Diario de Sesiones 83, de fecha 24/6/2025
Punto 31

11L/I-0073 INTERPELACIÓN DEL GRUPO PARLAMENTARIO SOCIALISTA CANARIO, SOBRE LA IMPOSIBILIDAD DE ACOMPAÑAMIENTO FAMILIAR DE PACIENTES VULNERABLES EN LAS URGENCIAS DE LOS HOSPITALES DE CANARIAS Y CUÁLES SON LOS PROPÓSITOS QUE SE MARCA EL GOBIERNO DE CARA A MODIFICACIONES FUTURAS, DIRIGIDA A LA SEÑORA CONSEJERA DE SANIDAD

La señora PRESIDENTA: Bueno, iniciamos ahora el debate de la interpelación del Grupo Socialista Canario, sobre imposibilidad de acompañamiento familiar de pacientes vulnerables en las urgencias de los hospitales de Canarias y cuáles son los propósitos que se marca el Gobierno de cara a modificaciones futuras. Va dirigida a la señora consejera de Sanidad.

Tiene la palabra el señor Pérez del Pino.

El señor PÉREZ DEL PINO: Gracias, presidenta.

Señora consejera, antes de empezar, si esos 30 millones de los que usted hablaba no se los hubiesen quitado a los ricos con el impuesto de donaciones y sucesiones, a lo mejor no tendría usted que pedírselos al Gobierno de España. Pero, bueno, vamos a comenzar con la interpelación.

Hablando de los 30 millones que usted acaba de utilizar que no se los da el Gobierno de España. Con el impuesto de donaciones y sucesiones tendría usted 60 o 70, podría poner mucho más si lo manejasen bien.

Mire, usted el 25 de marzo, en sesión plenaria, en la que yo le pregunté a usted por la situación de pacientes de avanzada edad, muchos con enfermedades neurodegenerativas y oncológicas en fase terminal, que iban a urgencias, y problemas de... (ininteligible) con su salud, se quedaban solos sin posibilidad de acompañamiento familiar... Y en referencia a mi pregunta usted me decía -y le cito textualmente a usted-: está usted haciendo política, como siempre, a golpe de titulares de prens y, desde luego, no nos parece nada serio, no es serio venir aquí a hablar de un ejemplo de un familiar. Eso me dijo usted a mí. Su salida de tono en aquel momento a mí me resultó no solo un poco improcedente, por parte de la máxima responsable de la sanidad canaria, sino un poco insultante. En primer lugar, porque yo había vivido en primera persona una situación con mi padre, que yo respondí a una negativa suya en la pregunta, no porque yo lo sacara en el tema; y, en segundo lugar, porque usted demostró su verdadera deshumanización, usted habla mucho de humanizar, pero se refería usted en esa respuesta a cientos de familiares que han sufrido y están sufriendo estas mismas circunstancias.

Mire, insistía usted en decirme que generalizar era parte de mi política poco seria -me señalaba usted a mí-. ¿Se acuerda? Pues, mire, yo le traigo hoy otros rostros de otras personas que han sufrido lo mismo.

El caso de María. Su padre estuvo en urgencias durante días y seguía a la espera de ingreso. 89 años. Y esta vez había sido el corazón al que le había jugado una mala pasada. Y lamentaba que no lo podía acompañar porque, como no era dependiente y su cabeza aún regía, era muy mayor pero no lo dejaban estar con ella. Y decía: Otra vez estuvo aquí por una infección de orina y lo tuvieron que atar para que no se quitara la sonda porque estaba muy desorientado.

El caso de Nieves, 82 años su madre. Permaneció varios días en el Servicio de Urgencias del Insular. Se quejaba de falta de información y que nadie le hubiese contado qué le pasaba realmente. Su madre tenía principios de demencia y se escapó de Urgencias, salió sola, porque no había vigilancia.

El caso de Eli, su madre, 85 años, con alzhéimer leve, una neurodegeneración, usted lo sabe mejor que yo. Varios días por una infección de orina en urgencias. El día anterior no la dejaron pasar y su intención era convencer a la gente que está en la puerta, a los celadores, de que, por favor, la dejaran pasar.

¿Usted necesita más medidas, más casos, para tomar medidas serias al respecto?

Mire, yo le insto a usted, señora Monzón, a que visite las salas de espera de los hospitales y que les pregunte allí a los familiares lo que está pasando, porque si pisara usted los hospitales para algo más que para sacarse alguna foto inaugurando algo realmente tendría usted una realidad de lo que está pasando, que no ejecuta en este pleno cuando se le pregunta.

