de este texto normativo.

Como ya he dicho, mi grupo parlamentario puso una serie de condiciones para dar el voto favorable a esta norma. Estábamos convencidos, señorías, de que no se podía aprobar esta norma sin una ficha financiera clara, concreta, porque no queríamos que las expectativas que hemos generado en los ciudadanos, en los profesionales y en el tercer sector se diluyeran como un azucarillo, tal y como sucedió con la ley de la dependencia, que no conllevó financiación. Por eso nuestro planteamiento en los trabajos de la ponencia fue muy exigente, porque a nuestro juicio la ficha financiera era absolutamente imprescindible para garantizar la viabilidad de esta ley. Finalmente, cuando esté en vigor todo el desarrollo de la ley, con el catálogo, estaremos hablando de un presupuesto de entre 900 y 1000 millones de euros. Estaremos colocados al mismo nivel que otras comunidades autónomas similares a la nuestra. Esta fue nuestra pretensión.

Señorías, el texto inicial no contaba con los instrumentos de planificación, ni un plan estratégico de servicios sociales, ni un mapa de servicios, no definía al profesional de referencia, que es el trabajador social, y, finalmente, nosotros lo que hemos decidido, yo creo que con muy buen criterio, es desarrollar solo un catálogo, muy amplio, con todos los servicios y las prestaciones, con una definición de cada uno de ellos, para que cada canario sepa exactamente a qué nos tenemos que atener. Ahora bien, esto no significa que todos los servicios y las prestaciones estén en vigor mañana, sino será después de seis meses y una vez que lo establezca el decreto que lo desarrolla.

Nos hemos dejado la piel en este proyecto de ley. Tiene ficha financiera, clarifica las competencias de cada administración, resuelve de una vez por todas la financiación de los servicios sociales de atención primaria que aplican los ayuntamientos. Será en un plazo de doce años, quizás un periodo largo, pero, finalmente, por lo menos se hará; se financiará, como mínimo, el 40, el 50, el 60 % de estos servicios de atención primaria en los ayuntamientos según el número de habitantes. Conseguimos también que se aprobara y consensuara la enmienda de mi grupo parlamentario sobre la PCI, ampliando la limitación actual de los veinticuatro meses. Señorías, entre el mes de enero y febrero, seiscientos diecisiete perceptores han dejado de percibir la PCI porque han alcanzado el límite de los veinticuatro meses. Esto es lo que queremos evitar. Además está incluida en la disposición adicional primera la propuesta del Partido Popular de aprobar en un año por el Gobierno un plan de inclusión social para combatir la pobreza y un plan específico para erradicar la pobreza infantil.

El Gobierno actual nombró a un comisionado como la gran estrella de esta legislatura; sin embargo, no ha servido absolutamente para nada, porque no ha hecho el plan y la ley que ha enviado del tercer sector, con cuatro páginas, se ha quedado aparcada y nosotros mismos hemos presentado un texto alternativo a la ley del tercer sector. La verdad es que la inversión en el comisionado ha hecho aguas.

Señorías, hemos querido resaltar también el papel que deben desempeñar las entidades del tercer sector y la iniciativa privada. Es obvio que en este asunto los distintos grupos parlamentarios defendemos opciones diferentes, unos pretenden que se desarrolle solo el papel de las administraciones públicas y otros respaldamos el papel protagonista, no subsidiario, que deben desempeñar las entidades sin fines de lucro, que además cuentan con un voluntariado enriquecedor. Esta es la enmienda viva que nosotros mantenemos, queremos eliminar de la exposición de motivos el término "subsidiario".

Nosotros defendemos también la participación de estas entidades, como Cáritas, Cruz Roja, el Cermi, que engloban la iniciativa social, porque creemos que tienen experiencia y han contribuido a desarrollar nuestros servicios sociales y llegan a donde la Administración pública no alcanza.

Hay un título dedicado todo a lo que es la gestión directa e indirecta y a partir de ahora yo creo que va a haber un cambio, especialmente porque por fin las entidades de iniciativa social van a poder suscribir conciertos con las administraciones públicas por un plazo de siete años, como máximo, y también van a poder recibir anticipos del 75 % desde el punto de vista anual. Esto es muy importante, porque así las entidades del tercer sector podrán también gestionar mejor sus proyectos y sobre todo van a dar estabilidad también a su personal.

La señora PRESIDENTA: Señoría, un minuto y concluya.

La señora LUZARDO ROMANO: Vale, vale, ya concluyo.

Una de las novedades, una de las novedades de esta ley es que por fin también hemos incluido todo lo que tiene que ver con el patrocinio, mecenazgo y partenariado.

Quiero ahora ya centrarme en el capítulo de agradecimientos para no dejar a nadie atrás, y quiero de verdad agradecer a todas las entidades que se reunieron con nosotros, especialmente a las entidades del tercer sector, Adepsi, Plena Inclusión, a los colegios profesionales, trabajadores sociales, pedagogos, psicólogos, educadores, a todos los que nos ayudaron a presentar las enmiendas. Mi agradecimiento también muy especial a los ponentes, uno a uno, Melodie, Luis, doña María, doña Teresa, que fue algo más que una ponente, y doña Elena Luis, que espero que siga en esta casa por su papel conciliador, tan necesario para llegar al consenso.

También quiero agradecer a mi grupo parlamentario por esta oportunidad que me ha dado y también a todos los ponentes por la paciencia que tuvieron aguantándome la pasión que puse en defender la posición de mi grupo. Muchas gracias, portavoz.

Y, señorías, creo que esta es la...

La señora PRESIDENTA: Señora Luzardo, termine.

La señora LUZARDO ROMANO: Gracias, muchas gracias.

Y, de verdad, creo sinceramente que con la aprobación de esta ley hemos puesto la guinda, si me permiten la expresión, a una legislatura histórica para nuestra comunidad. Junto con la aprobación del nuevo Estatuto de Autonomía de Canarias y la actualización de nuestro Régimen Económico y Fiscal, hemos dado un paso de gigantes. Podemos decir que dejamos a Canarias mejor preparada para afrontar con garantías los retos que el futuro nos tenga preparados.

Muchas gracias.

(Aplausos).

La señora PRESIDENTA: Turno ahora para el Grupo Parlamentario Podemos. Señora Del Río.

La señora DEL RÍO SÁNCHEZ: Buenas tardes. Señora presidenta, señoras y señores diputados, compañeros.

Creo que es mi penúltima intervención, así que voy a aprovechar para hacer una cosa: que me sobre tiempo. Creo que era uno de los objetivos que tuve durante toda la legislatura.

Voy a intentar no hablar demasiado de algunas cosas que son superimportantes de la ley pero que hay que leerla en profundidad y con diez minutos, y sabiendo que todos vamos a tocar más o menos las mismas cosas, pues, no las repetiremos. Pero sí quiero hacer, y precisamente para no escaparme en el tiempo, voy a leer, que así soy un poquito más concisa.

Agradecimiento y críticas. Vamos a empezar por las dos cosas a la vez.

Primero, decir -ya lo ha dicho la compañera Pepa Luzardo- que esta ley está aquí, no gracias a la voluntad de un Gobierno, que la propuso tarde y mal, está aquí gracias a la voluntad de un Parlamento, de todos y cada uno de los grupos parlamentarios que han representado a esta Cámara, con una enorme voluntad, con un enorme compromiso, y yo estoy superorgullosa, y mi grupo, de haber tenido la suerte de estar. Que más allá de las diferencias ideológicas, que las tenemos, que haberlas haylas, y que quedan reflejadas en esas diez enmiendas que mantenemos vivas de un total de cien, que tampoco son muchas, pero ha habido una voluntad de consenso, de trabajo, porque todo el mundo ha tenido claro qué es lo que había detrás. Y lo que había detrás era mucho más importante que nuestras diferencias, aun siéndolas, lo que había detrás eran personas en situaciones vulnerables, personas que hasta hace poco tiempo no sabían qué les correspondía y que a partir de la publicación de esta ley son sujetos de derecho de una ley, que lo más importante para mí de ella es su carácter subjetivo y que podrán decir "esto me pertenece, este es mi derecho y, si no se cumple, lo puedo demandar, porque es mi derecho". Garantizar ese derecho es un paso hacia adelante, es una vuelta realmente y un avance, bueno, después de una ley que, si en su momento no fue mala, pero tenía treinta y dos años, estaba al principio de la democracia, donde todavía muchas cosas no estaban consagradas. Estamos en otro momento y hay que agradecer y poner en valor para qué sirven los parlamentos. En más de treinta y cinco sesiones que hemos tenido, casi más de cien horas de trabajo, hemos parlamentado, hemos parlamentado y hemos llegado a acuerdos, porque de eso se trata, de parlamentar.