Mire, el verdadero problema que debatimos es mucho más profundo y es mucho más complejo, lo sabemos, usted, y lo sé yo, y afecta a lo estructural de la sanidad, afecta a la sanidad y a lo sociosanitario, a ambas cosas. Llevan ustedes dos años evitando utilizar recursos sociosanitarios temporales para mandar a los pacientes sociales y, como ya no tenemos más camas en los hospitales, ahora se les ha ocurrido derivarlos a los hospitales concertados. Esta mañana usted me hacía un comentario de que no eran 1000 pacientes; sí lo son, son seiscientos y pico en los hospitales públicos y el resto en hospitales concertados o privados.

Y a esto hay que sumarle la falta de planificación y de inversión seria, de inversión real. Usted se sube aquí a hablar de inversión real: ¿cuánto ejecutó usted el año pasado de inversión real, señora consejera?

Tienen ustedes las urgencias como si fuesen un cuarto trastero, señora consejera: pacientes hacinados en los pasillos -ha sido una imagen muy común siempre, pero es que ahora es flagrante-, ancianos durmiendo en camillas bajo luminarias -y eso se lo digo yo, que le pasó a mi padre, no me lo cuenta nadie-. ... (ininteligible) de trabajo del personal facultativo y de enfermería, que parecen, con todos mis respetos, hospitales de campaña como los que algunos demandan aquí en la tribuna. Y si hablamos del personal de urgencias, señora consejera, los ejemplos dan verdadera vergüenza. Hay solo tres facultativos de urgencias en el HUC para atender una media de 50 pacientes por turno. Y, con estos datos, 20 facultativos se han ido del HUC en los dos años en que usted está en el Gobierno.

¿Sabe qué pasa?, que mientras las personas mayores, dependientes o no, desorientadas o no y sus familiares están preocupadas por no atenderles con el cariño y como se merecen, usted se sube aquí, a la tribuna, a decir lo que dijo la última vez.

Yo quiero agradecer la empatía y el buen hacer de los profesionales del hospital Insular que tuvieron con mi padre, porque sé de la presión que tenían ese día allí, que estaban desbordados. Porque no es un problema del personal sanitario, señora consejera, es un problema de gestión sanitaria, es un problema de este Gobierno, y desgraciadamente no es un caso aislado, es un caso frecuente.

¿Para qué gobierna usted si cada vez que yo le pregunto algo le echa la culpa al Gobierno anterior? Cada vez que le pregunto algo en esta Cámara, usted hace referencia al histórico, al pasado, al Gobierno anterior. ¿Para qué tienen ustedes el poder entonces?, ¿para no cambiar nada y solo mirar para atrás? Parece ridículo que ustedes en el tiempo que llevan lo único que han hecho, con las responsabilidades que ocupan, es ser absolutamente ineficaces. Y le recuerdo -me queda poco tiempo- que hace unos años algunas personas que ocupan altas responsabilidades en este Gobierno tenían las recetas mágicas para arreglarlo todo. Y yo le hacía un comentario que le voy a recordar hoy, es verdad, había 154 en el 2018, pero es que hoy hay un 30 % más que en el 2023, y hoy tiene usted a personas en su Gobierno, en su consejería, que se jactaban en rueda de prensa de decir que era un problema del Partido Socialista.

Mire, por sus intervenciones yo creo que usted o no es consciente de la responsabilidad que tiene o no sabe realmente lo que significa estar al frente de la gestión sanitaria de esta comunidad autónoma. Y si usted cogiera a sus altos cargos y les dijera que tienen una responsabilidad mucho más allá que ir presentando visores de historia clínica electrónica por las islas y aprovechando para jugar al pádel otro gallo nos cantaba en la sanidad canaria, porque cada vez que ustedes están en el Gobierno lo único que hacen es destrozar la sanidad y la única obsesión que tienen es siempre la misma: favorecer a los suyos, señora consejera.

Yo le pido y le insto a que usted pise los servicios de urgencias antes de responderme con la crueldad con la que usted lo hizo aquel día en esta Cámara.

La señora PRESIDENTA: Gracias, señor Pérez del Pino.

Señora consejera de Sanidad, su tiempo.

La señora CONSEJERA DE SANIDAD (Monzón Monzón): Gracias señora presidenta.

Señor Pérez del Pino, la pregunta era la imposibilidad de acompañamiento familiar de pacientes vulnerables en las urgencias de los hospitales de Canarias y cuáles son los propósitos que se marca el Gobierno de cara a las modificaciones futuras, y prácticamente usted ha hablado de todo menos de eso. Yo voy a ceñirme a la respuesta de la comparecencia y, si le parece, en mi segunda intervención le puedo dar respuesta a todo esto que usted me comenta.

Gracias de todas formas, a pesar de que no le ha interesado en absoluto lo de la tarjeta de AA, doble A, gracias por brindarme la oportunidad de intervenir aquí, en esta Cámara, para abordar un asunto que, sin duda, despierta una sensibilidad compartida por todos los que estamos aquí, supongo. Como consejera de Sanidad comparto plenamente la preocupación que genera esta cuestión.

Y me gustaría empezar dejando claro algo que para mí es esencial: que esta consejería apuesta firmemente por un modelo de atención centrado en la persona, a pesar de que usted cada vez que lo nombro lo ridiculiza. Nuestra voluntad es que siempre los pacientes estén acompañados y muy especialmente aquellas personas que, por su condición clínica, cognitiva o emocional, necesitan más que nunca una mano amiga, una mirada familiar o una voz que les aporte seguridad en los momentos más difíciles. Y somos sensibles a esta realidad y estamos del lado de los pacientes y de sus familias, pero también es cierto que no siempre las circunstancias clínicas o estructurales de los servicios de urgencias permiten garantizar este acompañamiento. Los servicios de urgencias son entornos asistenciales complejos, como usted bien sabe, sometidos a picos de presión asistencial, en los que debemos priorizar la seguridad del paciente, el control de infecciones y, por supuesto, la operatividad del equipo profesional.

Y, dicho esto, en Canarias existe una base legal sólida que reconoce los derechos específicos para los colectivos más vulnerables. Y me refiero al artículo 9 de la Ley 11/1994, de Ordenación Sanitaria de Canarias, que contempla la atención preferente a las personas mayores con enfermedades crónicas, mentales o en situaciones de riesgo. Ya en el año 99 se establecieron los primeros criterios para diferenciar la tarjeta sanitaria de las personas con deterioro cognitivo que precisaban acompañamiento durante la visita médica o la atención de los servicios de urgencias, para lo que se adoptaron medidas organizativas al respecto. Medidas que diecinueve años más tarde, y gobernando Coalición Canaria, haciendo referencia al pasado también puedo hablar de Coalición Canaria, fueron ampliadas y adaptadas a la nueva realidad, a través de la Instrucción 12/2018 que se sigue aplicando actualmente en todas las gerencias del Servicio Canario de la Salud. Esta instrucción recoge la detección en las consultas de atención primaria de los pacientes subsidiarios de las medidas de accesibilidad y acompañamiento, que es la doble A, el procedimiento para su identificación a través de Drago AP o las medidas organizativas que deben llevarse a cabo en las unidades asistenciales para ofrecerles una atención sanitaria y ajustada a sus necesidades. Incluye un listado de patologías que dan derecho a disfrutar de la tarjeta doble A, como la demencia moderada o grave y la discapacidad intelectual, trastornos del espectro autista con graves alteraciones de conducta, trastorno mental grave, sordoceguera o parálisis cerebral, entre otras. Por tanto, cuando un paciente acude a un centro sanitario y se identifica que dispone de tarjeta sanitaria doble A, se minimiza el tiempo de espera, respetando la hora que ha sido citado para que permanezca el menor tiempo posible en el centro sanitario, se garantiza el acompañamiento en todo momento de familiar o cuidador en las consultas y durante la realización de las pruebas cuando la situación clínica lo permite y se proporcionan de forma coordinada las diferentes citas para poder reducir, en la medida de lo posible, las consultas y las estancias en el centro sanitario. Y en los servicios de urgencias, ante un paciente con estas características, se procurará, si las condiciones lo permiten, no hacerles esperar y que puedan estar acompañados.

Estas medidas se están aplicando y así lo confirman nuestros centros, como apuntaré de todas formas en el segundo turno de mi intervención, pero somos conscientes de que desde luego tenemos que avanzar muchísimo más, especialmente en que la población conozca que esta tarjeta doble A existe. De ahí que hemos ido adaptando nuestras políticas a las necesidades actuales, como refleja que el pasado 5 de noviembre publicásemos la Estrategia de Atención Centrada en la Persona 2025-2029, que incorpora una acción concreta para el impulso y la difusión de esta instrucción del año 2018. Esta estrategia busca promover un enfoque más humano y personalizado en la atención sanitaria y se centra en mejorar el bienestar de los pacientes y profesionales, creando un entorno de trabajo más saludable y también más efectivo.