Y yo quiero agradecer especialmente el interés y el esfuerzo de todo el grupo que lo ha hecho posible y las quiero citar una a una, aun a costa de que nos repitamos, que yo creo que todas lo vamos hacer: a la compañera Melodie Mendoza, de la Agrupación Socialista Gomera, al compañero Luis Alberto Campos, de Nueva Canarias, a la compañera Pepa Luzardo, del Grupo Popular, a la increíble, por su especial dedicación, Teresa Cruz Oval y a la otra increíble, por su dedicación especial, Elena Luis. A todas ellas muchísimas gracias. Y no puedo dejar de nombrar a nuestro maravilloso letrado que ha hecho un papel imprescindible (aplausos). Hemos tenido la suerte con contar con don Ignacio Navarro, que además de ser un gran técnico y tener una capacidad de trabajo inmensa, tiene una actitud muy comprensiva, muy constructiva y siempre ha estado dispuesto a darnos la mejor solución técnica y dotando el... (ininteligible) con mucha paciencia y con mucha humanidad, y por todo ello y tantas horas de trabajo, de verdad, muchísimas gracias.

Y dentro también de este grupo no puedo dejar de citar a alguien imprescindible, a Margarita, que ha sido nuestra invitada de honor, que ha hecho que tantas horas de trabajo hayan sido mucho más amenas. Sin ella, desde luego, esta ponencia no habría sido igual, ya se lo digo yo.

También agradecer las enriquecedoras aportaciones a todos los colectivos con los que nos reunimos, algunos aquí presentes, y que nos hicieron llegar propuestas -imposible citarlos a todos-, a los colegios profesionales y a las entidades de voluntariado, iniciativa social, que están comprometidas con la causa y apuestan por unos servicios sociales de calidad. Muchísimas gracias a todos los que están haciendo muy bien su trabajo, porque construyen también los servicios sociales.

A las compañeras y compañeros del partido, en especial a Inés, a mi compañera de comisión Noe, que ha llevado la responsabilidad de los números y de las cuentas, que a mí se me dan muy mal, y a nuestro imprescindible equipo técnico, Laura, Salva, Chano, y especialmente a Guayasén, que ha hecho un trabajo y me consta que se ha dejado muchas horas y la piel en esta ley también.

Todas y todos hemos trabajado con cariño y con responsabilidad, porque más allá -ya lo dije antes- de las diferencias ideológicas estaba la voluntad -y puedo dar fe de ello-, en todas las personas de todos los grupos...; he sido testigo de la voluntad de que cada ponencia, cada una de las personas que estaba allí estaba pensando en la gente que podría ser receptora. Recuerdo los comentarios, "¿pero esto se podrá cumplir?". Si no lo podemos cumplir, mejor no lo pongamos, no engañemos a la gente, hagamos una ley que sea de verdad creíble. Y es verdad que la ley deja muchas cosas para más adelante: que el catálogo se publicará dentro de seis meses, que hasta dentro de veinticuatro meses no tendremos algo que para nosotros es muy importante, esa renta ciudadana, que está también comprometida en la ley y que era una enmienda que teníamos Nueva Canarias y nosotros y que, bueno, no saldrá como la que hicimos Podemos, pero saldrá y será un paso hacia adelante para todas esas personas que están en exclusión social y que además cumplirá con ese artículo 24 del Estatuto.

Esta ley no viene con una varita mágica ni con recursos ilimitados y no va a cambiar todo de golpe y aún quedan muchas tareas pendientes. De cómo se gestione todo en el futuro dependerá su éxito o su fracaso y por eso es importante que el próximo Gobierno que entre entre con fuerza y con voluntad y teniendo claro cuáles son las prioridades. Prioridades que este Gobierno no tuvo en su entrada y lo dejó de manifiesto con las leyes que fueron las más importantes y a las que se les prestó mayor atención.

Hoy, de todas maneras, no vamos a hablar de ese futuro, vamos a hablar de por qué la hemos hecho y vamos a celebrar que por fin la hemos puesto en marcha. El futuro dirá cómo se lleva a cabo. Hoy nos toca celebrar y explicar qué es lo que nos ha hecho llegar hasta aquí y por qué un consenso, y qué es esto que va más allá de nosotras y de nosotros y que se lo debemos y que por eso lo hemos hecho: pues a las mujeres maltratadas, a las personas sin techo, a las niñas y niños en desamparo, a nuestras personas mayores, a las personas dependientes y a sus familias, a las niñas y niños que necesitaban atención temprana y que necesitan y no la tuvieron durante muchos años, a las madres monoparentales con hijos e hijas a su cargo, a las personas desempleadas, a las precariadas, a las desahuciadas, a las personas diversas, con cualquier tipo de diversidad funcional, diversidad afectivo-sexual, a las personas migrantes, a las personas desarraigadas, a todas las personas en exclusión social o en riesgo de estarlo... Porque lo que queremos con esta ley en Canarias es que todas y todos tengamos las necesidades básicas cubiertas y que no se quede nadie fuera. Ese es el objetivo de esta ley y por eso la hemos apoyado, y por eso, aunque tengamos diferencias con el Partido Popular y tengamos ahí si es subsidiaria o no la gestión de... Que, aunque agradecemos mucho el trabajo, nosotras reivindicamos la gestión directa y la Administración pública, porque creemos en lo público. Nosotras consideramos que el tercer sector hace un gran trabajo pero que su trabajo tiene que ser subsidiario del de la Administración pública. Esa ha sido una diferencia en la que nunca nos hemos llegado a poner de acuerdo. Respetamos, es legítimo, el derecho de cada uno, tenemos formas de pensar diferentes.

Voy a reivindicar básicamente cuáles son las cosas que me parecían más significativas. Yo ya he dicho la primera: el derecho subjetivo, sin duda alguna, es un gran avance.

Eliminar la distinción que había al principio de derechos esenciales y no esenciales, es un gran orgullo que se haya... (ininteligible) o no los derechos. Son derechos de obligado cumplimiento y van a ser derechos todos los que consideremos necesarios. En cualquier caso, la división, me parece mucho más razonable, de derechos de atención primaria y comunitaria -muy interesante el término de "comunitario" en esos derechos primarios- y derechos especializados, atención especializada para quien la necesite. Unos con la puerta de entrada en los ayuntamientos y otros a través de los cabildos y la comunidad autónoma. Nos parece que ese es un paso importante.

La responsabilidad pública, que es una de las partes por la que también mantenemos enmiendas. Nos parece que, aunque haya servicios que se atiendan a través de entidades concertadas, colaboradoras, del tercer sector, nos parece que la responsabilidad debe ser pública, puesto que esto es un derecho subjetivo y que se tiene que asumir como tal. La constitución de un sistema público de servicios sociales, es fundamental para nosotros que tenga y que asuma las responsabilidades públicas.