En línea con la acción indicada, se han desarrollado diversas acciones de difusión por la Dirección General del Paciente y Cronicidad con el objetivo de garantizar que todas las personas que cumplan estos requisitos puedan beneficiarse de la tarjeta de accesibilidad y acompañamiento. Una de ellas ha sido la difusión en una nota de prensa, el pasado 23 de abril, explicativa de las situaciones especiales de los pacientes y beneficios a la hora de ser atendidos en la red asistencial pública del archipiélago si se cuenta con esta identificación.

En paralelo, se ha elaborado un documento explicativo de carácter unificador sobre esta tarjeta sanitaria, que se dirige tanto a los profesionales como también a la ciudadanía. Este material incluye información clave sobre quién puede solicitarla y cómo se tramita. Está disponible en formato electrónico en todas las gerencias del Servicio Canario de la Salud y está previsto su despliegue en formato de cartelería con el objetivo de garantizar la máxima difusión de esta información.

También se ha publicado un banner informativo en el portal de la UAP, donde se recoge también la manera de poder acceder a la gestión de esta tarjeta. Y, asimismo, se ha remitido un oficio a todas las gerencias recordando la importancia del cumplimiento de la Instrucción 12/2018 y la necesidad de identificar las barreras existentes o las posibles áreas de mejora en los circuitos de atención, con el fin de contribuir a su correcta implantación.

Respecto a la aceptación de la tarjeta sanitaria doble A entre los usuarios, desde luego va en aumento. Fíjese, en el año 2023 había 19 600 tarjetas y a día de hoy, en el año 2025, a 30 de mayo, ya contamos con 30 365 tarjetas. Por lo tanto, está funcionando el que la gente la pueda desde luego solicitar.

Somos conscientes de que existen situaciones en las que los familiares no pueden acompañar a sus seres queridos en urgencias, por lo que desde aquí desde luego me gustaría aprovechar este momento para expresar mi comprensión y cercanía hacia esas familias, pero la seguridad prima por encima de todo.

Muchas gracias.

La señora PRESIDENTA: Gracias, señora consejera.

Señor Pérez del Pino, Grupo Socialista, su tiempo de réplica.

El señor PÉREZ DEL PINO: Gracias, presidenta.

Señora Monzón, yo tengo la sensación de que usted no se ha enterado de nada de lo que yo le he dicho aquí hoy, no se ha enterado usted de nada de lo que le he expresado yo aquí hoy.

Mire, usted me habla del circuito de la tarjeta AA. Eso es un circuito que está vinculado a la atención primaria y el problema lo tenemos en los hospitales, señora consejera. Hay pacientes que llegan a las urgencias y no han pasado por la atención primaria.

Mire, yo le voy a ser más explícito si cabe. Canarias tiene un problema serio con las urgencias a día de hoy en los hospitales, que se agrava por falta de políticas concretas y se agrava por falta de inversión, porque hace falta un despliegue de atención sociosanitaria que no estamos haciendo.

Mire, usted habla de picos de atención asistencial. Señora consejera, por favor, vaya usted cualquier noche a un servicio de urgencias en un hospital canario. Se lo decía antes a su compañera de Bienestar Social, lanzarles la pelota a los cabildos no ha resuelto el problema, y ustedes lo saben, desde el 2017, pero tampoco hacen nada. Se suben aquí, a la tribuna, a decir que la culpa es de los cabildos, que no lo ejecutan. Y todavía estoy yo por ver, la estrategia que ustedes anunciaron hace un año y medio, a ver realmente qué incorpora esa estrategia, porque, como le dije esta mañana, solo ha licitado usted una planta en el hospital Juan Carlos I con cincuenta y pico camas, que no arregla el problema. Más camas en el hospital que obstaculizan la gestión de los quirófanos nuevos en la nueva unidad de CMA, más pacientes derivados a hospitales privados a precio de oro, por no adoptar medidas como las que tenía propuestas el anterior Gobierno.

Y usted mucho habla de humanizar, pero cuando hay que tomar medidas para los canarios, señora consejera, lo único que la veo hacer es subirse aquí, a la tribuna, y contarme la historia que le escribe alguien, porque la realidad es completamente otra, es completamente otra.

Miren, pacientes vulnerables en las urgencias, desorientados y solos, facultativos que escapan de las urgencias porque son incapaces de aguantar la presión, las familias mostrando su enfado, no solo yo -y me perdona en primera persona-, sino todas las que salen en los medios de comunicación refiriéndose a esto. Y todo esto es por culpa principal de la nefasta gestión de su director del Servicio Canario de la Salud, que la ayuda a usted a meter las cosas bajo la alfombra, eso que a usted le gusta tanto que yo le diga.

Mire, yo le hablaba hoy en nombre de personas como María, como Nieves, como Eli, que han sido hijas con sus padres, sus abuelos en estos servicios. Pero es que ustedes no han pisado una maldita área de urgencias fuera de una presentación. Váyanse sin avisar a nadie, miren lo que pasa.

Usted me tildó de poco serio y de hacer política con titulares cuando reivindicaba lo que está pasando en urgencias, señora consejera. Dígale con la misma seriedad a su director del Servicio Canario de Salud que no basta con irse de almuerzos y cenas a todas las islas y de jugar al pádel para arreglar los problemas de la sanidad canaria, especialmente en las urgencias, porque mientras ustedes hacen eso para presentar un visor los pacientes están hacinados en las urgencias y, por mucha inversión real que usted ponga en el presupuesto, no son capaces de ejecutarla.

Hagan, por favor, el favor de tomarse en serio la responsabilidad que ostentan, que no es poca, es la sanidad de todos los canarios.

La señora PRESIDENTA: Gracias, señor Pérez del Pino.

Su tiempo de réplica, señora consejera.

La señora CONSEJERA DE SANIDAD (Monzón Monzón): Muchas gracias, señora presidenta.

Bueno, está claro que usted no ha venido aquí a hablar de la tarjeta doble AA. Yo creo que en mi primera intervención ha quedado claro para lo que es, lo que estamos haciendo y el programa que realmente estamos llevando a cabo, porque además nosotros fuimos los que pusimos la Dirección General del Paciente y Cronicidad y es de ahí de donde estamos sacando esa estrategia de humanización y ese refuerzo de esta tarjeta doble A para que todo el mundo la pueda tener.

Me dice usted que yo no me entero de nada porque la gente aparece en urgencias sin haber pasado en la vida por el centro de salud. Puede, efectivamente, que haya pacientes que pasen por primera vez en su vida a un hospital sin haber pasado por la atención primaria, pero lo normal y lo común y lo general y el número mayor es que todo el mundo tenga una revisión en su centro de salud con su médico de cabecera; así es como la sanidad se organiza y como realmente los pacientes van, y van a atención primaria y de ahí se hace esa ida hacia la atención hospitalaria. De todas formas, efectivamente, puede haber un paciente que no haya pasado nunca por atención primaria, sí, y se le atiende con total profesionalidad, con absolutamente total profesionalidad. Y la verdad es que es una pena que usted aquí suba a la tribuna para decir que es que resulta que tratamos mal a los pacientes porque no dejamos entrar a su familia. En en muchos casos lo hacemos justamente para proteger y supongo que usted también estará ahí conmigo y estará de acuerdo.

Con respecto a la estrategia sociosanitaria y a lanzar la pelota a los cabildos y al visor, no tengo mucho tiempo para contestarle, quizás a lo mejor me debería poner otra interpelación para hablar de estos temas, que también son interesantes, no la de hoy, pero, bueno, le contesto. Lanzar la pelota a los cabildos, no se ha lanzado ninguna pelota a los cabildos, más que nada porque los cabildos no tenían la canasta, es decir, no hicieron el Plan de Infraestructuras Sociosanitarias y por mucho que lanzara una pelota ellos no la pudieron coger porque no estaban en eso. No les importó eso, no les importó eso y ahora estamos viendo lo que realmente le importó en aquel momento al Partido Socialista la gestión de sus cabildos.

Y con respecto a la estrategia sociosanitaria la invito a que la conozca. Estamos terminándola ya, con los informes últimos que son los informes jurídicos. Y desde luego le digo que no será Sanidad quien tenga que invertir para hacer esas plazas sociosanitaria, porque le recuerdo que la gestión sociosanitaria la tiene el Gobierno de Canarias, en política social, y desde luego siempre con los cabildos, que espero que esta vez sí que colaboren y podamos hacer plazas y contar con esas plazas.

No obstante, tener en cuenta que esta consejería y este programa de consejería que tenemos puesto encima de la mesa desde hace mucho tiempo está claro que le duele, primero dijo que el visor no iba a salir y ahora le molesta que el visor haya salido. Aclárese muy bien porque lo que está haciendo es volver loco al pueblo y creo que los políticos ya en Madrid los están volviendo locos, vamos a dejar que en Canarias se... (Corte automático del sonido).

La señora PRESIDENTA: Gracias, señora consejera.

Suspendemos la sesión. Reanudamos a las cinco de la tarde con la PL-8.

Gracias.

(Se suspende la sesión a las catorce horas y cincuenta y seis minutos).

(Se reanuda la sesión a las diecisiete horas y seis minutos).

La señora PRESIDENTA: Señorías, buenas tardes.

Buenas tardes, señorías.