Los derechos y los deberes de las personas profesionales. Y aquí quiero hacer un canto y un agradecimiento a las personas que trabajan en los servicios sociales, porque nunca podremos atender bien a las personas que tenemos que ayudar si las trabajadoras y los trabajadores de los servicios sociales no están bien tratados. Buenos tratos también para los profesionales y para las profesionales que trabajan en los servicios sociales. Muy buenos tratos y evitar el síndrome del quemado; evitar las depresiones, evitar las bajas por ansiedad, evitar esa sobrecarga de trabajo y ese estrés porque se llevan los problemas a casa. Hay que cuidar para que tengamos unos servicios profesionales de calidad -y esta ha sido una de las enmiendas de la que nos sentimos también más orgullosas-, hay que cuidar muchísimo a todas las profesionales y los profesionales que trabajan en ellos...

La señora PRESIDENTA: Un minuto más, señora Del Río.

La señora DEL RÍO SÁNCHEZ: Vaya, al final no me va a sobrar.

Bueno, pues, eso, incidir en que eso nos parece algo muy importante, que es relevante y que en este caso además no solamente para quienes trabajan para la Administración pública, también debe ser algo que quede claro siempre cuando se hagan los conciertos en las distintas entidades con las que se concierte: la calidad del trabajo de las personas que hacen los servicios sociales. Y voy a poner solo un ejemplo: cuando faltan, cuando se dan de baja, cuando están deprimidos, y hablo por ejemplo en los centros de menores, no solamente están sufriendo las personas trabajadoras, hacemos un inmenso daño a las niñas y a los niños que son atendidos y que dejan de tener el contacto con personas que podrían ser sus personas de referencia, sus tutores de resiliencia, y es algo superimportante para hacer un buen trabajo.

No voy a comerme más tiempo. Agradecer y decir cuáles son las enmiendas que mantenemos vivas, están en relación con lo que les acabo de citar, y muchas gracias a todas y a todos por esto.

La señora PRESIDENTA: Gracias, señora Del Río.

Turno ahora para el resto de los grupos.

Grupo Mixto, señor Curbelo.

El señor CURBELO CURBELO: Muchas gracias, presidenta. Señor presidente del Gobierno, consejera del área, señorías.

Cuando intervenían los distintos portavoces de los grupos parlamentarios, me venía a la memoria lo que los distintos cargos públicos, especialmente los alcaldes, concejales o concejalas, presidentes de cabildo o consejeros o consejeras del área, atendemos con una frecuencia que indudablemente algunos se podrían quedar sorprendidos, se podrían quedar sorprendidos de la cantidad de gente que acude a las administraciones públicas para pedir la ayuda que creen que les asiste. Y desde luego yo, que he tenido la suerte de trabajar durante algún tiempo, les digo algunas de las cosas que uno tiene que inventar para poder salir del paso, para poder atender determinadas necesidades que tiene la población. Y la gran ventaja de esta ley, que ya pasa de ser una petición que depende de la voluntad de la Administración, lógicamente con los informes correspondientes de las trabajadoras sociales o trabajadores sociales, a ser un derecho universal para toda la ciudadanía canaria, un derecho subjetivo para todos aquellos ciudadanos canarios que tengan la necesidad.

Y les pongo algún ejemplo. Es verdad que la inmensa mayoría o buena parte de la población de Canarias es una población envejecida y, por tanto, hay muchas necesidades vinculadas a este segmento de población y comoquiera que no tenemos plazas suficientes en los centros sociosanitarios... Ahora estamos con el segundo plan, la isla de La Gomera, afortunadamente, está comenzando una obra para atender a doscientas personas mayores y en otras islas ocurre lo propio, pero ustedes imaginen que cada una de las viviendas familiares tiene que atender a una persona y es muy habitual pedir una cama articulada para ser atendida en el domicilio y que tiene que ser articulada para el fácil movimiento, para ser atendida. Bueno, pues, cuando la partida se acababa o había un inconveniente desde el punto de vista del informe social, ya no podía responder el cabildo. ¿Saben lo que inventé?, pues, el Cabildo de La Gomera inventó, seguramente algunos otros cabildos o ayuntamientos lo tienen, adquirirlas como un bien patrimonial y cederlas en uso hasta que... la persona que la necesita la pueda disfrutar y pueda ser atendida adecuadamente. Esa es una de las cosas que indudablemente tenemos que... Y no siempre, no siempre atendemos a la ciudadanía desde el punto de vista de la necesidad, porque hay tantas necesidades, como ustedes saben, que jamás podríamos atenderlas a todas. Por eso yo creo que debemos darle hoy la importancia que tiene esta ley.

Esta ley, es verdad que parece que algunos quieren quitarle paternidad de algunos o de algunas. Da igual, da igual quien la haya parido en el origen, haya sido Inés Rojas, haya sido Patricia Hernández o haya sido Cristina Valido o el Gobierno (comentarios desde los escaños). No, yo no digo...; digo Inés Rojas por situarme en la última consejera del Gobierno anterior. Pero que da igual; lo importante para mí, sinceramente, y para mi grupo, es que esta es la mejor ley que podemos aprobar hoy, la mejor ley que podemos aprobar hoy. Y los distintos grupos parlamentarios han trabajado de una forma intensa e inclusiva. Además, muy importante, aparcando las diferencias ideológicas para llegar al máximo consenso durante muchísimas horas de trabajo y mucho esfuerzo. Esa es la realidad.

Es una ley que era esperada por todos, moderna, social, destinada a asegurar el bienestar de todos los ciudadanos; es una ley de última generación y es una ley demandada para dar respuesta digna a las personas y a las familias. Y, por tanto, desde mi punto de vista, es la ley más importante que les pudiéramos dejar en esta legislatura a los ciudadanos canarios. No sin riesgos, no sin riesgos -después comentaré algunos de los riesgos-, porque las leyes no solo están en la letra escrita, sino que después hay que aplicarlas, hay que aplicarlas.

A mí me parece que la sociedad actual tiene nuevos retos. Yo recuerdo que aquí, en este Parlamento, llevamos cuatro años prácticamente hablando de las diferencias sociales que hay en determinados segmentos de la población por no poder acceder a determinados servicios que necesita. Y desde luego la sociedad actual plantea nuevos retos que es necesario atender, pues, a pesar de que la ley del año 1987 fue una buena ley, han transcurrido más de treinta años y la sociedad demanda nuevas prestaciones y, por tanto, en nada tiene que ver aquel texto de ley que se inició inicialmente, o de proyecto de ley, al que hoy se aprueba.

Nos debemos sentir orgullosos todos. Las distintas prestaciones se convierten, como decía, en un derecho universal objetivo para todos los ciudadanos canarios que lo necesiten.

Y desde luego que es el cuarto pilar del Estado del bienestar, junto con la sanidad, la educación y la dependencia.

Con esta ley el acceso a los servicios sociales se convierte en un derecho subjetivo y universal de la ciudadanía, al que podrán acceder todas las personas que lo necesitan y, por tanto, las administraciones públicas están obligadas a prestar los servicios porque los ciudadanos los pueden reclamar. Ya no ocurrirá exactamente igual que antes, a los ciudadanos les asiste el derecho y lo pueden reclamar.

Por eso, señorías, yo me alegro y quiero felicitar, lo haré después personalmente con nombres de todas las personas que intervinieron en ponencia, pero a mí me gustaría felicitar a todos los grupos, a todos los grupos parlamentarios. No la voy a descuidar, a Melodie, que también sé que participó activamente. Pero digo que me gustaría felicitar a todos los grupos parlamentarios porque han dado una lección de trabajo en democracia que no es habitual, no es habitual, el consenso, el trabajo, el esfuerzo de tanto diálogo, de tanto trabajo inclusivo y donde las ideologías quedan a un lado y se trabaja por el interés de los ciudadanos frente al de los partidos políticos, que me parece razonable.

Por tanto, yo creo que en esta ley, que consta de una ficha financiera, de un catálogo de servicios...; es necesaria la cooperación institucional más que nunca y la definición competencial de cada una de las administraciones públicas; la coordinación y la descentralización de estos servicios en los ayuntamientos y cabildos y, muy importante, la evaluación, la evaluación y la planificación en los distintos convenios. Los distintos convenios son convenios plurianuales para cuatro años. Los recursos son con los que hoy cuenta el Gobierno en el área correspondiente más 55 millones de euros cada año durante seis años consecutivos y lo que aporte cada uno de los ayuntamientos de acuerdo con los convenios. Me parece una tarea excepcional por parte de todos los grupos y también para que el Gobierno pueda atender las necesidades que hoy no atendemos de una forma integral en todas las islas.

Es una ley que pone el interés central en las personas y contribuye de forma notoria a construir una Canarias más solidaria, cohesionada y justa y que vele por las personas y las familias, que es lo más importante. Por tanto, esta ley protege especialmente a las personas, atiende y trata mejor la dependencia, a las personas con diversidad funcional, no olvida a las familias ni a los menores, a las mujeres víctimas de violencia de género, a la discriminación por razón de identidad de género, incluye la inmigración, atiende las urgencias, las emergencias... En definitiva, yo creo que a partir de ahora, con el marco normativo que vamos a aprobar, hace falta mucha voluntad política, voluntad política para que el Gobierno actúe en aplicación del contenido de la norma, los distintos ayuntamientos y los cabildos canarios.

Es verdad que la ley remite a un año, a que se apruebe el plan de lucha contra la exclusión social, y también para que en dieciocho meses se apruebe lo que es el proyecto de ley de renta ciudadana canaria, que sustituye, de acuerdo con el Estatuto, a la PCI.

Por tanto, creo que esta es una ley que nos va a permitir que Canarias avance con dignidad para atender a los que más sufren, a los que más padecen, a los que más débiles están en el ámbito de la sociedad canaria, y yo creo que eso nos debe poner orgullosos a todos, sinceramente.

Como el capítulo final es el de los agradecimientos, quiero hacer agradecimientos especiales, porque es verdad que esta ley no hubiera sido posible si no hay un trabajo constante de todos y cada uno de los miembros que formaban parte de la ponencia.

En primer lugar, presidenta, lo quiero hacer... porque me va a dar un minuto, igual que a todos, entiendo, muchas gracias...

La señora PRESIDENTA: Minuto dado. (Risas).

El señor CURBELO CURBELO: Lo quiero hacer a todos y a todas las ponentes: a Melodie Mendoza, de mi grupo, de ASG, a Elena Luis, del Grupo Nacionalista, a Teresa Cruz, del PSOE, a Pepa Luzardo, del Partido Popular, a Luis Campos, de Nueva Canarias, a María del Río, de Podemos; y he visto como un letrado que no ha tenido ningún tipo de horario, porque ha sido todo entregado durante tanto tiempo, lo quiero hacer de forma especial a don José Ignacio; a las consejeras, a Cristina Valido y a Patricia Hernández, que en esta legislatura han trabajado adecuadamente para ayudarnos; a todos los colectivos y profesionales, a los colectivos profesionales; a los distintos miembros de las administraciones públicas, Fecam, Fecai, a la consejería y a su personal; y a todo el conjunto de voluntarios que han hecho posible enriquecer este texto por el interés de los ciudadanos canarios.

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señor Curbelo.

Turno ahora para el Grupo Parlamentario Nueva Canarias, señor Campos.

El señor CAMPOS JIMÉNEZ: Muchas gracias, señora presidenta. Buenas tardes, señorías.

Darles la bienvenida a todos, a todas las personas que nos acompañan, que son las verdaderas protagonistas durante muchísimos años del sistema público de servicios sociales, de todas esas organizaciones del tercer sector que han tenido que suplir en muchas ocasiones, precisamente, las carencias, las debilidades, de un sistema público que tenía que haber estado presente durante todo este tiempo.

Y hoy es una oportunidad única, porque es el último pleno además, de defender este Parlamento, de defender el trabajo de este Parlamento. Una oportunidad única de defender el parlamentarismo, es decir, con letras mayúsculas, la posibilidad, la capacidad de parlamentar, de hablar, de debatir, de discutir y al final llegar a consensos, porque eso es lo que se ha producido durante casi diez meses en multitud de sesiones, algunas que iniciábamos en la mañana y finalizábamos casi en la tarde-noche, donde varias veces me engañaron diciendo que luego paramos para comer y luego paramos para comer y nunca se paró para comer, en ocasiones, porque teníamos claro que esta ley iba a salir adelante.

Fíjense qué diferencia cuando hablo de la importancia del Parlamento. Cuando se quiere, el Parlamento puede ser tremendamente protagonista a la hora de hacer las políticas en esta tierra. Iniciábamos la legislatura con la primera ley, la Ley del Suelo, la ley más importante de esta legislatura junto con la que debatimos hoy, porque una definía el modelo de territorio y hoy, en el último pleno, por tanto, casi una de las últimas, la última ley, la ley que va a regir también a las personas, fundamentalmente a las personas que más dificultades tienen. Por tanto, la importancia también de poner en valor las formas distintas de actuar: como en ocasiones desde el Gobierno se imponen tesis y se aprueban leyes que aspiran a durar en el tiempo, no contando con la mayoría, o lo que hemos hecho a través de esta ley. Una ley que va a pervivir durante muchos años, porque ha sido fruto del consenso, fruto de la renuncia de cada uno de los que hemos participado en esta ley para que pueda salir, no la mejor ley -a lo mejor- posible desde la perspectiva de cada uno de nosotros, pero sí la mejor ley desde el punto de vista de la pluralidad de lo que representamos cada uno de los grupos políticos que aquí se encuentran.

Estamos hablando de una ley de servicios sociales, como decía, una de las leyes más importantes junto con la del territorio en esta legislatura, sobre todo porque tras más de veinte años de la anterior ley que regulaba los servicios sociales viene a dar un salto importante. Pero quiero dedicarle al menos un minuto a poner en valor la ley de servicios sociales que a partir de hoy quedará atrás.

Una ley, que en el año 1987 se ponía en marcha, tremendamente avanzada; una ley que, a diferencia de lo que algunos han planteado, para nada era una ley asistencialista, solo fue una ley que no se le dio la oportunidad de desarrollarla en su plenitud. Una ley, por tanto, que creo que entre todos y todas debemos reconocer el importante valor que supuso en su momento para apostar por unos servicios sociales de calidad en esta tierra.

Siempre digo que hemos pasado por cuatro etapas para entender de verdad dónde nos encontramos hoy. Al principio, veníamos de un sistema basado en la caridad. Fuimos evolucionando como sociedad y pasamos a un sistema asistencialista, donde lo que intentábamos era, donde había un problema, las administraciones, ya no a través de la caridad sino de sus servicios, intentar paliarlo. La ley de 1987 daba un salto importantísimo, como decía antes, no solo no plantea los servicios sociales desde una visión asistencialista, todo lo contrario, quiere intervenir en el proceso, quiere promover a las personas para que salgan de su situación, crea herramientas para avanzar en ese sentido. Y la cuarta fase, en la que nos encontramos hoy, es un espacio de calidad desde un punto de vista enorme, porque garantiza un derecho esencial. Los servicios sociales a partir de hoy en esta tierra ya no van a depender de voluntades políticas, ya no van a depender de mayor o menor sensibilidad en función de quién gobierna. Los servicios sociales a partir de hoy son un derecho subjetivo de la ciudadanía, son un derecho subjetivo de las personas que viven en esta tierra, con independencia de que hayan nacido o no aquí. Son un derecho subjetivo, como digo, de todos y todas, pero de manera muy especial de aquellos que peor están, de aquellos que necesitan una sensibilidad distinta, una atención distinta también en ocasiones por parte de las administraciones públicas y del resto de la sociedad. Ese derecho subjetivo va a garantizar que podamos exigir a las administraciones públicas, mirándoles de tú a tú, sin pedir favores. No nos dan nada, exigimos un derecho que a partir de ahora corresponde a la ciudadanía, y eso creo que es un elemento esencial. Y ojalá que no, ojalá que no, porque sería un fracaso del sistema público de los servicios sociales, pero si sucediera también asiste el derecho a las personas a poder demandar ante los tribunales que ese derecho se convierta en una realidad.

Es una ley que llega, como decía antes, con el máximo consenso posible, y eso es -valga la redundancia- posible gracias... Y aquí me quiero detener para felicitar de verdad, con el corazón, agradecer enormemente el haber podido compartir todos estos meses de trabajo con personas absolutamente comprometidas, con visiones distintas, hemos tenido muchos espacios de discusión, visiones distintas de lo público, visiones distintas de la forma de abordar los servicios sociales, pero absolutamente comprometidas. Y en ese sentido muchas gracias, María Elena Luis Domínguez, muchísimas gracias a María Teresa Cruz Oval, a ustedes dos un plus añadido de reconocimiento por el esfuerzo que han realizado (aplausos); muchísimas gracias, Pepa Luzardo Romano -creí que nunca iba a agradecerle a Pepa algo (risas), muchas gracias-; muchas gracias, María del Río Sánchez; muchísimas gracias, de verdad, a Melodie Mendoza Rodríguez. Y quiero también darle las gracias al séptimo ponente de esta ley de servicios sociales, a don José Ignacio Navarro Méndez, que se sienta a la derecha pero probablemente estaría a izquierda, alguien que ha ayudado a construir una de las leyes más avanzadas de servicios sociales en todo el país. Una ley tremendamente potente, una ley de última generación, como esta tierra se merecía desde hacía algún tiempo.

Y voy a plantear algunos de los aspectos esenciales que esta ley tiene.

Decía antes, el derecho subjetivo, para mí el elemento nuclear sobre el que debe girar la ley. A partir de ahora los servicios sociales en esta tierra van a estar en el mismo nivel de la sanidad, van a estar en el mismo nivel de la educación, van a estar en el mismo nivel de las pensiones y van a estar en el mismo nivel de la dependencia como derecho subjetivo. Por tanto, ese es un aspecto fundamental, el carácter universal de la misma.

Hemos aprobado un catálogo de servicios y prestaciones muy potente, el más amplio de todo el país. Hemos analizado el resto de leyes, es el más amplio, el más desarrollado de todo el país. Vamos a abordar a través del mismo, y, por tanto, será un derecho de la ciudadanía a exigir y una obligación por parte de las administraciones públicas prestarlo, y además con grandes criterios de calidad, el acceso a la orientación, a la información, a la atención y a la intervención en ámbitos de dependencia, de discapacidad, de igualdad o violencia de género, de infancia y familia o de mayores, de los más vulnerables, de los sintecho, en el ámbito de la tutela, abordamos las prestaciones económicas y los servicios residenciales.

Hay otro aspecto fundamental, un gran avance en esta ley: la atención primaria a partir de ahora tendrá un abordaje también desde el punto de vista comunitario. Solo así es posible atacar las causas que hacen que mucha gente no termine de salir, que muchas familias permanezcan durante mucho tiempo en un círculo vicioso.

Clara definición de los derechos y obligaciones de las personas usuarias y del resto de participantes del sistema público de servicios sociales. Se garantiza la responsabilidad pública de los mismos. En todo caso, el carácter complementario y subsidiario de las entidades privadas, con clarísima prevalencia, en todo caso, de las entidades de iniciativa social del tercer sector.

Se definen claramente los ámbitos competenciales, se crea un comité de ética de los servicios sociales, un plan estratégico, los planes sectoriales, el mapa de servicios sociales, plan de calidad, observatorio canario de servicios sociales, se aboga por la estabilidad laboral y calidad del empleo en artículos específicos.

Y llegamos a uno de los elementos fundamentales también de cualquier ley, si se quiere que sea una ley real, y es la financiación. Pasaremos de casi cuatrocientos millones de euros actuales a más de mil millones de euros probablemente, aunque, eso sí, en un plazo de doce años para el pleno desarrollo de la misma. Pero hemos limitado a solo seis años el desarrollo íntegro del catálogo de servicios y prestaciones, es decir, la parte dirigida a las personas usuarias, dejando el resto del tiempo para llegar a los acuerdos de cofinanciación, absolutamente merecido, con ayuntamientos y cabildos. Se establece la dotación de al menos 55 millones de euros adicionales en los próximos seis años.

Por último, el establecimiento en esta ley, y voy a dedicarle el último minuto a este apartado...

La señora PRESIDENTA: ... un minuto mío, es el suyo. Tiene un minuto.

El señor CAMPOS JIMÉNEZ: Muchas gracias, señora presidenta.

El establecimiento en esta ley del mandato al Gobierno de Canarias de desarrollar mediante ley, en los dieciocho meses siguientes a la aprobación de la misma, una renta de ciudadanía. Algo que no fue posible en esta ley, primero porque lo impidió el Gobierno incluso negándose a su tramitación y porque el Parlamento lo dejó para la siguiente. Dijimos, hace apenas quince días, que en la próxima legislatura sería una realidad y va a ser una realidad, una renta de ciudadanía que está en el artículo 24 de nuestra constitución. En definitiva, un logro importantísimo y del cual siento un orgullo, porque fue una enmienda en esta ley de servicios sociales de Nueva Canarias, donde pudimos agarrarnos a la misma para poder establecer la enmienda de la que estamos hablando.

Todo lo que hemos dicho hasta ahora va a depender de que se cumpla la legalidad, de que la financiación sea adecuada, de no engañar a la gente y a partir de ahí, de verdad, darle a la ciudadanía lo que se merece a través de la misma.

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señor Campos.

Turno ahora para el Grupo Socialista, señora Cruz.

La señora CRUZ OVAL: Buenas tardes. Gracias, señora presidenta.

Quiero comenzar dando las gracias, en primer lugar a mi partido por la responsabilidad mostrada con esta ley; cuando gobernábamos, cuando gobernábamos la pusieron entre sus prioridades, otros pusieron otras, y eso es lo que marca la diferencia entre unos y otros. En el terreno personal, en segundo lugar, quiero dar las gracias a mi grupo parlamentario por permitirme ser la ponente de esta ley. Una ley que es nuestra seña de identidad, pero además en el terreno personal tiene muchas connotaciones en otros ámbitos no menos importantes para quien habla. En tercer lugar, quiero dar las gracias a todas las ponentes y al ponente de esta ley de servicios sociales por su trabajo y por su actitud de conciliar posturas. En tercer lugar, quiero dar las gracias al letrado de esta ponencia por su capacidad de trabajo y por buscar, no una solución, sino la solución a cada problema que le planteábamos. En nombre de mi grupo, muchas gracias. En cuarto lugar, me quiero dirigir especialmente a la señora Luis por su capacidad de trabajo, por su esfuerzo y por su actitud de escucha. Sin esos elementos hoy no estaríamos debatiendo lo que para nosotros y nosotras, los ponentes y las personas que hemos asistido en la ponencia, será para siempre nuestra "ley Margarita". En cuarto lugar, me quiero dirigir al público que hoy asiste a este debate, debate en el que estamos abordando, sin duda, la ley más importante de esta legislatura. Muchas gracias.

Hoy debatimos esta ley después de un extenso trabajo, nueve meses, pero más que extenso trabajo ha sido un trabajo muy intenso. A veces parecía que al final no íbamos a ver la luz de esta ponencia.

Este proyecto es una carrera de fondo y, como cualquier carrera de fondo, no importa cómo empecemos sino cómo hemos terminado. Esta no es una ley perfecta, ni casi perfecta, pero sin duda es la mejor ley que hemos sido capaces de hacer, entre todos y todas, entre todos y todas, pero sobre todo para todos y para todas. Será una ley para todos y para todas.

No es una ley que venga a agradar, a contentar a ningún sector concreto, porque es una ley más ambiciosa. Es una ley que viene a garantizar más protección social en esta comunidad autónoma, y lo va a hacer porque nos hemos esforzado en dar la vuelta al calcetín, no la vuelta al calcetín a este proyecto, sino la vuelta al calcetín de lo que son nuestros servicios sociales. Para eso hemos querido ordenar nuestro sistema público de servicios sociales y clarificar las competencias de las administraciones competentes.

Señora consejera, no puedo tener palabras de agradecimiento ni de felicitación para usted. Sé que es duro, pero no las puedo tener. No las puedo tener, y siento que no esté hoy aquí, ahora mismo, el señor presidente. La semana pasada la felicitaba, la felicitaba por este proyecto de ley. Yo entiendo y quiero entender que tuvo un lapsus y a la que quiso felicitar es a la señora Hernández y no a usted, o en todo caso, o en todo caso, a los miembros de la ponencia, que hemos sido los responsables de esta ley. Porque usted, señora consejera, desde el minuto número uno en que ha llegado al Gobierno, se ha encargado en público y en privado, en público y en privado, de recordar que este proyecto de ley era del Partido Socialista y no ha podido disimular que se le dibuje una sonrisa cuando alguien cuestionaba el proyecto de ley. Señora consejera, en el Partido Socialista nos sentimos muy orgullosos y orgullosas del legado de esta maravillosa ley, porque la primera ley fue aprobada por el Partido Socialista hace treinta y dos años, y esta segunda ley será gracias al Partido Socialista.

Señora consejera, dos legislaturas, dos legislaturas estuvo Coalición Canaria intentado aprobar una ley de servicios sociales. Bastaron dieciséis meses para que la señora Hernández pusiera sobre la mesa un anteproyecto de ley de servicios sociales con sus enmiendas incorporadas. Usted en veintiséis meses no ha sido capaz de culminar ningún proceso de regulación, ni el de adjudicación de viviendas ni de dependencia ni la tan necesaria modificación de la ley del menor, y podíamos seguir planteando, esas que usted esta mañana decía que era urgente emprender. Señora consejera, no minusvalora quien quiere sino quien puede. Los hechos son estos y la realidad es que usted ha hecho muchos anuncios pero ha hecho un nulo trabajo.

Quiero dedicarle un segundo a la ley del año 1987. No puedo estar más en desacuerdo con las personas que plantean que fue una ley asistencialista. No lo fue, fue una ley avanzada, y fue tan avanzada como los políticos y los técnicos que al frente estuvieron quisieron que fuera. La realidad es que nuestra realidad social ha cambiado, se incrementó la población, el número de inmigrantes, las bolsas de pobreza, y podíamos plantear miles de escenarios sociales a los que hay que añadir las nuevas demandas que planteaba la ciudadanía, y son esos elementos los que hacen necesaria una nueva ley de servicios sociales.

Quiero plantear varios elementos que plantea esta ley.

En primer lugar, el eje central de la ley, de la nueva ley de servicios sociales, son las personas, las personas, y es por eso, señor presidente, por lo que esta ley es importante, porque pone en el centro a las personas; y pone en el centro a las personas ofertándoles soluciones a cada una de estas situaciones y necesidades que nos plantean en el conjunto de la dimensión donde se desarrollan, tanto en el ámbito personal como en el ámbito social, como en el ámbito familiar. Por eso es importante. Y es esto, esto, poner en el centro a las personas, lo que obligó a los ponentes de esta ley a priorizar una serie de necesidades que tenía esta comunidad autónoma y que era urgente emprender. Por ejemplo, modificación de la PCI para incorporar nuevos perfiles. Otra cuestión que vimos necesario incorporar de manera inmediata: poder modificar el decreto de compatibilidades e incompatibilidades para poder ofertar a las familias la compatibilidad de servicios como la ayuda a domicilio con el centro de día, como la prestación económica en los entornos familiares. Aquí hay personas que saben perfectamente lo que va a suponer la aprobación de esta ley.

Esa visión también de poner en el centro a las personas es lo que nos hizo apoyar la derogación del decreto 93 del 2014, para las personas que fallecen y no tienen valoración de dependencia, los familiares puedan percibir la prestación correspondiente.

Es una ley que genera un derecho subjetivo nuevo y, en ese derecho subjetivo nuevo, se reconoce una serie de derechos sociales básicos a las personas a partir de que se apruebe esta ley de servicios sociales. Quiero destacar tres: la posibilidad de poder expresar de manera anticipada nuestras voluntades; otro derecho, poder tener un profesional de referencia, que las personas cada vez que vayan a los servicios sociales no sean atendidos por un profesional diferente; otro derecho que quiero destacar es el derecho que van a tener las personas a acceder y a seguir su expediente de manera telemática.

Es una ley...

La señora PRESIDENTA: Un minuto.

La señora CRUZ OVAL: ... igualdad, es una ley para la igualdad, que facilita el acceso universal al sistema público de servicios sociales de todas las personas que residen en esta comunidad autónoma.

Es una ley que les devuelve a los ayuntamientos el protagonismo perdido y sitúa a los ayuntamientos como la puerta de entrada.

Es una ley que apuesta de manera decidida por la calidad del sistema público de servicios sociales. Es una ley que apuesta de manera decidida también por la planificación del sistema, por la coordinación y por el trabajo en red y trabajo integrado. Para ello planteamos el plan de servicios sociales, una estrategia de calidad en los servicios sociales, un mapa de servicios sociales, un consejo de atención sociosanitaria y una evaluación continua de los...

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señora Cruz Oval.

Turno ahora, para cerrar esta intervención de los grupos, del Grupo Nacionalista Canario. Señora Luis.

La señora LUIS DOMÍNGUEZ: Gracias, señora presidenta. Señorías, muy buenas tardes.

Agradecer la presencia del señor presidente del Gobierno, de la señora consejera y de todo su equipo, que me consta que están siguiendo este debate. Y por supuesto dar la bienvenida y agradecer la presencia de todas las personas que han querido acompañarnos en este momento tan importante: profesionales, entidades de iniciativa social, representantes de las administraciones, Fecam, Fecai, profesionales, entre otros.

Señorías, hoy es un día de celebración y con ese espíritu voy a afrontar mi intervención.

Después de un trabajo muy intenso de muchos meses hemos sido capaces todos los grupos de llegar a este momento en el que debatimos y vamos a aprobar la ley de servicios sociales. Como ya dijimos en comisión, ha sido una ponencia bastante dura, intensa, hemos tenido que trabajar mucho, lo han dicho todos los portavoces. Partíamos de un documento inicial que nos ha sido necesario como base de trabajo pero al que le hemos dado la vuelta completamente. Bueno, esa es nuestra labor. Como decíamos la semana pasada, en un principio tuvimos algunas dificultades para establecer una metodología de trabajo que nos permitiera avanzar y al mismo tiempo intentar consensuar lo máximo posible. Como saben, no era una tarea fácil por la gran cantidad de enmiendas que habíamos presentado, por la metodología que elegimos para hacerlo, pero sobre todo, como también ha comentado aquí el resto de portavoces, por las diferencias ideológicas de todos los grupos que, en una ley tan importante como esta, se hacen todavía más visibles. Y, como ya dije, sinceramente, creo que esto da más importancia, si cabe, a lo que hemos conseguido. No solo hemos logrado un altísimo nivel de consenso, que añade valor al trabajo realizado, sino que hemos sido capaces de elaborar un buen proyecto de ley, que estamos convencidos desde el Grupo Nacionalista Canario y desde el Gobierno que responde a las expectativas generadas en todo el ámbito de los servicios sociales y en general en el conjunto de la ciudadanía. Y esto es comprensible, señorías, como ya comenté en comisión, porque una buena parte del contenido de esta ley ha sido elaborada gracias a las aportaciones de esas administraciones, de esas entidades de iniciativa social, que tengo que volver a reconocer que han trabajado muchísimo, a esos colegios profesionales que también nos han hecho aportaciones muy muy valiosas, la Fecam, la Fecai, como decía, incluso los profesionales del ámbito de la justicia y de la Fiscalía, que nos han hecho aportaciones muy interesantes que hemos podido incorporar. Y, por supuesto, no me puedo olvidar de todo el equipo de la Consejería de Políticas Sociales. Señorías, algunos se han olvidado de que, además del trabajo que hemos hecho en ponencia, luego ha habido un trabajo con el Gobierno muy importante. Yo quiero darle las gracias a doña Cristina, a todo su equipo, a la directora general de Dependencia y de forma especial, si me lo permiten, a doña Reyes, directora general de Acción Social, y les aseguro, señorías, que hemos compartido un par de noches, y no precisamente para lo que ustedes se imaginan, sino trabajando. Así que muchísimas gracias.

Lo decía la semana pasada, esta ley viene a sustituir a la que en su momento fue una muy buena ley, la ley de 1987, que más de treinta años después ha visto superado su marco legislativo, evidentemente por los cambios sociales que se han producido en esta comunidad autónoma durante todo ese periodo.

Una de las principales novedades de esta ley -lo ha comentado el resto de ponentes- es que incorpora el derecho a los servicios sociales, constituido como un derecho universal y subjetivo de la ciudadanía, y garantizar ese derecho implica, como hemos señalado en la exposición de motivos, la construcción de un sistema público de servicios sociales moderno, avanzado y garantista, comparable con otros sistemas públicos orientados al bienestar. Estamos hablando, señorías, de avanzar hacia la consecución de lo que se ha denominado el cuarto pilar del bienestar social.

Esta ley contempla la implantación, la ordenación y la consolidación de una red articulada de servicios y prestaciones a los que la ciudadanía va a tener derecho, que están recogidos -ya lo hemos escuchado aquí- en el catálogo de servicios y prestaciones del sistema público bajo las principios de universalidad, dignidad de las personas, igualdad en el acceso, descentralización y proximidad.

Dedicamos un título completo a las personas usuarias y a los profesionales del sistema público, no solo para regular el acceso, sino también hemos querido que queden claros cuáles son los derechos de las personas usuarias y, por supuesto, también sus obligaciones, y lo mismo con los profesionales, con las personas profesionales de los servicios sociales.

La ley dedica un título completo al catálogo de servicios y prestaciones, donde se contemplan, como no podía ser de otra manera, artículos muy importantes, entre ellos los que establecen los servicios, las prestaciones económicas y las prestaciones tecnológicas del sistema.

Hemos establecido dos niveles de atención del sistema público: los servicios sociales de atención primaria y comunitaria -e importante, como decía el señor Campos, la palabra "comunitaria" por lo que supone-, son los municipios, son la puerta de entrada, y los servicios sociales de atención especializada, que prestan fundamentalmente los cabildos, y, bueno, aquellos que han quedado relegados a la comunidad autónoma, que ahora, con este nivel de descentralización que establece la ley, refuerza su función planificadora, coordinadora y fiscalizadora.

Hemos incorporado también un nuevo artículo que valoramos de forma muy importante todos los grupos: la atención a las urgencias y emergencias sociales.

Abordamos cuestiones muy importantes como la Conferencia Sectorial de Servicios Sociales; algo también importantísimo, el sistema canario unificado de información, el registro único de entidades y centros, el plan de intervención social y, evidentemente, también hemos abordado la necesaria colaboración y coordinación entre el ámbito social y sociosanitario y también con la parte judicial, que era una demanda también para incorporar en esta ley, y lo hemos hecho. Hemos abordado el Consejo General de Servicios Sociales, los consejos insulares, municipales y sectoriales. Hay un capítulo muy muy importante que creo que nos ha gustado a todos los grupos incorporar, el capítulo de ética y servicios sociales, y el artículo relativo al partenariado, el patrocinio y mecenazgo. Le dan novedad a esta ley.

Hay un capítulo especialmente importante en esta ley: el régimen competencial y la financiación. Lo decíamos en la comisión, creo que hemos clarificado bastante bien el ámbito competencial, que era uno de los objetivos de esta ley, entre las tres administraciones y valoramos de forma muy positiva que los ayuntamientos y los cabildos tengan que aprobar sus respectivos planes sectoriales, pero sobre todo las respectivas cartas municipales e insulares de servicios sociales. Qué importante es y qué necesario es, era, que contempláramos en esta ley que las personas usuarias supieran en qué momento, a dónde se tienen que dirigir a resolver sus problemas.

En cuanto a la financiación, consideramos que hemos sido realmente valientes aquí incorporando un capítulo completo a desarrollarla. Con dos artículos muy importantes -ya lo han comentado ustedes, señorías-, la financiación a cabildos y ayuntamientos, con compromisos de cofinanciación importantes para los ayuntamientos, por número de habitantes, en tres planes cuatrienales, para los cabildos al menos el 50% del coste efectivo de los servicios. Y esa disposición adicional garantista a la que hacía referencia también el señor Campos: en seis años la implantación total del catálogo, 55 millones como mínimo adicionales, 330 millones en todo el periodo, y esa garantía del 33 % en los primeros cuatro años de cofinanciación, de cumplir los objetivos de cofinanciación.

Se ha ido el tiempo muy rápido.

Hemos incorporado una cuestión muy importante, todo el ámbito de la concertación, de todas las empresas del tercer sector estaban esperándolo hacía mucho tiempo: están dentro del sistema público de servicios sociales, concertación plurianual, anticipos del 75 % anuales. Eso les va a dar una tranquilidad para trabajar, para especializarse, para garantizar sus plantillas.

Hemos incorporado catorce disposiciones adicionales, todas muy importantes, tengo que decirlo. Quizás yo también destacaría ese artículo 24, el Estatuto de Autonomía, el cumplimiento del Estatuto de Autonomía, hacia esa renta de ciudadanía o como finalmente se denomine. Es verdad, tiene una enmienda de Nueva Canarias y de Podemos, pero, señorías, esta iniciativa, o sea, esta disposición adicional, es una disposición de todos los grupos, es una disposición de todos los grupos.

Hemos establecido también disposiciones derogatorias importantes, disposiciones finales, recuerden todas las mejoras de la PCI, que ya de forma inmediata se incorporan una vez que se apruebe la ley. Las hemos mencionado.

Y no quiero terminar, señorías, como ha hecho el resto de portavoces, sin agradecer a doña Josefa Luzardo, a doña Melodie Mendoza, a doña María del Río, a Luis Campos, a doña Teresa Cruz Oval, su trabajo, su esfuerzo, su compromiso por sacar esta ley, por consensuar, con el objetivo de mejorar, de elaborar la mejor ley posible, como ya hemos dicho aquí, por encima muchas veces de las ideas, ya sea doña Teresa Cruz Oval, que le agradezco muchísimo también que nos haya aportado su perfil técnico...

La señora PRESIDENTA: Un minuto más, señora Luis.

La señora LUIS DOMÍNGUEZ: Reiterar el agradecimiento a todo el equipo de la consejería, repito, de forma especial a doña Reyes, y por supuesto nuestro agradecimiento a nuestro letrado, que además de un letrado, como ya se ha dicho aquí, ha sido ponente también de esta ponencia de servicios sociales. Gracias, don Ignacio.

Y termino, y termino, señorías, reiterando nuestro agradecimiento, el del Grupo Nacionalista y también el del Gobierno, a todas las personas, a todos los profesionales, entidades del tercer sector, colegios profesionales, administraciones, Fecam, Fecai. No quiero dejarme a nadie detrás, esto es muy importante, señorías y querida compañera Cruz Oval, esto es muy importante, porque esta es una ley hecha por todos y todas y para toda la sociedad.

A quienes nos han ayudado a elaborarla, muchísimas gracias. Desde luego esto no es ninguna ley de ningún partido, es la ley de todas y todos y para todos.

Muchas gracias.

(Aplausos).

La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señora Luis.

Después, después, aplauden, el público aplaude después, después, al final, al final. Gracias.

Señorías, han concluido todas las intervenciones. Llamo a votación, señorías. (Suena el timbre de llamada a la votación. Pausa). (Rumores en la sala).

Señorías, ruego silencio, por favor.

(La señora Luis Domínguez solicita la palabra).

Dígame, señora Luis.

La señora LUIS DOMÍNGUEZ (Desde su escaño): Discúlpeme, señora presidenta, no me dio tiempo y además me despisté. Tenemos todos los grupos una enmienda in voce de corrección técnica. Simplemente era para recordársela.

Gracias.

La señora PRESIDENTA: Se lo agradezco. Lo iba a decir después de las enmiendas, pero se lo agradezco, señora Luis.

Señorías, vamos a comenzar a votar las enmiendas. ¿Bien?

Comenzamos por la enmienda número... ¿Podemos votar las tres enmiendas en bloque, la 197, 198 y 199, de Podemos? (Asentimiento). ¿Sí?

Pues votamos esas tres enmiendas en bloque, señorías. Comienza la votación. (Pausa).

59 votos emitidos: 26, sí; 32, no; una abstención.

Votamos ahora la enmienda 216, de Podemos, señorías. (Pausa).

59 votos emitidos: 26, sí; 32, no; una abstención.

La enmienda 255, de Podemos, señorías. (Pausa).

59 votos emitidos: 6, sí; 52, no; una abstención.

(Rumores en la sala).

Enmienda -señorías, silencio, por favor-, enmienda 261, de Podemos. (Pausa).

Señorías, 59 votos emitidos: 6, sí; 52, no; una abstención.

Enmiendas, si puede ser, al mismo artículo, la 264 y la 265, de Podemos. Comienza la votación. (Pausa).

59 votos emitidos: 6, sí; 52, no; una abstención.

Enmienda 267, de Podemos, señorías. (Pausa).

58 votos emitidos: 6, sí; 51, no; una abstención.

Enmienda 275, de Podemos, señorías. (Pausa).

59 votos emitidos: 26, sí; 32, no; una abstención.

Enmienda 284, de Podemos, señorías. (Pausa).

59 votos emitidos: 6, sí; 47, no; 6 abstenciones.

Hemos concluido..., perdón, no he votado... porque es a la exposición de motivos, que va al final.

Enmienda número 7 del Grupo Popular a la exposición de motivos. (Pausa).

59 votos emitidos: 11, sí; 47, no; una abstención.

Señorías, pido ahora votación, si es posible, de todo el conjunto de los artículos de la ley, salvo que alguien... (Ante una indicación que se le efectúa). ¡Ah!, las in voce, perdón, tienen razón. Gracias, perdón.

Las in voce, que entiendo que son aceptadas por unanimidad por todos. (Asentimiento). Votación de las in voce, señorías. (Pausa).

59 votos emitidos, ningún no y ninguna abstención.

Pido ahora, si es posible y están de acuerdo, votación de todo el articulado de la ley, señorías, incluidas las disposiciones que tiene la ley también, todo incluido. ¿De acuerdo, señorías? Menos la exposición de motivos, que la votamos a continuación. ¿De acuerdo? (Asentimiento).

Comienza la votación. (Pausa).

59 votos emitidos: 59, sí, ningún no y ninguna abstención.

Votación de la exposición de motivos, señorías. (Pausa).

Señorías... ¿Qué ha pasado? (Una señoría del GP Podemos se equivoca al votar). Se equivocó. Repetimos la votación, señorías. Repetimos. Señorías, señorías, votamos nuevamente la exposición de motivos, señorías. Comienza la votación. (Pausa).

Ahora sí: 59 votos emitidos: 59, sí, ningún no, ninguna abstención.

Queda aprobada la Ley de Servicios Sociales de Canarias, señorías.

(Prolongados aplausos).

Tiene la palabra la señora consejera de Asuntos Sociales.

La señora CONSEJERA DE EMPLEO, POLÍTICAS SOCIALES Y VIVIENDA (Valido García): Buenas tardes, señorías.

En primer lugar, agradecer a todas las personas que nos acompañan hoy su presencia y cómo testimonian, estando aquí, el valor que dan al texto legal que acaba de aprobarse. Fundamental, importantísimo, para todos los canarios, para todas las canarias, para el futuro de las personas más vulnerables, para el desarrollo de una sociedad más justa, donde la gente que lo pasa mal tenga garantizadas sus necesidades.

Quiero empezar no solo saludándolos y dándoles las gracias a ustedes sino también recordando. Hace no mucho tiempo leí que ser feliz era saber celebrar, y yo creo que hoy es día de celebrar. Hoy no es día de resentimientos, hoy no es día de egocentrismos, hoy no es día de tratar de apuntarse el trabajo de tantas personas. Por eso quiero decir que cuando llegué en el año 2017 ya una parte del trabajo estaba hecha y me niego y no repetiré que el trabajo que recibí no servía. Lo de la vuelta al calcetín, doña Teresa, lo ha dicho usted, no yo. Y le doy las gracias a doña Patricia y le doy las gracias a doña Isabel Mena, a la que no puedo ver, con la que trabajé siendo consejera del cabildo para que la ley recogiera espacios sociosanitarios y otras cuestiones. Sé que estará por ahí. Y quiero también darle las gracias porque tuvo una gran capacidad de escucha con los cabildos y con los ayuntamientos y porque el trabajo hecho por mi consejera, por la consejera que me antecedió, ha hecho que hoy estemos aquí, porque, si no, no hubiéramos llegado, señores y señoras, con toda la buena voluntad que ustedes quieran poner. Muchas gracias por su labor.

Hoy han dado una lección a mucha gente que cree que ni siquiera en estos temas somos capaces de poner por encima a las personas a nuestros rencores políticos. Hoy ustedes han dicho a la gente que en plena campaña electoral somos capaces de votar por unanimidad lo que la gente necesita.

Y quiero agradecer también a los funcionarios de la consejería que trabajaron con la consejera anterior y conmigo para estar hoy aprobando también esta ley. A Pedro Ruben, a Carmen Luisa y a Reyes. Reyes, muchas gracias. A todos los miembros de la ponencia y, como ustedes lo han hecho, no les va a importar que yo lo haga. Elena, toda la vida recordaremos que tu capacidad de consenso y tu talante ha regalado a la gente hoy un derecho unánime. Muchas gracias, Elena, porque desde que te conozco el mundo...

La señora PRESIDENTA: Dos minutos más, consejera. Dos minutos más.

La señora CONSEJERA DE EMPLEO, POLÍTICAS SOCIALES Y VIVIENDA (Valido García): Un minuto, un minuto.

Bueno, gracias.

Como digo, desde que te conozco el mundo social ha sido tu mayor preocupación y trabajar contigo siempre es cómodo y siempre es fácil, porque sabes perfectamente de lo que hablamos.

A todo el grupo, al letrado, a todos y a todas, muchas gracias, muchas gracias por la labor enorme que han hecho. Yo estoy segura de que hoy ni siquiera serán conscientes del enorme paso que se ha dado adelante y estoy segura de que con los años muchos y muchas de ustedes recordarán que formaron parte, que pusieron un grano de arena importantísimo, que pusieron muchísimo trabajo en una norma que da oportunidades a quienes lo pierden todo, que hemos entendido, después de una crisis terrible, que tenemos que armarnos de redes y de compromisos para ayudar a la gente, que es el único motivo por el que estamos aquí, el único.

Quiero terminar diciéndoles que para mí ha sido un honor, un orgullo, trabajar con todos ustedes, que incluso desde la discrepancia, con el respeto y la educación, soy capaz de reconocer el valor de cada uno, sin resentimientos ni odios enquistados.

Muchas gracias.

(Aplausos).

La señora PRESIDENTA: Gracias, consejera.

Señorías, antes de continuar con el orden del día, quiero despedir a los colectivos que nos han acompañado, gracias, a todas las personas que están aquí que también han colaborado y han puesto su granito de arena para que esta ley sea una realidad.

Llamo a Junta de Portavoces.

Gracias, señorías.

Llamo a Junta de Portavoces.

(Los señores y las señoras portavoces atienden el requerimiento de la Presidencia). (Pausa).